Don Alejandro sufrió graves quemaduras cuando su ropa se incendió acciden taimen te mientras cocinaba.
Don Alejandro sufrió graves quemaduras cuando su ropa se incendió acciden taimen te mientras cocinaba.
Poco Poco antes de Navidad del año pasado, Alejandro Fernández, emprendedor de origen argentino y dueño de la pizzería El Obelisco, ubicada en avenida Los Raulíes 0372, en el sector Conavicoop de Labranza, vivió un momento que cambiaría su vida. Mientras preparaba pizzas en su local) un descuido lo llevó a acercarse demasiado a una cocina encendida, lo que provocó que su ropa comenzara a arder de inmediato. “El poliéster prendió al instante. Intenté apagar el delantal, pero las llamas se extendieron rápidamente) relató Fernández. Como consecuencia del accidente) sufrió graves quemaduras en el torso, que lo mantuvieron hospitalizado durante 53 días en el Hospital Hernán Henríquez de Temuco. Alejandro, quien anteriormente residía en Reñaca, donde también tenía un local, decidió trasladarse a Labranza en busca de una vida más tranquila. A pesar de llevar pocos meses en la localidad) el emprendedor destacó el apoyo yla solidaridad de sus vecinos y clientes durante su recuperación. “Recibí muchas muestras de cariño y preocupación. La gente se comunicó conmigo mientras estaba en el hospital, y eso me dio mucha fuerza”, expresó. REAPERTURA Aunque fue dado de alta) Fernández aún enf renta un largo proceso de recuperación, que incluye tratamiento médico y medicación constante debido a las secuelas de las quemaduras. Sin embargo, con el espíritu inquebrantable que caracteriza a los emprendedores en Chile, decidió retomar su negocio casi de inmediato. “Si no trabajo, no como, y había muchas cuentas por pagar”, afirmó con determinación. Así, la pizzería El Obelisco reabrió sus puertas y ahora atiende de lunes a domingo, desde las 12 del día hasta las 12 de la noche.
El local continúa ofreciendo su imperdible promoción de dos pizzas familiares por $12.990, además de una amplia variedad de sabores y mezclas preparadas de manera artesanal y personalizada, “a gusto del cliente”. Don Alejandro invitó a la comunidad a visitarlo y disfrutar de sus exquisitas preparaciones, que llevan el inconfundible sabor argentino que lo ha hecho destacar en Labranza desde que abrió su negocio. La historia de este emprendedor no solo es un testimonio de resiliencia y esfuerzo, sino también un ejemplo de cómo el apoyo de la comunidad puede marcar la diferencia en momentos difíciles. Con su pizzería nuevamente en funcionamiento, este emprendedor espera seguir conquistando los paladares de los labranzinos y agradece a todos quienes lo han acompañado en este proceso de recuperación. Don Alejandro sufrió graves quemaduras cuando su ropa se incendió acciden taimen te mientras cocinaba..