La australiana que estuvo 20 años en la cárcel por la muerte de sus cuatro hijos y fue salvada por la ciencia
La australiana que estuvo 20 años en la cárcel por la muerte de sus cuatro hijos y fue salvada por la ciencia En En Agencias/Redacción ajusticia australiana dijo L=: sia que ¡ ln mizará con 1,3 millones de dólares a Kathleen Folbigg, quien fue absuelta en 2023 tras pasar20 años en prisión por la muerte de sus cuatro bebés.
Este mediático caso, por el quela acusada llegó a ser considerada "la peor asesinaen serie" de su país, dio un giro de 180grados gracias a una investigación genética que planteó dudas sobre la muerte de los hijos y logró quese reabriera.
LA MUERTE DE LOS BEBÉS Caleb, Patrick, Sarah y Laura, loshijos de Folbigg, fallecieron entre 1989 y 1999 en HunterNewcastle, a unos 120 kilómetros de Sídney, cuando tenían entre 19 días y 18 meses, mientrasestaban bajo su cuidado.
Casada en 1987 con Craig Folbigg, todo comenzó cuando Kathleen gritó a su marido la noche del 20 defebrero de1989 "algo le pasa ami bebé", al descubrir que su primogénito, Caleb, no respiraba, muriendo 19 días después de nacer. "Pasó de nuevo", lloró Kathleen Folbiggal pedirle asu marido que regresara a casa cuando su segundo bebé, Patrick, quien ya padecía de daño cerebral, ceguera parcial y ataques epilépticos, murió un 13 de febrero de 1991 a los ocho meses de edad. KATHLEEN FOLBIGG (58) FUE CONDENADA A 40 AÑOS DE PRISIÓN, QUE FUERON REDUCIDOS A 30. En el tercer caso, Folbigg halló a su hija Sarah, de diez meses y medio, azul e inmóvil, muriendo el 30 de agosto de 1993. Seis años más tarde, el 1 de marzo de 1999, su cuarta hija, Laura, fallecía los 18 meses después de quesu madrela pusieraa dormir lasiesta.
Inicialmente, los expertos consideraron que Caleb y Sarah fueron víctimas deuna muerte súbita y Patrick de un ataque de epilepsia, mientras dejaron como "indeterminadas" las causas del deceso de Laura, lo que abrióla puerta a investigar posibles infanticidios. Las investigaciones penales comenzaron en1999, poniendo especial atenciónenel diario de Folbigg.
En él escribió: "Soy la hija de mi padre", en alusión a su padre biológico, quien mató a puñaladas a la madre de Folbiggen1969, cuando ella era un bebé de 18 meses, después de quela mujer se fuera decasa.
Folbigg, quien se separó de su marido en el año 2000, escribióensudiario: "Mesientolapeormadre del mundo, tengomiedo de que medejecomolo hizo Sarah (su hija). Sé que tenía poSarah (su hija). Sé que tenía poSarah (su hija). Sé que tenía pojesenlos que decía quesu estrés la hacía "hacer cosas terribles". Estos textos fueron clave en su posterior condena en 2003 por el asesinato de Patrick, Sarah y Laura, asícomo el homicidio involuntario de Caleb, a 40 años de prisión -más tarde reducidosa30 años-. Lajusticia sentenció quelas pruebas demostraban que Folbigg, quien siempre defendió su inocencia, había asfixiadointencionalmente a los menores. EL "EUREKA" DE LA CIENCIA El caso dio un giro en 2020, cuando un equipo de 27 científicos internacionales, liderado por el danés Michael ToftOvergaard, concluyó que los decesos delos bebés podrían debersea causas genéticas.
Lainvestigación, publicada enlarevista "Europace", de la Asociación Europea deCardiología, vincula una mutación genética (CALM2) de dos de los niños, conlamuertesúbitacardíaca, así como constató que los niños portaban variantes raras de un gen que mataa roedores por epilépticos. El casofue reabierto nuevamentearaízdeuna carta enviada en marzo de 2021 alas autoridades australianas por uncen1enar de científicos, incluidos dos premios Nobel, para solicitarel indulto y laliberación de Folbigg, ahora de 58años.
Larevisión del proceso, realizada en julio de 2023, concluyó que existían "dudas razonables sobre la culpabilidad" de Folbigg y ordenó su puesta en libertad inmediata, mientras queen diciembre deese año un tribunal anuló las condenasimpuestasala australiana. Os puestasala australiana. Os.