Que las instituciones funcionen
Que las instituciones funcionen Aunque parece que la frase resonara hace más tiempo, hace tan solo quince años que Ricardo Lagos acuñó la frase de "dejarquelas instituciones funcionen", pero los hechos han demostrado que ese mantra requiere del esfuerzo de cada uno, más que una simple espera inocente y confiada en que alguien más resolverá los problemas. Porque se nos olvida que todas las instituciones nacen y se de sarrollan con un fin y en un contexto determinados y que, ade: más, son imperfectas. Entonces, si no colaboramos en aportar a ese fin, y no entendemos ese contexto, no habrá institución que aguante.
Nos pasa en lo cotidiano cuando queremos una ciudad ordenada y un mundo libre de abusos, pero com: pramos en la cuneta sin pagar im: puestos y aprovechamos cada res quicio para sacar ventaja del resto e insultamos a los que no coinciden con lo que pensamos. Llevamos décadas escuchando de las buenas intenciones por construir un mundo mejor, pero algo parece no cuajar: el ambiente se sigue deteriorando, a pesar de que son varias décadas de alerta por el cambio climático. Llevamos décadas alertando por el alza dela violencia, pero hoy los conflictos entre escolares se resuelven a balazos. Instituciones hay. De hecho, cada vez hay más apoyo y más me canismos para resolver conflictos y evitar desastres, Pero falta al. go esencial: nuestro esfuerzo.
Porque no hay suficientes funciona rios en Contraloría, en Fonasa, ni en las Isapres para fiscalizar ca da licencia "tirada" por un trabajador que no pudo conseguir per miso, no hay suficientes detectores de metal para que no entren armas alos colegios, no hay suficientes funcionarios municipales para mantener nuestra ciudad limpia y ordenada, no hay suficien: para mantener nuestra ciudad limpia y ordenada, no hay suficien: Hay que dejar de esperar que vengan leyes o autoridades que arreglen los problemas.
Hay mil versiones del refrán "hecha la ley, hecha la trampa". No se arregla una sociedad si no intentamos ser mejores. sociedad si no intentamos ser mejores. sociedad si no intentamos ser mejores. tes policías para evitar robos y accidentes. Lo ques hay son conciencias.
Si pensamos por un segundo que las reglas son solo lo que la sociedad propone para tratar de resol ver los problemas y no un estorbo para poder hacer aquello que quiero, dejamos de buscar resquicios y apuntamos a vivir mejor. Si nuestras decisiones empiezan a considerar lo que nuestra ac ción o inacción causa en el otro, hay menos problemas que en: frentar y delitos que evitar. Y porsupuesto que cansa. Por supuesto que es difícil verque hay cada vez más gente a la que no le importa. Que hay más gente que es capaz de cometer infracciones y hasta delitos a vista y paciencia de to do el mundo, incluso de la policía. Y la tentación de hacer lo mismo es grande. Peroes ense minuto que em. pezamos a desear que las institucio nesno funcionen. Porque podrían fis calizarme a mi también. Y ya no es un tema solo "de ellos", sino que mío. Es momento de dejar de esperar que vengan leyes o autoridades que arreglen los problemas. Hay mil versiones del refrán "hecha la ley, hechala trampa" por lo que ninguna autoridad ni reglamento po: drá arreglar una sociedad que no tiene la intención de ser mejor. Debemos partir por recuperar nuestras buenas intenciones y la consideración por los demás y solo así po dremos ver quelas instituciones funcionan. ¡ZA CLAUDIO PARÉS BENCOECHEA Facultad Ciencias Económicas y Administrativas Universidad de Concepción.