Autor: ISIDORA GARCÍA G. Directora Social Techo-Chile
La pobreza en Chile
Señor Director: Lo sospechábamos. La pobreza del 6,5% anunciada por el Mideso en 2022 no estaba reflejando la realidad social en Chile.
Según la propuesta entregada este jueves por la Comisión Asesora para la Actualización de la Medición de la Pobreza —que considera parámetros más exigentes y acordes con los nuevos fenómenos—, la cifra es de 22,3 %. Esto confirma lo que nuestros voluntarios ya sabían: en Chile sigue habiendo miles de familias cuyos colchones se mojan en invierno; niños que no pueden asistir al colegio por el barro que les impide salir de casa, que crecen en barrios sin iluminación; madres que compatibilizan tareas de cuidado y economía del hogar, viviendo sin acceso a servicios básicos, y un sinfín de otras consecuencias de la informalidad. Actualmente, las realidades de quienes habitan campamentos en nuestro país son más heterogéneas.
Hay aprovechamiento en ciertos sectores, pero resulta innegable que las más de 120 mil familias que hoy viven en estos lugares son, en lo grueso, una manifestación concreta de este 22,3 % de pobreza, una realidad que nos cuesta asumir en un país que se piensa próspero. La mitad de la población ocupada percibe un sueldo igual o inferior a $582.559, con el que no alcanza para acceder a la vivienda que ofrece el mercado formal. Es precisamente esa brecha la que no se estaba midiendo adecuadamente.
Porque frente a ese desacople sabemos que existen cada vez más familias expuestas auna tremenda fragilidad: a una enfermedad o una pérdida de empleo de distancia de tener que llegar a vivir a un campamento. valoramos esta propuesta, que permitiría modernizar nuestros parámetros y reenfocar las políticas públicas según las necesidades reales de las personas. Esperamos que esta sea la prioridad del Chile 2026 y que así lo comprendan quienes hoy disputan la presidencia. Porque el verdadero progreso del país debe medirse en que nadie quede atrás.