Alberto Larraín, el multipropósito fundador de ProCultura
Alberto Larraín Salas cuidarme cuando nací, no terminó la básica pero era muy sabia, siempre me decía que servir a otros era un regalo". Es tanto lo que escribe en Facebook y Twitter sobre salud mental que aclaró "alguien me pregunta por qué hincho tanto con el tema.
Simple: porque cuando uno ha vivido en carne propia la ideación suicida uno sabe que el tratamiento es algo de vida o muerte". A los 21, explicó a La Segunda el viernes pasado, tuvo una hospitalización psiquiátrica.
A veces, su apellido le pesa. "Agradezco a quienes piensan que podría estar en la Convención (... ). Mi apellido está sobrerrepresentado en el poder y eso es suficiente razón para no hacerlo". CV médico menos conocido La información de su carrera como médico es inversamente proporcional. En 2009 se tituló de médico cirujano.
Dirigió el Consultorio de Salud Mental de Peñalolén sin haber cursado la beca de psiquiatríacuando era alcalde Claudio Orrego (2002-2014). Al actual gobernador de Santiago lo apoyó en 2013 en las primarias DC y de la Nueva Mayoría (resultó tercero de cuatro). Larraín comenzó a militar en la DC en 2011 (ver recuadro). Asesoró en temas de salud mental a Jaime Burrows (DC), subsecretario de Salud Pública entre 2014 y 2018, cuando ya cursaba la especialidad de psiquiatría. Integró la comisión sobre discapacidad creada por Michelle Bachelet en 2014.
Tiene al menos tres publicaciones especializadas. "Telepsiquiatría: una revisión sistemática cualitativa", que examinó papers sobre consultas psiquiátricas no presenciales junto a otros tres autores (Revista Médica de Chile, 2012). Un capítulo en el libro "Construcción social de las demencias de las personas mayores en la Región Metropolitana" (Flacso, 2015). Y otro capítulo titulado "Caracterización del suicido en Chile: que nos dicen nuestras estadísticas", con Francisca Lobos (Flacso, 2017). La beca de psiquiatría, que cursó entre 2014 y 2017, no la financió el Estado y la hizo en el Hospital Psiquiátrico José Horwitz, campo clínico de la U. de Chile. Desde hace algunos años es docente en Medicina de la U. Autónoma. No ejerce la psiquiatría en consulta privada.
Inicios y vínculo jesuita Exalumno del colegio San Ignacio de Alonso Ovalle, fue novicio por un breve período y mantuvo una cercanía con los sacerdotes jesuitas que le fue muy útil para conseguir tres importantes proyectos en los inicios de ProCultura.
En 2011, la restauración del salón de "Agradezco a quienes piensan que podría estar en la Convención (... ). Mi apellido está sobrerrepresentado en el poder", Twitter L a escena comienza con un joven de 27 años, recién titulado de médico cirujano, grado que otorgan las universidades, en este caso, la Chile, antes de la especialización. Al otro lado, una pedagoga de la UC, dedicada a la fotografía y al patrimonio, de 51 años. El es Alberto Larraín Salas; ella, Ilonka Csillag Pimstein.
Juntos crearon en 2009 la fundación ProCultura, que no es la más antigua, pero es una de las que más fondos del Estado se ha adjudicado en el último tiempo. ¿Qué los unía? La amistad de Alberto Larraín Lohmayer, el padre del ahora famoso médico psiquiatra por su fundación, con Ilonka Csillag. Por algo, Alberto Larraín Lohmayer fue el primer presidente del directorio de ProCultura. Ella sabía mucho de patrimonio; él, poco y nada.
Sí tenía una llegada indirecta al mundo de la cultura: en 2007 se casó con Josefina Huneeus Lagos -hija de Carlos y Marta-, pero no eran sus suegros los más cercanos al mundo patrimonial y cultural. Era Marta Cruz-Coke de Lagos (DC), directora de la Dibam (bibliotecas, archivos y museos) entre 1993 y 2000, y abuela de quien fuera su mujer hasta 2021 cuando se divorciaron. Ahí surgen las primeras hebras de las redes de Alberto Larraín (41). Papá torturado, abuela nana Muchos aspectos de su vida los comparte en Twitter. Contó que su padre a quien identifican como militante DC en el partidofue torturado. Su nombre aparece como una de las 27.255 personas en que la Comisión Valech alcanzó la convicción moral de que fueron detenidas por razones políticas. Un 94%, concluyó la comisión, fue torturada.
También que su abuela paterna Luisa Lohmayer Linares "dejó de ser nana para Fundación investigada por adjudicación de fondos públicos: Alberto Larraín, el multipropósito fundador de ProCultura De la psiquiatría al patrimonio; de la DC al Frente Amplio, opinólogo de la vida, salud mental, coyuntura y proyectos de su fundación. Ahora está en la mira.
Por Ximena Pérez Villamil "Cuando uno ha vivido en carne propia la ideación suicida sabe que el tratamiento es algo de vida o muerte", Twitter Alberto Larraín, el multipropósito fundador de ProCultura. actos de su colegio por $240 millones.
El Fondo para el Patrimonio creado por el Consejo de las Culturas aportó un 50% y los jesuitas el otro 50%. Casi en paralelo, la fundación recibió otros $240 millones con el mismo sistema de financiamiento para restaurar el cielo y diez altares de la iglesia del colegio. Y otros $240 millones para el cielo y el interior de la iglesia de los jesuitas de Valparaíso.
A los pocos años, por culpa de las termitas, que no fueron advertidas, el cielo se desmoronó.. Las obras no las hacía ProCultura, sino que las subcontrataba, pero es sabido que quien se adjudica los fondos es responsable del resultado final.
La encargada de los tres proyectos fue la firma de restauración arquitectónica Project & Heritage, del experto italiano Walter Bee, marido de Macarena Carroza, historiadora del arte y fundadora de Crea, dedicada a la restauración de arte. Fue un gran salto, sin duda, para una fundación con tres años de vida. Expansión reciente Eficiente gestora, Ilonka Csillag (65) armó el Centro de Patrimonio Fotográfico, el primero especializado en rescatar y conservar fotos chilenas antiguas, donde trabajó entre 1989 y 2008. Lo dejó para irse a la Corporación Patrimonio Cultural de Chile, la más antigua en su tipo y que opera con fondos privados, en la que estuvo un año como gerenta general. Ahí aprendió cómo hacer alianzas con privados, el manejo de la ley de donaciones culturales, cómo participar en grandes proyectos de restauración y accedió a una valiosa red de contactos. Lo aplicó en ProCultura, que fundó con Larraín al año siguiente. Csillag fue su directora ejecutiva hasta 2018, cuando pasó a ser directora y se encuentra semi retirada. Fue reemplazada por Alberto Larraín. Y el presidente es el médico Allan Mix Vidal.
En su historial posee variados proyectos con participación de privados, como la reparación y pintura de 30 casas patrimoniales en Tierra Amarilla con la minera Candelaria y el municipio, y la restauración de refugios de montaña con Angloamerican y el Ministerio de las Culturas. De sus pares, ProCultura es la de mayor cobertura geográfica en Chile: 11 regiones y 47 comunas.
Desde Iquique, con la restauración de su estación de trenes, apoyada por la Seremi de las Culturas, a Magallanes, con la restauración del cine de Primavera, el más austral del mundo, con apoyo de la Enap, pasando por Lota, con murales, archivos de fotos y la administración del parque Cousiño, la mina Chiflón del Diablo y el Museo del carbón. La fundación se expandió desde el rescate patrimonial, en alianzas públicoprivadas, a otras áreas como la salud mental y con otras entidades estatales. Con el Gobierno Regional de Antofagasta se adjudicó los cuestionados $629 millones para la pintura de fachadas en Antofagasta.
El Gobierno Regional de Santiago, encabezado por Claudio Orrego, le transfirió $1.683 millones para el programa 2022 a 2024 de "Prevención del suicidio mediante el fomento de la salud mental". Aunque Orrego y Larraín han destacado que son seis fundaciones, solo figura ProCultura en el convenio. El Gobierno Regional de Aysén le transfirió $1.673 millones para apoyar a familias en Cochrane, Caleta Tortel y O'Higgins. Larraín ha logrado unir dos mundos que no guardan directa relación. "La salud mental tiene una vinculación directa con el patrimonio", declaró a El Mercurio en abril de 2019. La fundación informó que actualmente administra proyectos por $4.000 millones. Algunos de ellos ya lo tienen dando explicaciones. En 2011 ingresó a la DC, lo que le forjó valiosas redes. Trabajó para Claudio Orrego en las primarias del partido y de la Nueva Mayoría en 2013. Para la candidatura presidencial de Carolina Goic en 2017. Le atribuyen ser el ideólogo del grupo cardumen, llamado así porque eran chicos -de edad algunos y de influencia-, pero que juntos podían influir. Alberto Larrain nunca accedió a cuotas de poder importantes, y dejó el partido a fines de la década pasada. Empezó a coquetear con Convergencia Social y Revolución Democrática. Cuentan que Giorgio Jackson, más desconfiado y duro, no le dio mucho piso. Sí Gabriel Boric cuando no soñaba con ser candidato y Larraín entró tempranamente a su círculo. Juntos escribieron una columna en el Mostrador -"Salud mental: no están solos ni solas"el 9 de octubre de 2021, lo que revela su cercanía.
Irina Karamanos, su pareja, trabajó en ProCulura diez meses (abril 2021febrero 2022). Cuando Boric, a quien apoyó, ganó la elección dicen que se evaluó que Larraín pudiera ocupar un cargo, pero su pasado DC conspiró en su contra. Y decidió fortalecer sus redes en la sociedad civil, que es donde mejor le ha ido.
Uno de sus proyectos llevó a la PDI a allanar la semana pasada las oficinas del Gobierno Regional de Antofagasta.. Fue el de pintura y restauración de tres fachadas por $629 millones.. Política y poder, sus otras vetas A más de destaparse el traspaso de platas públicas a la Fundación Democracia Viva, para el presidente del Consejo para la Transparencia, Francisco Leturia, es natural que el tema siga en la agenda pública. "El problema es infinitamente mayor a lo que se pensaba, y no hemos generado soluciones para que no se repita.
Todo lo que ha permitido y facilitado que esto ocurriera sigue estando ahí... Listo para que llegue cualquier operador y lo haga de nuevo". -¿Cuánto de lo que se conoce es corrupción? -Corrupción es que alguien se lleve un contrato sin estar preparado o cuando el trabajo no se necesita, o lo pueden hacer otros mejor, a menor precio, o sin conflictos de interés. También es corrupto evitar una licitación, o arreglarla para favorecer a un amigo. Muchas cosas no son ilegales, lo que es una desgracia.
Es decir, en Chile podría no ser ilegal sacar plata del Estado a la mala, para enriquecer a un particular o para financiar un partido (... ). No hemos visto un real compromiso de la clase política en evitar estos desfalcos y establecer mejores controles (... ). Muchos operadores políticos ven al Estado como un botín de guerra, como una piñata". -En Antofagasta se asignaron $629 millones a ProCultura por pintar tres fachadas.
El gobernador regional se apoyó en la validación del entonces subsecretario de la Subdere, Miguel Crispi, hoy jefe del Segundo Piso. ¿Propicia el formalismo del Estado un mal uso de los recursos? -El formalismo, el apego a la literalidad de las reglas y la burocracia, pueden abrigar las peores formas de corrupción.
Muchas veces son utilizados a conciencia para defraudar y justificar desfalcos y situaciones absurdas diciendo "no hay nada ilegal". -Algunos traspasos involucran a figuras públicas. ¿Puede haber allí tráfico de influencias o conflicto de interés? -La respuesta es demasiado obvia. Habría que ser muy ingenuo para pensar otra cosa. -Algunas transferencias fueron por trato directo. ¿Debiera revisarse esa figura? -Vamos a tener que reglamentarlo mejor.
Siempre se entendió el trato directo como mecanismo excepcional y de emergencia, pero se abusó de él. "Las alarmas no sonaron" -Al inicio de la crisis usted dijo que "pensar que en algún grupo humano no va a existir gente corrupta" es como "ser terraplanista". ¿Está perdida la batalla? -Al revés.
En cualquier grupo humano puede haber gente desviada e inescrupulosa, es bueno saberlo y estar atentos. (... ). Con todo lo que ha pasado, una cosa muy buena es que cuando alguien intente sostener de nuevo que su colectivo político es moralmente superior al resto, será tratado, en el mejor de los casos, como un terraplanista. Y eso es un tremendo progreso. -Hoy rigen normas penales, administrativas, de transparencia... ¿Qué más puede hacerse? -Si las normas que tenemos fueran suficientes, no tendríamos que estar viendo todo esto. Hay que hacer autocrítica (... ). Las instituciones no están dando el ancho, las alarmas no sonaron. Ojalá las autoridades se decidan a actuar.
Enviaremos al Presidente una lista de medidas y reformas pro transparencia y anti corrupción, que complementan la que le planteamos poco antes que asumiera... Si nos hubiese hecho caso, buena parte de este escándalo se habría evitado.
Leturia: "Siempre se entendió el trato directo como mecanismo excepcional, pero se abusó de él" "Muchos operadores políticos ven al Estado como un botín de guerra, una piñata". Por Marcelo Pinto Alberto Larraín, el multipropósito fundador de ProCultura.