Atención a los adultos mayores
Atención a los adultos mayores 0Editoriale estima que la población mayor siga aumentando en el país, ya que para el 2050 se proyecta que las personas sobre 60 años serán el 32,1%, casi un tercio de los chilenos, lo que plantea una serie de desafios que debe abordar la sociedad, que van desde losincentivos a la inserción laboral a cómo se construyen las ciudades, la calidad de la infraestructura urbana y la integración a otros espacios de la vida. Unreporte del Observatorio del Envejecimiento de la Pontificia Universidad Católica y la Compañía de Seguros Confuturo analizó la calidad de vida y el aumento exponencial de las personas de más de 80 años en Chile.
Hace tres décadas, solo un 11% de la población mayor tenía más de 80 años, actualmente equivale a 16,4%, y para 2050 llegará a 28%. Este es un fenómeno que conlleva importantes desafíos, en relación al bienestar de la cuarta edad. Chile envejece a tasas aceleradas, fenómeno que tienerepercusiones de salud, económicas y sociales que exigirán revisar la forma en la que hemos construido el país y cómo lo haremos en el futuro. Se prevé que, a nivel mundial, el número de personas mayores en edad de trabajar (de 55 a 64 años), aumentará de 723 millones en 2021 a 1.075 millones en 2050. Chile no está ajeno a esta realidad y se considera que para ese año 2050, habrá más de 6 millones de adultos mayores.
Si bien hay un aumento en la esperanza de vida, es necesario preguntarse cómo están envejeciendo los chilenos, cuáles son las percepciones en torno a su salud, necesidades materiales y sociales, entre otros aspectos que afectan su bienestar. La población de más de 80 años tiene menores ingresos económicos, mayor presencia de enfermedades crónicas y menor calidad de vida. El mayor temor de la cuarta edad es la dependencia y, pese aque pueden influir muchos factores, el deterioro en la salud es determinante. Hay expertos que dicen que el paísno está preparado para enfrentar este cambio en la pirámideetaria, si se observan indicadores como las pensiones o el acceso ala salud.
Asimismo, hay que preocuparse de que las ciudades sean amigables con esta población que envejece y que enfrenta mayores dificultades, como veredas y calzadas en mal estado, que muchas veces son causantes de caídas y accidentes.. Este mes se abre la opción de pensar en cómo puedeel país seguir trabajando para ser más inclusivo con la tercera edad. Editorial