Exposición de JUAN FRANCISCO GONZALEZ inaugura “Proyecto de pintura republicana” en la Universidad Católica
Exposición de JUAN FRANCISCO GONZALEZ inaugura “Proyecto de pintura republicana” en la Universidad Católica `` La realidad es que esta pintura republicana tiene una contemporaneidad "... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . EMILIO DE LA CERDA PATRIMONIO Con obras provenientes de colecciones privadas: Exposición de JUAN FRANCISCO GONZÁLEZ inaugura "Proyecto de pintura republicana" en la Universidad Católica "L as flores se pintan frescas del natural, no son para arrancarlas", decía Juan Francisco González (18531933). Y proclamaba: en el bosquejo está todo el ardor, la pasión del individuo. En cambio, en el cuadro concluido está la Academia, la retórica, lo que está amasado. ¡El boceto es la obra! ", afirmaba el artista, maestro y escritor. La exposición inaugurada en la Universidad Católica se centra en su magistral pintura al aire libre.
Y los muros se encuentran atiborrados con pequeños cuadros suyos, dispuestos en tres niveles de altura, "como se hacía en el tiempo de Juan Francisco González y como él los tenía en su casa", precisa el curador Pedro Maino. En tanto, en una gigantografía se ve al artista en pleno montaje en 1916. La nueva Sala Pinacoteca en el Centro de Extensión de la UC (la ex Sala Colorada) es la sede expositiva.
La curaduría exhibe paredes dedicadas a los paisajes del artista, otras a sus bodegones, están sus viajes y sus celebradas flores. "Queremos que se aprecie su búsqueda permanente y su forma de trabajar, por eso también los muros abigarrados porque González podía pintar tres o cuatro obras en un día", señala Maino.
Y es con esta valiosa y atractiva exposición --integrada por 82 pinturas, además de dos esculturas, documentos-que el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, inauguró ayer sábado el celebrado proyecto "Pintura republicana UC", el que busca poner en valor, investigar y exponer periódicamente pinturas de la historia del arte procedentes de colecciones privadas. "Es muy emocionante poder concretarlo. Porque tenemos la asociación con el MAVI UC, pero nos faltaba este período del arte esencial. Es algo que veníamos pensando y trabajando hace un tiempo, con Emilio de la Cerda y Pedro Maino", señala el rector Ignacio Sánchez.
El proyecto viene a llenar un vacío en la escena nacional de un largo período de la historia del arte que ha sido bastante dejado de lado. "En el caso de Juan Francisco González, hoy no hay exhibidas más de unas 40 pinturas suyas en todo Chile, contando las del Museo de Bellas Artes, la sala del Museo Baburriza, Santa Rosa de Apoquindo, la Pinacoteca de Concepción. Aquí estamos exponiendo 82 cuadros más dos esculturas", afirma Maino. Un vacío que llenar El arquitecto e investigador, integrante de Patrimonio UC, Emilio de la Cerda, cuenta que presentarán exposiciones de pinturas desde 1880 hasta los años 60 o 70, durante todo el año. El académico de la universidad advierte que "hay muchos que apuntan a este arte como un arte patrimonial en el sentido de un arte como del pasado, que ha sido superado. Pero la realidad es que esta pintura republicana tiene una contemporaneidad, influye en las expresiones contemporáneas", subraya. Por otro lado, puntualiza: "Esa idea del arte que se vuelve hermético o que su forma de interpretarlo sea solo con fórmulas contemporáneas nos parece que aleja al público. Nosotros queremos llegar a una audiencia amplia". La figura de Juan Francisco González es particularmente atractiva. "El hecho de que sea de la primera vanguardia en Chile nos interesa ponerlo sobre la mesa. Y llevarlo a discusión con otras muestras. Porque vemos que hay aquí un espacio vacante que la universidad está llamada a cubrir. Es una forma de conocimiento", agrega de la Cerda.
El proyecto se sustenta a partir del coleccionismo privado --también de obras que posee la universidad en diversas dependencias, a cargo de la Dirección de Patrimonio Cultural UC-y el objetivo es contribuir a través de su difusión e investigación a relevar la pintura chilena. Hay mucha pintura que no es conocida. Y levantar esas obras y poder ampliar la comprensión de sus artistas y colecciones es clave", agrega de la Cerda. Luego puntualiza: "Este proyecto viene a fortalecer el ecosistema del arte, no a competir. El modelo de la Pinacoteca de Concepción y lo que hace la Universidad de Talca son muy interesantes.
La idea es trabajar con ellos también, con Valparaíso, Concepción, con el Museo de Bellas Artes". El rector Ignacio Sánchez detalla a Artes y Letras: "Nuestro plan es ir construyendo una pinacoteca propia de pintura republicana y espero que de aquí a cinco o diez años esté formada. La universidad va ser receptora de muchas donaciones, comodatos de coleccionistas privados que ya hemos visto en otros ámbitos culturales y de arte. Hemos estado en contacto con familias y coleccionistas que tienen mucha pintura chilena para invitarlos a exhibir. Y también invitarlos a que donen algunas obras a la universidad. Hay una enorme confianza en nosotros, la estamos viendo hoy para esta primera exposición.
Hay numerosos coleccionistas que se han comprometido a donar una, dos o más obras". Y Sánchez adelanta: "Para futuras muestras los coleccionistas están considerando seriamente entregar en comodato sus colecciones confiando en que vamos a cuidar y preservar esas obras. Hay una gran confianza en la universidad. Además, nosotros incorporamos a los donantes o comodantes en el trabajo que hacemos.
Entendemos que quieren conocer el destino de esas obras y nos gusta muchísimo que participen en el trabajo y construcción de estas colecciones", señala el rector. "Que se empapen de una ensalada de verduras que es el sur" "Había que partir con uno de los más grandes de la pintura --cuenta el rector--. Concordamos con Emilio de la Cerda y Pedro Maino --quienes han estado a cargo del desarrollo del el proy e c t o q u e una retrospectiva de Juan Francisco González sería de sumo interés.
Y estoy muy contento con lo logrado, con la exposición". La curaduría puso el énfasis en su condición de pintor al aire libre y lo que ello supuso para la pintura del siglo XX en Chile. "Juan Francisco marcó un punto de inflexión. Hizo de la pintura al aire libre una voluntad de su práctica. Fue el sentido de su obra", subraya Pedro Maino. González se formó primero en la Academia y su pintura siguió los lineamientos bastantes formales de ella. "Pero luego fue despojándose y llega a esta pintura donde expresa temperamentos. Su punto de inflexión tiene que ver con su primer viaje a París, en 1886. Se produjo un cambio notable". Se habla de una incursión impresionista, pero el curador explica que Juan Francisco González tenía una relación compleja con los movimientos. No le gustaba adherir a escuelas. También se interesó en el expresionismo, pero rehúye que lo mencionen o inscriban en ello. La muestra destaca su rol pedagógico en que se le reconoce como un gran maestro. Hay citas suyas, por ejemplo, sobre la importancia de la posibilidad de viajar y de empaparse del color. Él dice: "También sería, para mí, parte de la enseñanza hacer viajar a los alumnos. Pero no por Europa, nada de eso. Por el país, ¡sí señores! Por este Chile único. ¡Que se empapen de una ensalada de verduras que es el sur!... ". escribe J. F. González en El Heraldo, de Valparaíso, el 18 de mayo de 1894. Otro rasgo distintivo es que fue un gran polemista. Escribía muy bien. En la vitrina de la exposición hay un valioso libro de clases que tenía en Valparaíso, en 1882, donde fue recortando y pegando todo lo que escribía. Están sus debates. Y entre sus polémicas más ácidas se encuentran las que tenían que ver con la fotopintura, que a él le parecía una aberración. Se exponían en escaparates en Valparaíso. Y ellos le respondían descalificando al maestro que era un especie de vagabundo, que se dedicaba a recolectar cartones, relata Maino. Sus "manchitas". Uno de los muros está dedicado a sus queridas flores de gran frescura y belleza. "¡Vengan a ver estas rositas! Es lo último que he hecho. Estoy contento de ellas. Son puras, alcanzadas, frescas. Tienen la esencia misma de los modelos. Así hubiera querido siempre llegar a pintar. Hoy lo he alcanzado. Y no estoy contento, sin embargo... ", publicó en La Nación el 10 de abril de 1929. Están también los bodegones. Y los paisajes se despliegan en su condición de pintor viajero. Hay una muy linda composición sobre Santa Rita, hacienda que era de la familia García-Huidobro, la misma del poeta Vicente y de su hermano escultor Domingo, de quien González era muy amigo.
Algo novedoso es la exhibición de dos esculturas sobre el pintor realizadas por García-Huidobro, un artista notable poco difundido en el ambiente (el año pasado sí se hizo una muestra en Santo Domingo). Él esculpió a González pintando. Y se exhibe también un busto del artista que hizo el escultor, muy similar a uno del Museo de Bellas Artes. El expuesto perteneció a Pedro Prado.
En los viajes se descubre su paso por París, España, Italia... Y por Chile aparecen también campos de Limache, Chillán... También va a Perú. "La exposición permite seguir su recorrido, que recoge su condición de pintor errante del Grupo de los 10". Hay un contrapunto asombroso en la pared de los bodegones: se exponen dos pinturas de sandías muy distintas que se ubican en los extremos de su trayectoria. "Una es de 1880 --de mayor formato-que fue pintada con cánones académicos y la otra `Sandía' es la última obra que hizo, en la década de 1930. Es muy libre.
Según cuenta su nieta María Angélica Roa González, su madre, que era hija del pintor --Reinalda González Marín-le sostenía el brazo a González para que pudiera terminar esa pintura en sus últimos días". La nieta participa en esta muestra --abierta hasta el 28 de septiembre-y donó la que sería "la única acuarela que conocemos del maestro. Es una técnica que no practicaba", señala el curador. Un cuadro singular es "Pintando al aire libre", en que él se autorretrató, circa 1910. Dialoga con la escultura. Se observa su ejercicio de pintar al aire libre en un camino. En una vitrina se exhibe también su caja de pintura, que él compró en una librería en París, que todavía existe. Sus pinturas tienden a denominarse "Manchitas", lo que se debe al pequeño formato en que trabajaba, pero también a su manera de pintar, señala el investigador Pedro Maino. "Él hacía todo directo del natural. En cambio, por ejemplo, Swinburn y Valenzuela Llanos tomaban apuntes del natural, pero para ellos eran estudios de obras, preparatorios, y los que más les gustaban las desarrollan después en gran formato. El caso de Juan Francisco González es diferente: Él dice que no hay nada mejor que el boceto. Su pintura se ejecuta al aire libre y esa es la obra". CECILIA VALDÉS URUTIA Ochenta y dos pinturas se exhiben de Juan Francisco González, en un montaje que emula su época. La curaduría de Pedro Maino se centra en la obra al aire libre que marcó la primera vanguardia en Chile. FOTO: FELIPE BAEZ "Pintando al aire libre", Juan Francisco González, 1910. Un autorretrato notable que dialoga con una escultura. FELIPE BAEZ Las flores y rosas constituyen uno de sus géneros más celebrados. "Santa Rita". El campo era de la familia García Huidobro, la del poeta Vicente y su gran amigo escultor, Domingo. Captura la belleza de Santiago, en su tematica de paisajes. El celebrado proyecto partió ayer con una exposición de uno de los más grandes artistas de nuestra historia del arte, Juan Francisco González.
El objetivo es poner en valor y difundir nuestra pintura republicana (1820-1970), que ha sido bastante desplazada en la escena nacional. "Este es un plan de enorme importancia para la universidad y de interés nacional", afirma el rector de la UC, Ignacio Sánchez. "Sandía", la última obra que pintó. `` No hay nada mejor que el boceto.
La pintura se ejecuta al aire libre y esa es la obra"... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . JUAN FRANCISCO GONZÁLEZ El artista en pleno montaje de una exposición, en Santiago, en 1916. SANTIAGO DE CHILE, DOMINGO 14 DE JULIO DE 2024.