Autor: Jessica Ortega, carrera Psicología UDLA Viña del Mar
Llegó el 18 de septiembre
E Llega septiembre y es innegable la luminosidad en nuestroterritorio. Wemos flores y banderas en distintos rincones de carreteras y calles, que nos recuerdan que la primavera ha llegado con el resurgimiento de la vida.
Pero eso no estodo, también llega una pausa, un espacioen donde podemos descansar de la atribulada rutina y monotonía en las que nuestros días pasan, podemos cambiarla a una que está llena de colores en el cielo y nos recuerda lo verdaderamente importante, el poder disfrutar con nuestros vinculos, con quienes muchas veces queremos estar, pero no podemos por la falta de iempo. Son días dedescanso, fiesta y jolgorio, donde nos conectamos con lo más propio de cada familia, nuestros espacios seguros y que, reconocemos al fin, siempre estánahí.
Estos díasnos invitan areflexionar en torno a nuestros sueños, planes y el cómo queremos continuar este nuevo ciclo que comienza, Debemos ser cautos en la manera en que celebramos, ser conscientes de lo que es verdadero, y aquello que nos une, y buscar el equilibrio, ese promueveen bienestar. Por eso y más, llegóel tan ansiado 18 de septiembre.