Restauración
En diciembre de este año realizarán la primera evaluación post trasplante para evaluar la sobrevivencia y parámetros morfofisiológicos y enzimáticos.
“De esta forma, para sitios que han sido afectado severamente por fuego pudiese existir un consorcio fúngico (a la carta) para esta especie milenaria, y así ayudar a la planta para adaptarse a esas condiciones de estrés”, argumentó el especialista.
Según el académico, si el programa de restauración es en la costa, se debe trabajar con material genético de dicha zona y de la misma forma para las poblaciones de Araucaria araucana de Los Andes, por ende, la selección de semillas es fundamental para mantener un pool genético en cada zona y se debe realizar en los lugares aledaños a los sitios que se quieren recuperar.
“Posteriormente viene la etapa de producción de plantas en vivero, la generación de inoculantes fúngicos en laboratorio con un alto nivel de colonización y que debe ser obtenida idealmente de los mismos sitios, ya que estas especies fúngicas estarán adaptadas a esas condiciones de sitio, la inoculación controlada con los consorcios fúngicos nativos, la evaluación de la micorrización, la plantación y posterior seguimiento en campo. En esta cadena, cada uno de los eslabones son fundamen-tales para tener éxito en el establecimiento”, precisó el Dr. Chávez.
Sobre los desafíos venideros, el experto apuntó a las condiciones climáticas adversas con periodos cortos de abundante precipitación, y periodos secos extensos, isoterma cero alta impidiendo la caída de nieve en lugares donde siempre ha nevado, etc.
Otro de los desafíos son los mega incendios forestales, exacerbados por el cambio climático y por la actividad humana, que pueden destruir las plántulas establecidas recientemente, alterar el perfil químico y biológico del suelo y eliminar especies vegetales y animales que juegan un papel clave en el ecosistema.
“Por otra parte, los incendios forestales favorecen el establecimiento de especies invasoras exóticas, que competirán con las plantas nativas por los recursos del suelo, el sobrepastoreo y pisoteo del suelo que contribuye a una compactación del mismo; dificultad de la regeneración natural, ya que su semilla (piñón-comestible) es un recurso utilizado por la fauna y el ser humano, este último generando una sobre extracción del recurso para su comercialización en diferentes formatos, lo que lleva a la necesidad de educación de las comunidades que hacen uso de este recurso”, cerró el Dr. Chávez..