Conozca a mi compañera de compras preferida: la IA
Conozca a mi compañera de compras preferida: la IA CONTENIDO LICENCIADO POR THE WALL STREET JOURNAL recorrer las tiendas. En los oscuros días anteriores a la IA, contaba con herramientas primitivas como una lista de compras en mi teléfono, pero ahora me he liberado de la labor monótona de ver mi teléfono mientras compro.
En cambio, pongo una lista de cosas en la interfaz de voz de ChatGPT, o pego una lista de texto en la aplicación de ChatGPT, y luego voy a la IA para que organice mi lista de compras por tienda, departamento o pasillo. Ahora puedo literalmente hablar con mi lista de compras mientras estoy en la tienda.
Le hago preguntas como: "Estoy ahora en el pasillo con todos los artefactos eléctricos; ¿ puedes recordarme si hay algo aquí que necesite, o puedo saltarme este pasillo?" y "¿ en qué pasillo es más probable que encuentre chucrut crudo?" (Esta estrategia funciona mejor si está a 3 metros del comprador más cercano o es impermeable a las miradas de preocupación). La IA no solo me guía hacia donde quiero ir, sino que tamlo más importante, estaba disponible en rojo. Sin embargo, la IA va mucho más allá de entregar apoyo informativo; es también infinitamente paciente y simplemente me entiende.
Cuando le pedí zapatos para ir al trabajo que fueran tan cómodos como las zapatillas deportivas, la IA soportó pacientemente mis críticas a sus sugerencias más apropiadas para señoras de edad, y luego se redimió y me presentó marcas de zapatos que según ella ofrecían "zapatos con un taco de 2,5 cm que dicen `no soy su tía a menos que su tía sea RuPaul'". Y cuando decidí que era el momento de reemplazar el collar sucio del perro por algo más digno, la IA recomendó algo de color rojo oscuro o verde oliva, y que "idealmente no oliera como húmeda desesperación". Incluso mejor, la IA me puede guiar tanto con imágenes como c o n t e x t o. N o s o y muy buena para visualizar cosas en mi cabeza, así es que he hecho muchas compras para la casa lamentables cuando no he podido imaginar cómo luciría algo en nuestro espacio. Ahora utilizo IA para generar maquetas, como una disposición de los muebles para nuestra sala de estar, o prever los méritos relativos de las estanterías abiertas versus cerradas para el baño. Cuando hace poco quería comprar un televisor que pudiera caber en los gabinetes de la sala de estar, mi esposo perdió el interés en cuanto descubrimos cuáles pantallas ofrecían la mejor imagen y sonido.
ChatGPT, por otro lado, estaba preparado para una conversación abierta sobre cómo el ángulo de nuestro televisor afectaría los hábitos de visualización de la familia, la estética de las diferentes alturas de montaje y la estrategia para reorganizar nuestra colección de juegos de mesa para que encajara con el nuevo televisor.
Donde me decepcionó fue en el asunto práctico de cuál soporte de televisor realmente se ajustaría: aun cuando le pedí a GPT que revisara las instrucciones de montaje y medidas del producto antes de que hiciera mi compra, en cuanto saqué el soporte de la caja me di cuenta de que la IA se había equivocado por completo, y tuve que devolverlo a la tienda.
De compras con una IA Una vez que la IA ha preparado el escenario, estoy lista para He dejado el alcohol, los carbohidratos y de comerme las uñas, pero hay un hábito que al parecer no puedo abandonar: las compras. Paso una parte significativa de mi tiempo libre buscando el portacepillo de dientes del tamaño adecuado, el sofá ideal o el par perfecto de botas rojas.
Mi esposo está feliz de opinar sobre un hallazgo ocasional en línea, y tengo algunas amigas que están dispuestas a andar una hora de compras por aquí o por allá, pero nunca he encontrado una compañera de compras que pueda igualar mi vitalidad para estas salidas. Es decir, hasta que la inteligencia artificial (IA) llegó a mi vida. Ahora tengo acceso al apoyo de compras siempre activo, siempre informado, siempre entusiasta con el que he soñado desde hace tiempo. La IA está aquí para asegurar que compre la cosa correcta y nunca se queja de que está cansada. Las herramientas de IA han transformado mi experiencia de compra; la han hecho (con algunos ajustes y algunas advertencias) más entretenida, enfocada y eficiente. Planificación Nunca he sido del tipo que sube al auto y parte a la tienda cuando necesita algo. Abordo cada una de mis búsquedas de compra como una campaña militar planificada con todo cuidado. He pasado horas investigando las mejores fuentes de chocolate 100% negro, y días creando hojas de cálculo y evaluando mis opciones cuando compro un auto o un televisor. En la IA, finalmente tengo un asistente de investigación que puede apoyar estos esfuerzos; sin las burlas de las personas en mi vida.
Hace poco, cuando estaba en mi búsqueda de un auto, después de que había dejado exhausto a mi esposo, recurrí a ChatGPT, lo alimenté con cantidades de artículos y críticas, y le pedí tablas de resumen que sintetizaran toda esa información en algunas tablas de comparación que fueran fáciles de asimilar. (Motivo de la burla). Así es cómo deduje cuál de nuestros principales contendientes tenía suficiente espacio libre para acomodar a mi hijo de 1,85 metros, suficiente espacio de carga para que cupiera la jaula de nuestro perro, ofrecía Airplay y carga USB-C, y bién puede responder preguntas técnicas en esos momentos en que estoy abrumada en la tienda, como cuando no puedo descubrir qué interruptor de luz es compatible con la configuración de mi casa inteligente, o qué cubiertas de cable probablemente no se incendiarán en mi sala de estar. (Ese es el tipo de pregunta que también hago en Google, porque la IA puede equivocarse). Igualmente, la IA puede ser útil para identificar otras alertas cuando se trata de compras. Para mí es fácil tentarme con ofertas manifiestas como televisores nuevos en caja que ofrecía un vendedor de Facebook Marketplace con cientos de comentarios positivos.
Afortunadamente, se me ocurrió compartir su perfil y críticas anteriores con una IA, la que sugirió que las pocas nociones de los comentarios de una estrella y las alertas de fraude eran una causa de preocupación, y señaló que no había ninguna garantía por las compras. Eso era justo lo que necesitaba para descartar una adquisición de alto riesgo y, en cambio, seguir la ruta convencional de compra.
Una gran advertencia: solo hasta ahí estoy preparada para confiar en las opiniones estéticas de alguien (¿ o algo?) que nunca tiene que preocuparse de cómo se ve su trasero en blue jeans o si se sentiría `realmente' cómodo en ese sofá. Por lo tanto, para las personas en mi vida: lo siento, los seguiré necesitando de vez en cuando. Verificación El hecho de que la IA sea esa grandiosa asistente de compra --algunos podrían decir "facilitadora"-plantea sus propios riesgos.
En realidad, no es que necesite que me alienten a comprar; quizás, podría aplicar un poco más de moderación, en especial cuando se trata de la compra por impulso que se produce cuando veo una gran oferta en pilas AAA en la caja, o leo esas palabras atractivas "entrega en una hora" en un sitio web.
Así es que le he enseñado a mi propio asistente GPT personalizado que hay ciertas categorías de gasto a las que me tengo que resistir; especialmente, cajas y contenedores, porque tengo tantos de estos vacíos que ahora ocupan su propia área de almacenamiento en mi casa.
Cuando menciono que he recorrido el área de almacenamiento en mi tienda local de artículos para el hogar, la IA me da consejos como: "Antes de que gaste un centavo más en nuevos contenedores, tiene que realizar La Gran Auditoría de Contenedores de 2025.
Porque lo más probable es que ya tenga el ecosistema exacto de organización de plásticos transparentes de sus sueños en alguna parte de su casa". Si un miembro de mi familia me diera ese sermón, me sentiría indignada, pero cuando proviene de una IA que he configurado específicamente para el "modo de restricción de compras", es más fácil aceptarlo. Siempre y cuando le diga a la IA qué tipo de ayuda de compras necesito, esta puede ser tan grandiosa en proporcionar límites como en dar estímulo. Sinceramente, si mi esposo hubiera estado conmigo cuando hace poco descubrí una estatua encantadoramente pretenciosa en nuestra farmacia local, nuestra sala de estar ahora albergaría un astronauta de casi un metro.
Pero cuando compartí la foto con GPT, la IA preguntó servicialmente: "¿ Dónde pondría esto? Es decir, ¿hay un lugar en su casa donde falte un explorador espacial sosteniendo una lámpara lunar?". Desafortunadamente, el entusiasmo innato de la IA significa que solo puede llegar hasta cierto punto en su intención de frenar mi locura por las compras. A excepción de las áreas en las que le he pedido específicamente a la IA que controle mi gasto, siempre cree que todo lo que le muestro vale la pena el derroche.
Esa es la razón por la que es tan importante creer con cierta reserva en la sabiduría de compra de la IA; porque, finalmente, soy yo y no la IA la que pagará la cuenta de la tarjeta de crédito.
Alexandra Samuel es investigadora tecnológica y coautora de "Remote, Inc. : How to Thrive at Work... Wherever You Are". Artículo traducido del inglés por "El Mercurio". Los asistentes virtuales también pueden representar riesgos Conozca a mi compañera de compras preferida: la IA ALEXANDRA SAMUEL The Wall Street Journal ChatGPT y otras herramientas han hecho que mis compras sean más entretenidas y eficientes; y mucho menos molestas para los seres humanos en mi vida. LÍMITES Es posible enseñar al asistente de IA las categorías en las que es necesario restringir el gasto. Se puede dictar o pegar una lista de cosas en la interfaz del asistente de IA y luego pedirle que la organice por tienda, departamento o pasillo. KARAN SINGH.