El jardín infantil para 180 niños, apoyado por las fundaciones Said y Von Appen, que espera poder inaugurarse en La Pintana
El jardín infantil para 180 niños, apoyado por las fundaciones Said y Von Appen, que espera poder inaugurarse en La Pintana S u primer foco lo pusieron en la educación, y afinaron la puntería en la primera infancia vulnerable --niños entre tres meses y cuatro años y medio-con un modelo educacional de tres pilares: desarrollo intensivo del lenguaje, virtudes humanas universales y familia. Tres factores "críticos" de éxito por su impacto en el desarrollo cognitivo y socioemocional de los niños, como demuestran todos los estudios internacionales.
Desde su creación en 2010, la Fundación Choshuenco, de la familia de Wolf von Appen, ya suma 500 alumnos y cerca de 120 profesionales en los tres jardines infantiles que opera en lugares de alta vulnerabilidad, carentes de establecimientos y con elevada población infantil.
A la fecha gestionan uno en Colina --construido con fondos totalmente propios--; San Bernardo --de la Corporación Educacional municipal, levantado con apoyo de la comunidad judía--; San Ramón, obra de la Fundación Los Nidos, y un cuarto en La Pintana, que sumará otros 180 a l u m n o s. .. c u a n d o p u e d a abrir sus puertas.
La construcción del San Rafael, de casi 1.000 metros cuadrados, corrió por cuenta de la Fundación Said Somavía --entidad gestionada por los hijos del fallecido empresario José Said Saffie--, se terminó en diciembre pasado, en abril fue la recepción de obras, pero llevan siete meses esperando el reconocimiento del Ministerio de Educación, con 100 familias en una prelista de postulación. "Esta situación nos lleva a preguntarnos si realmente estamos poniendo el foco en lo importante.
Cada día de retraso es un día perdido en esta etapa tan esencial de su desarrollo", escribieron la presidenta de dicha fundación, Constanza Said Somavía, y Beatriz von Appen, directora de Fundación Choshuenco, en carta enviada a este diario el domingo pasado. "Primera infancia es la edad donde más podemos generar un impacto y reducir la brecha para las personas más vulnerables", ha dicho Beatriz, al explicar la opción tomada por su padre para crear y presidir el directorio de Choshuenco, que también integran su esposa, Wilma Lahres; el exministro Harald Beyer; Luz María Budge, presidenta del Consejo Nacional de Educación; la presidenta del Hogar de Cristo, Alejandra Mehech; Luis Hernán Cubillos, director del Centro de Gobiernos Corporativos del ESE de la U. de los Andes, además de su hija Beatriz Matte von Appen.
La menor de los Von Appen Lahres es una directora ejecutiva, que trabaja codo a codo con José Manuel Jaramillo, ingeniero comercial y máster en Políticas Públicas que antes trabajó en la fundación María Ayuda de Schönstatt y ya suma 11 años en la dirección ejecutiva Choshuenco.
La "parentabilidad positiva es otra clave que distingue su modelo. "Los padres son los principales educadores", explica Von Appen en la página web de la entidad, y por eso junto a sus jardines infantiles nacieron los "Centros de Familia" como espacios para involucrarlos en la educación de sus niños. Entre otras cosas, media hora antes de comenzar la jornada, todos los días hay un taller de juego de lectura con apoderados y alumnos. Colaboración público-privada Nada fue al azar.
Choshuenco es el pueblo sureño, a los pies del volcán, donde los hermanos Sven y Wolf von Appen --fundadores del holding nareducto hace 50 años un lugar importante para la familia, del que el segundo tomó el nombre para su fundación. El empresario le dio un lugar también relevante dentro de sus oficinas en el edificio Ultramar en avenida El Bosque, donde los profesionales de la fundación ocupan un amplio espacio en el ala sur.
Constituyó, además, un endowment para funcionar y darle proyección en el tiempo y las nuevas generaciones, pero con la idea de sumar a otras personas y también empresas, en especial las presentes en las zonas cercanas a los jardines que aporten recursos, pero también voluntariados y proyectos complementarios, entre otros. Estimular esa colaboración públicoprivada es importante para la fundación, lo siente como una de sus mayores contribuciones. De hecho, a instancias de varias empresas, los técnicos de Choshuenco están prestando asesorías y capacitando a municipios en las regiones de Antofagasta, Chimbarongo y el Maule, en el sur. En esa línea articulan con el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, el plan "Educación Inicial 20/30", que busca posicionar a Chile como líder en educación temprana. Dependientes de la Subsecretaría de Educación Parvularia, reciben una subvención de $230.000 por niño de sala cuna y de $180.000 en los niveles medios. Con eso cubren el 75% de sus gastos y el 25% restante, mediante aportes de empresas y el endowment Choshuenco. Para los alumnos, todo es gratuito en los jardines infantiles. En el caso del San Rafael, la historia partió hace varios años. Atraída por su calidad educacional, Beatriz von Appen había intentado varios proyectos cerca de los colegios que gestiona la fundación educacional Nocedal --vinculada al Opus Dei en Chile-en La Pintana.
Hasta que en 2021 se les acercó Constanza Said para evaluar la construcción de un establecimiento al lado del Almendral, el colegio de mujeres, que finalmente su fundación donó a Nocedal y cuya operación esta entregó a Choshuenco. "En Chile necesitamos tener mucho más de este vínculo público-privado, abriendo a los privados la posibilidad de apoyar este trabajo", resume Jaramillo.
La seremi de Educación visitó el jardín infantil, esta semana, y confían en que pronto llegue la autorización final. "Debemos cuestionarnos: ¿ por qué estos procesos administrativos son tan lentos? ¿ Están realmente diseñados para beneficiar a las personas, y en este caso a las con menos oportunidades?", se preguntaron las dos artífices del proyecto en su carta. El jardín infantil para 180 niños, apoyado por las fundaciones Said y Von Appen, que espera poder inaugurarse en La Pintana Beatriz von Appen, directora Fundación Choshuenco. Constanza Said, presidenta Fundación Said Somavía. José Manuel Jaramillo, director ejecutivo de la Fundación Choshuenco..