COLUMNAS DE OPINIÓN: EL GUATÓN LOYOlA
COLUMNAS DE OPINIÓN: EL GUATÓN LOYOlA En la vida real se llamó EDUARDO LOYOLA PEREZ. PEREZ. Nunca fue vendedor viajero como se dijo en cierta prensa. El guatón Loyola se dedicaba a los remates y las ferias de ganado. De eso modo pasó gran parte parte de su vida como martillero martillero público y privado, experto en corretaje de animales.
Y en eso estaba... descansando estaba... descansando apaciblemente de su trabajo en el casino casino del rodeo de Parral, cuando, cuando una noche noche de domingo del año 1954 le dieron una frisca... una golpiza por botarse a encachado, a valiente... y querer zanjar una discusión discusión a combo limpio. Ya lo dije... se llamaba Eduardo Loyola Pérez y hasta unos pocos años su nombre hasta aparecía en la Guía de Teléfonos Teléfonos de Santiago. Fense... que el Guatón Guatón Loyola vivía en la calle Manquehue, en la comuna de Las Condes, entre Apoquindo y Los Militares.. , más o menos donde ahora está el mali Parque Arauco. Hasta hace un par de años... no lo sé ahora, vivía vivía doña María Luisa Trivelli, Trivelli, la viuda del famoso guatón Loyola. El guatón Loyola se hizo famoso por sus fiestas fiestas y su simpatía. Era el Rey de los Rodeos... y a veces se quedaba días enteros en la ramada de la medialuna de San Fernando Fernando celebrando más allá de la cuenta.
Ahora, el autor de la famosa cueca, Alejandro Gálvez, gran libretista de humor... , por esos tiempos tiempos era funcionario de Impuestos Internos y las oficiaba de Inspector de Alcoholes.. , y fue amigo del guatón Loyola. El hecho es que una vez terminado el rodeo de Parral, Gálvez y Loyola tomaban el trago del estribo,.. estribo,.. en la fonda oficial, que ya estaba casi vacía. En ese instante entró un huaso alto, fornido pero bastante borracho. Se acercó al cantinero y le pidió una caña de vino. El barman, como lo vio muy pasado de copas, se la negó. LOS EL 6I1AT LOYOlA El huaso... frustrado en su petición, se enojó en demasía... se descontroló descontroló y le dio un puñete, por encima de la barra del bar. Afortunadamente el golpe no logró impactar a la víctima. Algo asustado, el cantinero cantinero quiso llamar a Carabineros, Carabineros, pero Eduardo Loyola (el Guatón) se lo impidió diciéndole: -Déjemelo a mí. El Guatón Loyola era bueno para los combos y se tenía harta fe. Cuando el huaso se dio cuenta que Loyola lo venía a enfrentar, afirmó su espalda en el mostrador mostrador y comenzó a tirar las manos.
Los detalles de esta gresca... de este pugilato... pugilato... o mocha... son ya conocidos por todos en virtud de los versos de Alejandro Gálvez, que los hizo famosos en su ya clásica Cueca del Guatón Loyola.
Cuando Gálvez, el autor autor de la mentada cueca se la entregó al Dúo Los Perlas, ya famoso por su humor pícaro... éstos le pidieron al Flaco que cambiara el nombre de Parral por el de Los Andes, Andes, para que de esta forma forma los versos coincidieron coincidieron con la música.
Y colorín, colorado... el Guatón Loyola quedó inmortalizado. *** inmortalizado. *** at*n yola 4 L_i Jorge Abasolo Periodista, Diplomado en Marketing Político y Miembro de la Sociedad de Historia y Geografía de Chile. ( jorgeeibar13@gmail.com ) No es parte de la mitología nacional ni propiedad exclusiva de una cueca que popularizó el dúo Los Perlas. El guatón Loyola efectivamente existió. ¡Sí, señores! De las escasas fotos de famoso Guatón Loyola..