Autor: EVA LUNA GATICA
Amenazas, críticas cruzadas y salida del gabinete: las claves del quiebre entre Francia Márquez y Gustavo Petro
Amenazas, críticas cruzadas y salida del gabinete: las claves del quiebre entre Francia Márquez y Gustavo Petro Tras casi tres años de gobierno y un amplio historial de tensiones, incluso desde antes de que llegaran al poder en Colombia, la fractura entre el Presidente, Gustavo Petro, y su vicepresidenta, Francia Márquez, se hizo definitiva en los últimos días con la salida de la funcionaria del Ministerio de Igualdad del país que Márquez lideraba desde su creación en 2023, tras una reunión en la que ella cuestionó públicamente al mandatario por incluir en el gobierno a personas acusadas por corrupción y denunciara amenazas en su contra. “Denunciar la corrupción y señalar lo que está mal tiene consecuencias. No me han atacado con argumentos, sino con amenazas contra mi vida y la de mi familia.
Aun así, no me callarán”, escribió Márquez, que jugó un papel clave en la campaña para llevar a Petro a la Casa Nariño, en una carta difundida en sus redes sociales a finales de febrero, en la que agregó: “La lealtad no es callar”. La carta la hizo pública tras un mediático Consejo de Ministros, transmitido por la televisión colombiana, en el que Márquez manifestó sus críticas a la gestión de Petro al cuestionar el nombramiento de Armando Benedetti, investigado por corrupción y señalado en un caso por violencia de género, como jefe del Despacho de la Presidencia, y de Laura Sarabia como ministra de Relaciones Exteriores, quien también está vinculada al menos a tres casos de corrupción.
“Respeto a Benedetti, pero no comparto, Presidente, su decisión de traer a este gobierno a estas personas (... ) Estoy preocupada de que llegue gente con chantajes para socavar un sueño”, le dijo Márquez a Petro sobre Benedetti, que en los últimos días fue designado ministro deltica o ideológica.
De hecho, muchas posiciones defendidas por el Presidente en sus alocuciones no coinciden con las de la vicepresidenta, de modo que ha sido siempre una alianza más bien frágil”, señala a este diario el profesor de Ciencia Política de la Universidad del Rosario, Yann Basset. Esas diferencias se fueron profundizando a lo largo de la gestión presidencial.
Previo a la salida de Márquez de Igualdad, Petro cuestionó en múltiples ocasiones los resultados que había tenido la cartera por su bajo índice de ejecución del presupuesto, cercano al 2,4% el año pasado, y por el poco avance de algunos de sus programas. “En Medellín están golpeando con la Policía a los habitantes de calle, ¿dónde está el Ministerio de Igualdad allá?”, reprochó en diciembre pasado. En respuesta, Márquez reconoció que el número de proyectos no ha sido el esperado, pero aseguró que no fue por falta de voluntad, sino por falta de apoyo de otras carteras y de la Presidencia. “Cuando el compromiso no viene acompañado de las herramientas necesarias, el camino se vuelve más difícil”, dijo Márquez, que en algunas ocasiones manifestó sentirse relegada, a pesar de ser la vicepresidenta del país.
Es más, ella ya había advertido las dificultades que implicaría comenzar de cero y había pedido al inicio del gobierno que se le entregara el Departamento de Prosperidad Social (DPS), una entidad con rango ministerial en Colombia, pero que al final quedó en manos de personas cercanas a Petro.
Con todo, la pregunta en este escenario es si la política izquierdista permanecerá mucho más en su cargo como vicepresidenta, considerando que la campaña electoral previa a las elecciones de 2026 se acerca, y ella podría desempeñar un rol clave.
“Una renuncia de Márquez a la vicepresidencia evidentemente sería un golpe, porque significaría una marca de ruptura mayor con Gustavo Petro, y más allá, en el seno de la i z q u i e r d a.
N o obstante, no creo que esté esto al orden del día en este momento”, sostiene el analista Yann Basset, porque “todas estas figuras están conscientes, de cierto modo, de que sin una mínima unión de la izquierda, este sector probablemente se hunda en las elecciones del próximo año”. Ambos fueron compañeros de campaña en las presidenciales de 2022Interior, y agregó: “No me parecen las actitudes de Laura Sarabia con nosotros y conmigo, que me ha tocado decirle que me respete, que soy la vicepresidente”. Y no solo eso, también cuestionó los resultados de la política de paz total del gobierno, al afirmar que las personas del departamento del Cauca, su región y una de las zonas más golpeadas por el conflicto armado en el país, le dicen que estaban mejor tres años atrás, antes de la llegada del proyecto izquierdista.
Molestia del mandatarioSegún la prensa colombiana, sus dichos durante la transmisión no fueron bien recibidos por Petro, quien habría visto en los comentarios un tinte electoral y una intención de la vicepre-sidenta de impulsar su imagen. Además, consideró que fue instigadora de la “rebelión” que se desató en el polémico Consejo, en el que varios miembros del gabinete también mostraron su disconformidad con la gestión del mandatario y con los nombramientos.
Petro, no obstante, respaldó tanto a Benedetti como a Sarabia, y la crisis terminó con la salida de 9 de sus 19 ministros del gobierno, incluida la propia Francia Márquez del Ministerio de Igualdad, una entidad que fue creada con la llegada de ambos al poder y que ella dirigía desde su creación en 2023.
“Es de conocimiento público que Márquez tiene aspiraciones electorales, por ello fue precandidata presidencial y luego aceptó candidatizarse a la vicepresidencia”, dice a “El Mercu-rio” Angélica Bernal, politóloga y profesora de la Escuela Superior de Administración Pública de Colombia, quien agrega que, al ser este un año preelectoral, “es válido y legítimo que quienes quieran hacer campaña en 2026 tomen distancia del gobierno actual”. “Alianza frágil”Y es precisamente a raíz de esas pretensiones electorales que los expertos apuntan que las diferencias entre Petro y Márquez no son recientes y datan incluso desde antes de la llegada al poder de la dupla presidencial.
Previo a las elecciones, Márquez, abogada afrocolombiana y líder ambientalista, se convirtió en un fenómeno electoral al obtener la segunda mayor vota-ESSERPECNARFción, por detrás de Petro, en la consulta interna de marzo de 2022 que realizaron distintos grupos de izquierda.
No obstante, el actual mandatario en ese entonces habría dudado en escogerla como su fórmula vicepresidencial, a pesar de que habíaCUESTIONAMIENTOS Petro cuestionó en múltiples ocasiones la labor del ministerio que dirigía Márquez, frente a lo cual la vicepresidenta acusó falta de apoyo. dicho que iría con quien fuera que tuviera la segunda votación.
“Como en muchos otros casos, la alianza entre Petro y Márquez era sobre todo electoral y estratégica antes que programá-. La fractura entre el mandatario y la vicepresidenta se evidenció cuando este la sacó del Ministerio de Igualdad, después de que ella cuestionara públicamente su gestión en una polémica reunión televisada. Ambos fueron compañeros de campaña en las presidenciales de 2022 protagonizaron diversos roces en el último tiempo, incluso de manera pública.