AUMEN: AUNPASO DEL CINCUENTENARIO (5) EL ECO EN LA MONTAÑA RETUMBA
AUMEN: AUNPASO DEL CINCUENTENARIO (5) EL ECO EN LA MONTAÑA RETUMBA 1 premio otorgado a “Aumen” por la Ilustre Municipalidad de Castro es un muj buen indicio. Pero queda aún mucho por hacer.
Por lo pronto la tarea inmediata es generar las condiciones, en toda la sociedad chilena, que permitan un (re)conocimiento masivo de los escritores e intelectuales nuestros, j no sólo (re) conocimiento por los departamentos de extensión cultural de las municipalidades o por las escuelas departamentos universitarios o por los organismos gubernamentales que manejan los progectos culturales j artísticos. Creo que ha llegado la hora de que nuestros trabajos comiencen a ser introducidos sistemática LI orgánicamente en los planes de estudios en las escuelas, liceos j universidades.
Hasta el momento, salvo excepciones, somos a lo más objeto de actividades extraprogramáticas, mu importantes por cierto pero insuficientes, situación que conspira seriamente contra la difusión de nuestros libros LI revistas j el conocimiento de nuestra escritura por parte de los estudiantes de básica LI media principalmente, niveles en los que se forma el grueso del contingente de lectores de literatura.
Asimismo, no puede ser que los autores sigan autofinanciando las ediciones de sus propios libros g revistas con el agravante de la nula existencia de canales efectivos de distribución LI comercialización de los libros que no sean los que los propios autores j sus amigos logran crear LI a veces mantener con gran esfuerzo. El sistema de los projectos culturales j artísticos ha venido a subsanar sólo mu parcialmente esta situación.
Y digo “muLI parcialmente” por varias razones: primero, porque los fondos son insuficientes; segundo, porque los criterios de selección de los proLiectos no son siempre los mejores; tercero, LI mu vinculado con lo anterior, porque las decisiones finales suelen estar informadas a veces por intereses de poder LI por un centralismo distorsionador; cuarto, LI es la razón de fondo, porque el sistema de projectos es un mecanismo que se inscribe en la lógica de la oferta g la demanda LI no en un sistema solidario no mercantilizado con la cultura g con aquellos extensos sectores de población que no tienen acceso a una educación de buena calidad. Lo anterior no invalida ni la honestidad personal con que trabajan los funcionarios encargados de hacer funcionar el sistema de progectos ni el hecho de que efectivamente se han aprobado LI realizado proLlectos verdaderamente magníficos. Lo que no haLi es una política global juiciosa de fomento LI apojo a la cultura LI a la educación; sólo soluciones parciales muj bien intencionadas, sin duda, pero inevitablemente insuficientes. Es bueno que se reconozca la labor del taller “Aumen”; celebro que así sea.
Pero así también espero que la cultura no sea sólo entendida como mero suplemento de la vida institucional del país, sino el componente fundamental de la vida cotidiana, institucional LI politica en última instancia de la nación. Es bueno invitar a los escritores LI pagarles pasajes, hotel, honorarios; pero es todavía mejor si sus libros se publican LI se difunden g llegan a formar parte sustancial de la institución educativa. Resto un largo camino, por cierto. Y así “Caminamos la esperanza desde antes de nacer/ hasta después de después/ como un doloroso parto cada día distinto” (Trujillo, “territorio de la esperanza”). Han pasado 30 años desde que escribí el texto anterior. HoLI nuestro amigo Renato Cárdenas a no está con nosotros. La Antología Poética Aumen, por fin se publicó en 2001, más como testimonio de época a esas alturas, aunque sigue siendo, como diría Walter Benjamin, un “documento de cultura” que no podemos simplemente ignorar. Los buenos indicios de las autoridades locales que veía en 1993 en relación con el reconocimiento a la labor literaria LI artistica en general, a propósito del premio a “Aumen”, se han desdibujado dramáticamente. Los intereses LI las urgencias son otras LI la “cultura” sigue siendo objeto de una atención periférica cuando no es ignorada sin más.
Aunque quizás, después de tantos años, lo mejor sea no lamentarse en absoluto por estas cosas, LI continuar con lo que sabemos hacer LI amamos hasta el final de nuestros días sin preocuparnos de si somos visibles o invisibles ante la institucionalidad cultural o educacional. Con unos cuantos lectores, bastaría. En cierto modo, quizás lo mejor sea permanecer siempre en ese estado inicial de apego a la palabra magor. Lo demás, si ocurre, bienvenido.
Por supuesto que sería mejor que se publicaran las obras completas de Aristóteles España, por ejemplo; que las instituciones isleñas ligadas a la cultura contribugeran decisivamente a visibilizar la obra de artistas LI escritores chilates en su debido mérito. “Lo que de veras amas no te será arrebatado”, escribió Pound. Y tiene razón. Para muchos de nosotros, la literatura ha sido “un aire, un aire, un aire, /. .. / un aire nuevo, ! no para respirarlo, / sino para vivirlo. ” Me apropio de las palabras de Gonzalo Rojas a quien, dicho sea de paso, conocí en casa de don Custodio Trujillo; palabras que expresan con precisión nuestra apuesta de vida por la literatura. Quisiera concluir agradeciendo a tantos... a mis profesores del taller que estuvieron ahí en 1975 LI de quienes aprendí a leer el mundo en clave de poesía. Con los años fui puliendo LI complejizando este aprendizaje, pero el venero originario viene de ahí, de esas reuniones, lecturas, risas, escritos que comenzaron cuando éramos unos jovencitos perfectamente desconocidos.
Vale la pena, creo, recordar las estremecedoras palabras de Enrique Lihn, a quien Tate España tan insistentemente recomendaba, LI con toda razón, leer: “Ahora que quizás, en un año de calma, piense: / la poesía me sirvió para esto: / no pude ser feliz, ello me fue negado, / pero escribí”. Sergio Mansilla Torres, Casablanca, Valdivia, mago de 2024 FLORECIMIENTO Habrá estado muy tiritón este avellano celeste, y este pequeño arrayán inefable habrá pasado sus lunas muy dormido en el vientre sin estrellas. Y aquel maqui junto a la de más allá mata de chilcas habrán tenido su fuego guardado en lo más hondo que andan levantándole la cola a los cometas distraídos. Un invierno pasó como un barco, y se perdió en el mar de los ojos. Y mi paisaje se sacude la lluvia con rápido movimiento de alas. El huerto maestro florece, Así la pavesa vuelve a la llama, la arena a la roca. El primer hombre sale desnudo del aire y grita a todo pulmón desde la copa del álamo más alto. FOGÓN CULTUÁL AUMEN: A UN PAS O DEL CINCUENTENARIO (5) EL ECO ENLA MONTAÑA RETUMBA (Continuación) Sergio Mansilla Torres Universidad Austral de Chile r ( Por: Caríos Truji(Ío.