Medio Oriente, en tensión extrema
Medio Oriente, en tensión extrema E N F O Q U E S I N T E R N A C I O N A L E S El factor iraní Desde el alevoso ataque de octubre pasado, en el que murieron 1.200 israelíes y fueron secuestrados más de 200, Israel está empeñado en acabar con Hamas, el grupo que controlaba Gaza, desde donde lanzó la mortal ofensiva a su territorio.
El gobierno israelí ha dicho que no se conforma sino con la victoria total y la eliminación de los líderes de la milicia apoyada, financiada y entrenada por Irán, la cual ha resistido estos meses la ofensiva de las fuerzas judías a costa de dejar a la población de Gaza padeciendo los rigores de la guerra, desplazada de sus hogares, con las edificaciones destruidas y viviendo de la caridad internacional ante la escasez de alimentos, medicinas y servicios. Casi 40 mil gazatíes han fallecido, según el Ministerio de Salud de Hamas.
Son varios los líderes del grupo islámico que han sucumbido a ataques israelíes con anterioridad al asesinato de Mohamed Deif, en Gaza, y de Ismail Haniyeh, en Teherán, pero estos últimos tienen más relevancia para el curso de la guerra.
Deif era el jefe militar de Hamas en Gaza y Haniyeh, el líder político y principal negociador de lo que se espera sea un acuerdo de cese el fuego, en el que se liberen los rehenes israelíes si se retoman las conversaciones. Deif, probablemente sea reemplazado por otro comandante en terreno, que siga al mando de Yahya Sinwar, el líder del ala militar de la milicia y cerebro de los ataques de octubre. Quién será el sucesor de Haniyeh es incierto y abre interrogantes sobre el cauce de las negociaciones para buscar una tregua que tan difíciles han sido.
Hay varios aspirantes que podrían enfrascarse en una lucha por el cargo, si bien muchos apuestan a que sea Sinwar, a pesar de que el sector menos violento de Hamas lo considera responsable de la guerra que ha destruido Gaza.
Haniyeh, que vivía exiliado en Qatar, era visto como un "pragmático" dentro del grupo, que estaba en desacuerdo con la línea radical y violenta de Sinwar, y por lo mismo, habría perdido influencia dentro de la milicia, pero era un buen rostro, más diplomático, ideal para representar al grupo islámico en los diálogos y actuar como mensajero del liderazgo. Las negociaciones entre Israel y Hamas se llevan a cabo en forma indirecta, con la participación de Qatar, Egipto y Estados Unidos, habiendo sido Haniyeh el interlocutor del jefe de los servicios secretos de Egipto. Se decía que antes del asesinato había una alta probabilidad de llegar rápido a un acuerdo, pero que las condiciones puestas por ambos lados seguían obstaculizando una salida. Ninguna de las partes ha mostrado real voluntad de hacer concesiones, y mientras Hamas no devuelva los rehenes es iluso pensar que Israel acepte algo más que una pausa humanitaria en los ataques.
Medio Oriente, en tensión extrema La serie de muertes de líderes de movimientos islámicos enemigos de Israel puede ser una chispa que encienda un conflicto regional, que vaya más allá de Gaza y Líbano, para abarcar Siria, Irak y Yemen, donde también están presentes milicias apoyadas y armadas por Irán. Tanto el gobierno israelí como Teherán deben calibrar sus próximos pasos, si quieren evitar una guerra extendida..