Micromovildad sostenible con menores costos, más ingresos y 120 kilómetros de autonomía
Micromovildad sostenible con menores costos, más ingresos y 120 kilómetros de autonomía [ BICICLETAS ELÉCTRICAS ] Micromovilidad sostenible con menores costos, más ingresos y 120 kilómetros de autonomía El acceso a la micromovilidad sostenible, específicamente a bicicletas eléctricas, representa una solución viable para transformar el sector del delivery. Sin embargo, el costo inicial elevado de estas bicicletas, en comparación con las motos mosquito, dificulta su adopción por parte de las y los repartidores, un segmento caracterizado por ingresos variables y limitados.
En el contexto de una ciudad como Santiago, con altos niveles de contaminación y tráfico, la bicicleta eléctrica (BE) se ha convertido en una herramienta de trabajo cada vez más atractiva para los repartidores de delivery.
Y es que su impacto va mucho más allá de la electromovilidad, ya que también representa una herramienta de trabajo, capaz de aumentar los ingresos de los repartidores, reducir sus costos operativos y mejorar las condiciones laborales al moverse por las calles de Santiago.
Es por esto que el programa Mi Bici Eléctrica (MBE), ejecutado por el Ministerio de Energía en conjunto conla AgenciadeSostenibilidad Energética (AgenciaSE), busca fomentar la adopción de bicicletas eléctricas en el segmento delivery, contribuyendo tanto a la sostenibilidad del transporte, al bienestar de los repartidores y una mejor ciudad, mediante el cofinancianciamiento de $350.000 o $500.000 para que los repartidores adquieran una bicicleta eléctrica Fahren Twin Battery con 120 kilómetros de autonomía y especialmente diseñada para labores de reparto. "Una de las principales ventajas de las bicicletas eléctricas es la reducción en los costos operativos para los repartidores. A diferencia de las motos mosquito que funcionan con motores de combustión de dos tiempos y dependen de una mezcla de combustible, las bicicletas eléctricas solo requieren electricidad para su funcionamiento.
Desde la experiencia del piloto ejecutado en 2023, observamos en los repartidores que se subieron a la bicicleta eléctrica, un ahorro mensual significativo, pasando de un gasto mensual promedio de $54.000 por combustible a $2.500 por carga de baterías, o sea, unos $618.000 ahorrados al año", detalla Pablo Salazar, jefe de Proyecto de Mi Bici Eléctrica del Área de Movilidad Sostenible e Hidrógeno Verde de la AgenciaSE. Sin embargo, la adopción de la bicicleta eléctrica, no solo impacta en la reducción de gastos operativos de los repartidores, sino también en sus ingresos.
Al contar con una bicicleta eléctrica, los repartidores pueden pedalear durante más tiempo sin cansarse "A diferencia de las motos mosquito que funcionan con motores de combustión de dos tiempos y dependen de una mezcla de combustible, las bicicletas eléctricas solo requieren electricidad para su funcionamiento". PABLO SALAZAR, JEFE DE PROYECTO DE MI BICI ELÉCTRICA DEL ÁREA DE MOVILIDAD SOSTENIBLE E HIDRÓGENO VERDE DE LA AGENCIASE. VERDE DE LA AGENCIASE. VERDE DE LA AGENCIASE. tanto como lo harían con una bicicleta convencional. De hecho, un trabajador puede extender una jornada típica de trabajo, de cuatro horas a siete horas diarias, aumentando sus ingresos al poder realizar más entregas en esa diferencia de tres horas.
Esta capacidad de maximizar el tiempo productivo convierte a la bicicleta eléctrica en una herramienta valiosa para quienes desean mejorar su rentabilidad sin comprometer su bienestar físico. "Desde la perspectiva ambiental, las bicicletas eléctricas contribuyen de manera importante a la reducción de emisiones contaminantes. La propulsión eléctrica no solo evita la quema de combustibles fósiles, sino que también disminuye la huella de carbono asociada al delivery", indica Salazar.
Las bicicletas eléctricas representan una alternativa limpia, acorde con las metas de movilidad sostenible en línea con la "Estrategia Nacional de Electromovilidad" del Ministerio de Energía, que establece objetivos claros de descarbonización y la transición hacia un transporte cero emisiones para 2035. Mejor calidad de vida Además, el uso de bicicletas eléctricas mejora significativamente las condiciones laborales de los repartidores.
A diferencia de las motos mosquito, que generan ruidos agudos y molestos, las bicicletas eléctricas funcionan de manera casi silenciosa, lo que contribuye a una conducción más agradable y reduce la contaminación acústica en las calles de la ciudad. "Esto no solo beneficia a los repartidores, sino también a la comunidad en general.
Asimismo, al eliminar la vibración constante de los motores de combustión y los olores que estos emiten, las bicicletas eléctricas mejoran el confort del usuario, reduciendo la exposición a elementos nocivos y ofreciendo una experiencia de trabajo más saludable", dice el jefe de proyecto.
En conclusión, la bicicleta eléctrica no es solo una herramienta de trica no es solo una herramienta de $2.500 es el gasto mensual por carga de batería, esto en comparación a los cerca de $54.000 que un usuario se gasta en combustible. kilómetros de ciclorrutas es el objetivo que tiene el Gobierno Regional de Santiago hacia el año 2035. movilidad sostenible, sino una herramienta de trabajo rentable y eficiente para los repartidores en Santiago.
Con su capacidad de reducir costos, aumentar ingresos, mejorar las condiciones laborales y contribuir a la sostenibilidad ambiental, las bicicletas eléctricas representan un avance significativo en el sector del delivery, beneficiando tanto a los trabajadores como a la ciudad en su conjunto. dad en su conjunto..