Indiferentes e impredecibles: quiénes son los cinco millones de nuevos votantes que marcarán la presidencial
Indiferentes e impredecibles: quiénes son los cinco millones de nuevos votantes que marcarán la presidencial Tras empezar a votar en 2022 de forma obligada, este grupo de personas ha sido perfilado por analistas de todo el espectro. Descubrieron que no les interesa la política o la aborrecen, no siguen las noticias, deciden a última hora e incluso cambian de opinión en la misma urna. Todo un desafío para las campañas.
Por Francisco Artaza Ningún comando ni candidatura presidencial le está hablando directamente a este nuevo electorado que se sumó con el voto obligatorio", afirma el analista y académico de la Universidad Autónoma Tomás Duval sobre los casi cinco millones de ciudadanos que volvieron a sufragar en septiembre de 2022 y que, pese a que ya se acostumbraron a tener que ira votar, aborrecen todavía de la política. Por eso, dice Duval, siguen tomando sus decisiones a último momento, de manera pragmática y muchas veces errática. Esto es algo que, a cuatro meses de la elección presidencial y parlamentaria de noviembre próximo, hace más incierto lo que pueda ocurrir.
Desde que se reinstauró en Chile el voto obligatorio con inscripción automática en 2022, poniendo fin al modelo de voto voluntario implementado en 2012, la participación se ha estabilizado en los últimos procesos eleccionarios en torno al 85% en promedio.
Desde entonces, prácticamente un tercio de los 15 millones de ciudadanos habilitados para votar -casi cinco millones de personas llega a las urnas por obligación, convirtiéndolos en un segmento clave a la hora de definir los resultados de una elección -de ahí el interés de los partidos políticos por capturarlos o acercarlos a sus posiciones-, pero sobre el cuál se sabe aún muy poco, ya que sigue comportándose de manera impredecible. La de noviembre es la primera elección presidencial en la que este grupo participará. "Es un tipo de ciudadano que está muy alejado de la política. No tiene, por lo tanto, ningún interés en ella, más bien la aborrece. Desde esa lejanía, tiende a tomar sus decisiones políticas a último momento, en las últimas 48 a 72 horas antes de una elección. Es un elector propenso a cambiar su decisión estando prácticamente en la urna, porque es un elector que va obligado a votar", explica Duval, experto electoral vinculado a RN. El que cambie fácilmente de opinión lo hace un elector impredecible. "Hemos detectado un fenómeno bien particular para las segundas vueltas.
Hemos cruzado algunas mesas, por ejemplo, en la última elección de gobernadores, donde hemos apreciado que el electorado obligado tuvo una tendencia en primera vuelta y una segunda distinta en la primera vuelta y una segunda distinta en la a a a a a a CÓMOESEL VOTANTENUEVO QUÉ PIENSA ELVOTANTE OBLIGADO Género [E Votante habitual [Mi Votante obligado Está de acuerdo con Está de acuerdo con que que las parejas el aborto debe serlegal homosexuales deberían bajo cualquier poder adoptar hijos circunstancia 510% A Hombre Mujer 90 D 378% 345% 21% 32% Rango etario Está de acuerdo conque Está de acuerdo con casi siempre se puede la aceptación de la 0 confiar en las personas diversidad 20% 1% 100 2% oc 16% 14% á, 25% D) 18-30 31-40 41-50 51-60 61-70 61+. 90 % años años años años años años Estaría dispuesto 10% a decretar estado.. . de excepción Nivel socioeconómico enla Región Metropolitana para 3% combatirla delincuencia ABCI 190 pm 40% ---d0% D+E (3 FUENTE: ESTUDIO EL CHILE SUMERGIDO, PANEL UDD, sobre la base de respuestas de personas que votaron por primera vezen 2022 con el inicio del voto obligatorio. vezen 2022 con el inicio del voto obligatorio. LA TERCERA *k "Es un tipo de ciudadano que está muy alejado de la política.
No tiene, por lo tanto, ningún interés en ella, más bien la aborrece" Tomás Duval, académico Universidad Autónoma Universidad Autónoma FUENTE: Confección propia a partir de datos de estudio de Panel Ciudadano UDD año 2023 y del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (Coes) año 2022. En En LA TERCERA segunda vuelta. Es capaz de cruzar de vereda completamente", dice Duval.
Un ejemplo claro de eso fue Valparaíso, durante la elección de gobernadores que se llevó a cabo en 2024, y en donde en primera vuelta hubo mesas en las que ganó el candidato republicano, pero en segunda vuelta no apoyaron a la candidata de la UDI, María José Hoffmann, sino que las ganó holgadamente Rodrigo Mundaca.
En ese proceso, el gobernador y líder del movimiento de izquierda ecologista Modatima pasó del 34% de los votos en primera vuelta a obtener el 62,4% de las preferencias en segunda vuelta. "Son el terror de cualquier comando electoral", sostiene Cristóbal Huneeus, socio y director de Data Science, de la empresa Unholster. Y explica el porqué: "Se sabe muy poco de ellos.
Es gente a la que no le interesa la política, que se mueve obligada, por lo que creemos que hacen el menor esfuerzo al mocreemos que hacen el menor esfuerzo al momento de decidir por quién votar.
Es gente que no sigue las noticias muy de cerca, no se informa por medios tradicionales, sino por redes sociales, que entiende menos de política y, por lo tanto, es probable que su entorno juegue un rol importante al momento en que ellos deciden por quién votar. Todo eso hace muy difícil sacar conclusiones muy taxativas sobre ellos", recalca. Pese a lo anterior, algunos estudios han comenzado a perfilar a este electorado que, por su impacto en las elecciones, podría llegar a ser decisivo. Se trata de un segmento del electorado muy disperso en el país, aunque tiende a concentrarse en los sectores urbanos más populares. Algo obvio, tomando en cuenta que históricamente las comunas de más altos ingresos en Chile tuvieron tasas más altas de participación electoral que las comunas más pobres. Por lo mismo, el elector obligado tiende a tener un menor nivel de estudios.
Esto quedó en evidencia en el estudio de 2023 "Quién vota en Chile: primeros análisis después del voto obligatorio", de los investigadores del CEP Ariadna Chuaqui, Carmen Le Foulon y Tomás Olguín, que reflejó que el 50,6% de las personas que reconocía haber votado en las tres últimas elecciones, a los que denominan votantes duros, tenía educación superior.
En contraste, entre los "votantes ocasionales" y los abstencionistas duros "hay una leve mayor concentración entre quienes no completaron la enseñanza media". En la actualidad no hay diferencias significativas entre hombres y mujeres, señala Huneeus, aunque las mujeres solían votar más que los hombres en elecciones con voto voluntario.
Tampoco se aprecian diferencias importantes respecto de la edad, dejando atrás el fenómeno que primó largamente durante el periodo en que operó el sistema de inscripción voluntaria y en el cual se marginaron principalmente los jóvenes de entre 18 y 35 años. "Pero no sabemos cuáles son sus preocupaciones más importantes, no tenemos evidencia empírica relevante sobre eso", señala Cristóbal Huneeus. Algo que ha sido notorio en los comandos políticos que han navegado a ciegas a la hora de tratar de convocar a este electorado. En los últimos dos años, algunos estudios han intentado empezar a develar ese misterio. Una tarea que no ha sido fácil, porque este sector de la población, ya sea por desconfianza o por desinterés, no suele contestar encuestas ni participar de estudios de opinión pública.
Aún así, investigaciones recientes del CEP, del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social -vinculadas a las universidades de Chile y Católica-, como también de Panel Ciudadano de la UDD, han dado algunas luces sobre el perfil del elector obligado. Una diferencia significativa entre el elector.
Indiferentes e impredecibles: quiénes son los cinco millones de nuevos votantes que marcarán la presidencial habitual y el obligado es respecto de la valoración de la democracia, donde el segundo grupo tiende a ser más indiferente ante la pregunta de si prefiere un sistema democrático o uno autoritario.
También respecto de algunos temas valóricos, donde el elector obligado tiende a ser mucho más conservador que el elector habitual. "Eso es consistente con la idea de que puede tratarse de un elector con un nivel menor de estudios y de menores ingresos", señala Huneeus. Este conservadurismo, señalan desde Panel Ciudadano UDD, se muestra en cifras.
Según lo que desprenden resultados de sus encuestas, mientras que el 23,3% de los votantes habituales está "totalmente de acuerdo" con legalizar la marihuana y dejar que el Estado la controle, en el obligado ese número bajó a un 17,86%. Otro ejemplo: al consultarles si es que el matrimonio debería ser exclusivo entre un hombre y una mujer, el 20,29% de los habituales respondió estar "totalmente de acuerdo". La cifra entre los obligados, en tanto, asciende a un 27,35%. Seguridad, migración y los temas económicos como el desempleo, señala Tomás Duval, parecieran ser también temas relevantes para los electores obligados.
Pero, también, demandan justicia y una mayor acción del Estado para mejorar los ingresos de las personas, remarca el analista y experto electoral, lo que lo convierte en un "electorado que puede mover indistintamente la aguja hacia uno u otro lado", afirma Huneeus.
Por otro lado, un informe del Centro de Estudios Públicos, elaborado en mayo de 2025 por los investigadores Aldo Mascareño, Juan Rozas y César Gamarra, arrojó señales preocupantes acerca de la "indiferencia" con la que actúa el nuevo votante.
En el texto, llamado "Indiferentes, *porque hay que vivir la vida solo": el antisujeto de la historia posdemocrática", define a esos "indiferentes" como "aquellos a los que les da lo mismo si gobierna un régimen democrático o uno autoritario". Y sien noviembre del 2008 ese grupo alcanzaba un 11,6% de la población votante, en marzo-abril del 2025 SOSTENIDA ALZA DELOS INDIFERENTES Preferencia por forma de gobierno En% 2 Democraticos 59,1 519 490 490 490 208 n" 2008 18,3 187 2017 2017 FUENTE: Encuestas CEP llegó a un 33,5%. Los investigadores del CEP sostienen otra idea: que cuando aumenta el número de indiferentes, es más probable que gobiernos autoritarios sean electos. Mencionan el ejemplo de Jair Bolsonaro en Brasil.
En tres años, entre el 2015 y el 2018, la preferencia 19,5 y 2022 E2 Autoritarios Indiferentes Ñ 312 ES E ma dl Jl cos MM] en ese país "por la democracia" bajó del 60% al 40%. Y en octubre del 2018, cuando la misma cantidad de gente prefería un gobierno democrático a uno autoritario, Bolsonaro fue electo en Brasil. "Las cifras para Chile son prácticamente las mismas, aunque ocho años después", cierran desde el CEP O años después", cierran desde el CEP O años después", cierran desde el CEP O.