CARTAS: ¿CUÁNTA VIOLENCIA MÁS NECESITAN PARA ACTUAR?
CARTAS: ¿ CUÁNTA VIOLENCIA MÁS NECESITAN PARA ACTUAR? Señor Director: La reciente balacera que afectó a estudiantes en el centro centro educativo de San Pedro de la Paz ha vuelto a poner sobre la mesa un debate que, aunque incómodo para algunos, ya no puede seguir postergándose.
El ministro de Educación, consultado consultado por la posibilidad de instalar pórticos detectores de metales en los colegios, señaló que es “un aspecto de la conversación, conversación, que puede ser importante y estamos abiertos a conversarlo; no es ni por lejos lo más significativo que tenemos tenemos que abordar”. Más allá del tono mesurado, sus palabras marcan un giro. Lo que hasta hace poco era una negativa rotunda, ahora al menos se insinúa como un punto discutible. Es, sin duda, una apertura forzada por la gravedad de los hechos. Y aunque aunque mínima, es un avance. Estoy convencido de que este gobiemo o el que venga terminará terminará por permitir que las comunidades educativas decidan, según sus propias realidades, si requieren o no estos mecanismos mecanismos de seguridad. La pregunta es cuánta violencia extrema más debe ocurrir para que esa decisión deje de parecer una concesión concesión tardía y se convierta en una herramienta preventiva. La demora en reaccionar no tiene justificación técnica, sino ideológica. Una visión que se resiste a aceptar que la realidad realidad cambió. Hoy, la violencia extrema que antes veíamos en los márgenes de la sociedad se está instalando en los patios escolares. escolares. Negarlo es una forma de abandono. Edgardo Araya Rojas, Licenciado de la Educación.