La Cultura
La Cultura on el tiempo, la cultura Campio su definición.
Si en principio aludió al piado "a la individualidad de cada uno de los personajes", y del pampino tiene un juicio pesimista: "El pampino es una especie en extinción", al cual define en sus rasgos culturales más sanos: "solidaridad, sentido del humor y espiritu libertario". De suyo un politico, Volodia Teitelboim sostiene, ante los ataques a la politica, que "ésta es un deber moral", y como poeta que "la poesia es una necesidad estética". Volodia apoya a Eduardo Anguita, su compañero de generación, cuando aquel sostiene que "nosotros no somos huidobrianos, pero nos enseñóa todos algo superior: "la libertad absoluta, el atrevimiento total", el libre albedrío como cultura.
Si para Andrés Sabella, "la cultura era un concepto profundamente ligado a la identidad, la denuncia social y la reivindicación del pueblo oprimido", en Gonzalo Rojas, el más joven de los viejos poetas, la cultura abarcaba la descreencia en "el tiempo. Y no soy el único, pregúntale a Nietzsche". Con la avalancha de nuevas tecnologías, no dudo que el concepto de cultura adquirirá nuevas definiciones.
Como sostenía Shakespeare en Hamlet: "Hay mas cosas en el delo y en la tierra, Horacio, de las que piensas en tu filosofia"; entre otras, que "ama al projimo como a ti mismo" escultura sana y tóxica, legitimar la idea del exterminio ajeno como herramienta de un proyecto político proplo. cos cultivo del campo y a la crianza de animales, pronto se extendió, sobre todo en la Edad Media, a la idea de labranza personal por medio del desarrollo de conocimientos y valores morales. La Academia la reconoce como el acopio de estudios, investigación y urbanidad.
El "Manual de Carreño" se cuadra con esta etapa, asi como las maestrías y doctorados actuales Desde el siglo XIX, gracias a la aparición de la antropologia cultural, el concepto abarca todo lo creado y compartido por una comunidad. El libro "Diálogos con la Cultura", 2002 y 2003, Universidad Finis Terrae, se concentra en hablar de cultura con escritores.
Pedro Lemebel, escritor chileno homosexual, establece su parámetro: "El desvío es mi destino", y para la fecha en que el eximio cronista y autor de la exitosa novela "Tengo miedo Torero" es figura pública, habla sobre los rasgos del amor como cultura. Lo define como una derrota de antemano: "uno se enamora sabiendo que hay una derrota por delante. Se enamora de manera triunfalista. No se enamora como la Cenicienta.
Se enamora a pesar de la imposibilidad". Rivera Letelier creció sin cercos y sin fronteras, pero como escritor sabe que no puede continuar una historia si no le encuentra un nombre aproGustavo Alex Tapia Araya, docente y escritor.. CEDICA