Autor: MABEL OSSES,
El desafío de cerrar las brechas digitales para impulsar un desarrollo equitativo de Chile
El desafío de cerrar las brechas digitales para impulsar un desarrollo equitativo de Chile DIGITALIZACIÓN E INCLUSIÓN:En 1986, en Chile se realizaron las primeras pruebas de conexión a internet entre la Universidad de Chile y la Universidad de Santiago. En el 2000, llegó el primer cable de fibra óptica para internet. Desde entonces han pasado 24 años, y la digitalización ha cambiado por completo la forma en que interactuamos. Pero estos cambios no han sido iguales para todas las personas. Un informe de la Fundación País Digital señala que las zonas rurales solo llegan a un 49% de conectividad, en comparación al 76% de la población urbana. En cuanto al ámbito laboral, si el 93% de los trabajadores en oficina tiene acceso a internet, solo el 41% de los trabajadores agrícolas tiene esa misma oportunidad. Esta brecha impide que millones de personas puedan acceder a mejores oportunidades de empleabilidad y desarrollo económico.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), los trabajadores capacitados en habilidades tecnológicas tienen más posibilidades de encontrar empleo en sectores de baja automatización y alta remuneración, lo que ayuda a reducir la brecha de empleabilidad en países en desarrollo y en aquellos con una fuerza laboral de baja capacitación digital. La inclusión digital, si se logra, también puede ser una buena noticia para los países.
Un estudio de la Unión Internacional de Telecomunicaciones muestra que un incremento del 10% en la penetración de banda ancha móvil resultaría en un aumento adicional del PIB de 1,2% en las economías de América Latina y el Caribe. Disminuir estas brechas es una tarea que han tomado distintos Estados. Un caso es Estonia, que ha liderado en distintas mediciones sobredigitalización. El país nórdico elaboró un plan estratégico para actualizar las infraestructuras locales de TI y estableció como prioridad en las escuelas el desarrollo de habilidades informáticas y digitales, con materias como ciberseguridad, robótica y programación. Con esa base creada, desde 2002, los estonios tienen identificaciones digitales que les permiten firmar documentos y acceder a servicios públicos de manera virtual. Esta transformación ha resultado en un sistema de administración más ágil, que no solo facilita el acceso a servicios gubernamentales, sino que también ahorra tiempo y costos, tanto para el gobierno como para la ciudadanía. En Chile también hay propuestas en desarrollo, que parten de una buena base, en la que el 94,3% de la población tiene conectividad.
Hace algunos años, el Gobierno presentó el Plan Brecha Digital Cero, el cual tiene como objetivo central que todos los habitantes del país tengan acceso a conectividad independientemente del lugar del país en que vivan o de las posibilidades económicas que tengan. Las distintas estrategias que han resultado a nivel mundial, y las que se plantean en nuestro país, tienen un eje en común: la educación. Es desde ahí donde se puede nivelar a quienes no han sido incluidos en la transformación digital, además de preparar a la sociedad para los cambios del futuro.
PARA TODAS LAS ETAPAS DE LA VIDACaja Los Andes, en el marco de su propósito de mejorar la calidad de vida de las personas, ha incorporado la digitalización como eje dentro del ámbito educacional de la matriz de beneficios que pone a disposiEs una muy hay que mirar en conectividad, pero buena noticia contar con más de 93% de profundidad ese número y entender cómo ese impacto pueda traducirse en una usabilidad efectiva”. gerenta del Comité Ejecutivo de Caja Los Andes. ción de sus más de cuatro millones de afiliados y sus cargas familiares. “La conectividad digital es un derecho básico, pero no es suficiente.
Estamos en un escenario donde podemos decir que si una persona no tiene habilidades digitales, está quedando excluida de un contexto cotidiano para atender su salud, acceder a educación, avanzar en su desarrollo profesional e incluso, para fortalecer su conexión con otras personas.
Es una buena noticia contar con más de 93% de conectividad, pero hay que mirar en profundidad ese número y entender cómo ese impacto puede traducirse en una usabilidad efectiva con medidas que promuevan el desarrollo social y económico”, señala Mabel Osses, gerenta del Comité Ejecutivo de Caja Los Andes. En esa línea, la caja de compensación tiene una variedad de beneficios para incentivar la educación digital en todas las etapas de la vida.
En alianza con la Fundación Telefónica Movistar, ofrece a las cargas de sus afiliados talleres de robótica y programación, donde niños, niñas y jóvenes entre los 8 y 17 años pueden adquirir de forma didáctica herramientas que, en algunos casos, les permitirán aprender cómo pueden desarrollar un videojuego. Durante el 2023, más de 2.000 menores accedieron a este beneficio.
Además, para disminuir la brecha educativa, fuertemente impactada tras la pandemia, la entidad lanzó la app Mi AB-DIGITALIZACIÓN PLATEADA: FORMACIÓN PARA LOS ADULTOS MAYORES DEL FUTUROUn estudio desarrollado por Caja Los Andes y la Universidad Católica evidenció que el 49% de las personas mayores en Chile declara tener sentimientos de soledad. A partir de este diagnóstico, nació Digitalización Plateada, un programa que busca disminuir la brecha digital de los más de 400.000 afiliados pensionados a Caja Los Andes, e integrarlos en la ciudadanía digital.
Así, a través de talleres, se han puesto a disposición de este segmento, distintas herramientas que les permiten hacer uso de su correo electrónico, ingresar a la sucursal virtual de la organización y otros canales que les facilitan el día a día.
Los talleres son impartidos por voluntarios colaboradores de la caja de compensación, en base a una metodología desarrollada por Conecta Mayor-UC, la cual ha sido probada con más de 100.000 personas a nivel nacional y que después de tres meses, ha evidenciado mejoras en un 77% las habilidades digitales. SEDNASOLAJACAA Duenderil, disponible en Android y iOS, la que permite acceso gratuito a sus afiliados a más de 200 actividades pedagógicas con foco en el fomento de la lectoescritura para la primera infancia. Esto se realizó en colaboración con la reconocida licencia “Mi Duende Mágico”. Otro ámbito al que ha apuntado el organismo es a la reconversión laboral. Un estudio de McKinsey estimó que para el 2030, entre 75 y 375 millones de trabajadores a nivel mundial tendrán que cambiar de ocupación debido a la automatización de roles y procesos.
Para abordar esta problemática, Caja Los Andes concretó una alianza con LinkedIn Learning, ofreciendo a sus afiliados más de 23.000 cursos gratuitos en formato online, en materias como experiencia del usuario, software empresarial, análisis y estrategias de negocios, entre otros. Esto, con el objetivo de que las personas puedan crecer, reconvertirse laboralmente y adaptarse a los cambios sociales.
Asimismo, la caja de compensación mantiene una alianza con Bond Up, una aplicación que busca entregar herramientas de conexión, entretenimiento, salud y bienestar a través de una red social para personas mayores de 55 años, que busca la relación de grupos de intereses afines a través de un marketplace de panoramas.
“Tenemos que revertir la percepción de que el mundo digital es solo para los más jóvenes, especialmente cuando se estima que para el 2030 en Chile, el 30% de la población tendrá 65 años o más. En Caja Los Andes creemos que la forma más adecuada de alcanzar el bienestar es a través de la autonomía, propiciando que las personas tengan el control de sus decisiones. Y en ese compromiso, no podemos excluir a nadie”, concluye Osses.
Esta mirada va en línea con la transformación digital que ha emprendido Caja Los Andes y que ha permitido no solo incluir en su grilla de beneficios iniciativas impulsadas por la digitalización como telemedicina, cursos online, etc, sino que también hacer más eficiente la atención del público, realizando más de 30 millones de atenciones a través de sus canales digitales.. La tecnología ha traído varios cambios importantes en la sociedad, pero la adopción de nuevas formas de hacer las cosas no ha sido equitativa. DIGITALIZACIÓN E INCLUSIÓN: Caja Los Andes ofrece acceso a herramientas digitales como talleres, cursos y productos que facilitan el día a día de las personas en todas las etapas de la vida. C