Científicos cuestionan teoría sobre origen de Cristóbal Colón a partir de su ADN
Entre las principales críticas destaca que aún no está disponible la información ni la publicación científica que pueda respaldar el anuncio sobre el supuesto origen judío del navegante. Francisco Corvalán ¿ Fue la mejor forma de anunciarlo? La noticia que dio la vuelta al mundo ha creado una ola de suspicacias y dudas sobre el real origen de Cristóbal Colón. Enun documental televisado y emitido por la Televisión Española, se dio a conocer el hallazgo que el médico forense de la Universidad de Granada, José Antonio Lorente, investigó durante más de 20 años. Eso sí, aún no hay publicación científica ni datos abiertos a la comunidad que puedan ayudar a comprobar la revolucionaria tesis que proponen sobre el real origen del descubridor de América. Este sábado fue anunciado en España que el explorador del siglo XV, Cristóbal Colón, sería en realidad un judío sefardí de Europa occidental y no un navegante oriundo de Génova. Esto, según un documental tras un análisis de material genético para resolver un misterio guardado durante siglos. Sin embargo, esta tesis es resistida por científicos expertos en análisis de ADN ancentral. Por ejemplo, David Reich, investigador de la Universidad de Harvard expresó al diario El País que ante este hecho “necesitamos que los datos estén disponibles, esimposible saber si son correctos. Antes de que nos podamos creer una afirmación así hay que publicar todas las pruebas y datos.
Además, sería deseable que un laboratorio independiente, uno que no dependa de un documental televisivo, analice el ADN para confirmar los resultados”. El director del Instituto Max Planck de Antropología evolutiva, Johannes Krause, dijo al mismo medio que prefería no hacer comentarios científicos basados en una publicación televisiva. “Si lo hiciera, también tendría que opinar sobre alienígenas, el terraplanismo, la Atlántida y demás pseudociencia”, expresó. Rasmus Nielsen, de la Universidad de California en Berkeley, se sumó a las críticas ante esta poco usual forma de anunciar un hito científico. “Este análisis peca de esencialismo genético al equiparar nacionalidades con grupos genéticos.
Las etnicidades son en realidad mucho más complejas y no hay una correspondencia total entre el ADN de una persona y su etnicidad”, destacó al medio español. ¿Por qué el manto de dudas? Según Taras Oleksyk, genetista de la Universidad de Oakland, las afirmaciones de Lorente son “ilegítimas” porque no cumplen las normas más básicas.
“Unas afirmaciones tan extraordinarias sobre un personaje tan importante como Colón necesitan cumplir los mayores estándares de calidad y ser revisadas por pares, el equivalente a los tribunales en el mundo de la ciencia”, detalla a El País.
Asimismo, expresó que cuando hay científicos que anuncian resultados sin paSIGUE La investigación plantea que el explorador del siglo XV, Cristóbal Colón, sería en realidad un judío sefardí de Europa occidental y no un navegante oriundo de Génova. Aún existen muchas dudas respecto del trabajo del forense José Antonio Lorente. sIGUE » sar por este escrutinio, “se encienden todas las alarmas”. Qué Pasa se contactó con Lorente fin de saber más sobre los detalles de la investigación en la quese ha basado el documental.
“Los resultados científicos completos y detallados de la investigación en la quese ha basado esta película documental sobre el origen de Colón serán presentadosen una rueda de prensa en la Universidad de Granada a celebrar a aproximadamente en noviembre, que será anunciada con suficiente antelación”, explicó.
Según agregó, la realización de la rueda de prensa en fecha posterior a la presentación del documental se debe a que aún se están analizando datos recientes “muy importantes que, sin afectar al contenido de la película, sí tienen trascendencia científica para expertos e historiadores, por lo que deben ser presentados definitiva y conjuntamente en un contexto académico”. Adicionalmente, Lorente declaró que los resultados completos serán publicados en una revista científica internacional para que sean libremente accesibles a todos los investigadores y expertos, y para que sirvan de base para futuras posibles investigaciones sobre los personajes ya estudiados y sobre la población europea de referencia. ¿Qué decía el documental? Según el programa, la investigación que inició en 2001 buscaba entender los principales misterios que rondaban al origen del navegante que llegó por primera vez a América un octubre de 1492. En el documental Colón ADN. Su verdadero origen, se reconstruyeron las dos décadas de investigaciones del proyecto liderado por el forense José Antonio Lorente, investigador y académico de Medicina Legal de la Universidad de Granada. Luego de estudiar los restos óseos del descubridor, se pudo comprobar que en el ADN mitocondrial, así también como en el cromosoma Y, existirían rasgos compatibles con su origen judío. Detallan que el origen genético de Colón estaría en España, cerca del Mediterráneo occidental. En la época que vivió el navegante, el país ibérico contaba con más de 200 mil hebreos, mientras que en Génova no superaban los15 mil. Otro dato importante, los judíos habían sido expulsados de Italia en el siglo XII, más de 300 años antes de la existencia de Colón. En España, en cambio, existía una pacífica convivencia entre judíos, musulmanes y católicos.
Esto, hasta el 31 de marzo de 1492 (mismo año en que Colón se embarca al “nuevo mundo”), cuando se publica el Decreto de la Alhambra o Edicto de Granada que prohibió el judaísmo y el islam en los territorios dominados por la corona de España. De esa forma, todos los que no se convirtieran al cristianismo serían expulsados y considerados como herejes. En la época de Colón se vivió un proceso de reconquista por parte de los estados católicos y existió una persecución muy violenta contra musulmanes y judíos. “No era deextrañar que tuviesen que ocultarse. De hecho, hubo muchos judíos conversos quienes lo hicieron para liberarse de las persecuciones.
De algún modo, la violencia que ejercieron en ese momento fue una especie de ensayo para la violencia que van a ejercer luego en la conquista de América”, agrega Consuelo Figueroa, directora Bachillerato en Ciencias Sociales y Humanidades UDP. Los investigadores tomaron muestras de Colón y las compararon con las de parientes y descendientes conocidos. “Tenemos ADN de Cristóbal Colón muy parcial, pero suficiente. Tenemos ADN de Hernando Colón, su hijo, que está confirmado que es su hijo”, detalló Lorente en el programa emitido por la televisión ibérica.
Además, destacó el investigador que “tanto en el cromosoma Y, como en el mitocondrial de Hernando, hay rasgos compatibles con origen judío”. Las pesquisas comenzaron en 2001, cuando el historiador Marcial Castro le propuso a Lorente abrir la tumba del marino en la catedral de Sevilla para comprobar si realmente se tratan de sus restos. Mitocondrial guardado en el interior del cofre mortuorio se cotejó con el de su hijo Hernando y con el de su hermano Diego.
En 2005, aunque los resultados fueron positivos, se abandonó el proyecto porque la tecnología de ADN no estaba suficientemente desarrollada y se requería te materia ósea para alcanzar conclusiones definitivas. ¿Qué tiene de especial estudiar ese tipo de ADN para relacionar parentesco? Según explica Brenda Riquelme, doctora en ciencias biológicas e investigadora del Centro Internacional Cabo de Hornos, “cuando los individuos crecen en poblaciones, y están todos genéticamente relacionados, podría haber una similitud en este material genético”. Esto se puede ver tanto a través del ADN mitocondrial como el ADN nuclear (específicamente a través del cromosoma Y). “Hoy en día patrones o perfiles que serían como un código de barra, como una huella digital, que caracterizan distintas etnias, o grupos de personas que están regionalmente relacionadas”, agrega la investigadora. Según añade, este tipo de técnica de análisis con ADN ancestral, que así es como le llaman cuando viene de muestras que llevan mucho tiempo enterradas o muertas suelen ser difícil de trabajar. Esto, porque viene fragmentado o degradado por muchos años de descomposición. “Se saca a vecesde los dientes o de los huesos, que es lo único que podemos encontrar cuando tienen 500 años de antigúedad. Entonces, siempre fue muy difícil, y durante los 90 y los años 2000 se trató de mejorar la extracción y la obtención de este ADN desde estas muestras complejas”, añade. Si bien se sabía que Colón murió en España, en 1506, la historia dice que quiso serenterrado en la isla de La Española, que hoy comparten República Dominicana y Haití. Sus restos fueron trasladados allí en 1542, después a Cuba en 1795 y más tarde, según se creía en España, a Sevilla en 1898.
Esto se pudo comprobar, según el documental, con el análisis forense en la catedral andaluza, pero se generó confusión ya que en Santo Domingo se construyó un mausoleo en 1992, a propósito de los 500 años de la llegada de Colón a América. De ahí que no se sabe el navegante estaba enterrado en España o si sus restos yacían en República Dominicana. Fue entonces que el estudio se retomó en 2020, cuando el desarrollo de la técnica genética estaba más avanzada y se podíanobtener resultados más concluyentes. Los especialistas cuentan en el documental que cotejaron su huella genética con la de sus supuestos parientes en los ocho lugares seleccionados. La primera de las ciudades elegidas fue Génova, en Italia, donde la bibliografía sitúa la cuna del navegante. Sin embargo, en esta ciudad no existe tumba del descubridor ni se conoce ningún descendiente o ascendiente directo. Además, se realizaron distintas pruebas genéticas con personas con el apellido Colón, tanto en España como en Italia. Mostraron que los descendientes que viven en la península ibérica comparten orígenes genéticos con el navegante descubridor, mientras que los oriundos de Italia no comparten material genético para ser relacionados en parentesco.
“A partir de aquí, ante los datos objetivos, tendrán que ser otros los que investiguen y hagan borrón y cuenta nueva o decidan pasar de página”, concluye Lorente en el documental emitido sobre este controversial hallazgo. Sin embargo, la comunidad científica aún está a la espera de los resultados y toda la información obtenida para poder cotejar y dar credibilidad al anuncio. O