Autor: Jorge Heine Profesor de Relaciones Internacionales, Universidad de Boston
Columnas de Opinión: La elección que viene en la OEA
Columnas de Opinión: La elección que viene en la OEA ESPACIO ABIERTOas declaraciones del Presidente Trump sobre el Canal de Panamá, sobre aranceles a importaciones mexicanas, y sus deportaciones masivas de inmigrantes, han copado los titulares. Tal vez por ello, la elección de secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), a realizarse el 10 de marzo, ha pasado casi desapercibida. Sin embargo, es precisamente por los desafíos que enfrentarán las relaciones entre la región en los próximos años Estados Unidos y que ella adquiere especial significado. La OEA no pasa por un buen momento.
Su mal manejo de las elecciones presidenciales en Bolivia en 2019; los embates sufridos por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y su incapacidad de responder a la enor= me tragedia de Haití, han minado su prestigio. Con todo, la elección de un nuevo secretario general ofrece una oportunidad para recuperarlo, y para darle un nuevo impulso al multilateralismo en las Américas. Y ocurre que, como en pocas ocasiones, se ha lanzado al ruedo una candidatura que puede llevar ala OEA a buen puerto: la del canciller de Surinam, Albert Ramdin. Lo que podría aparecer como un relativo bajo perfil y el provenir de un país pequeño, no necesariamente constituye un pasivo.
Al contrario, puede ser un gran activo, ya que lo que se necesita para darle un nuevo impulso a la OEA noesalguien que pretenda figurar, sino alguien dispuesto a trabajar; alguien que conozca la organización por dentro, que domine los códigos de Washington, y que reconstruya una entidad en crisis, forjando consensos y no divisiones. Solo así la OEA podrá hacerse parte de la nutrida agenda hemisférica en materia de seguridad, migraciones y cambio climático, entre otros temas. Durante diez años, Ramdin se desempeñó como subsecretario general de la organiza-ción, para después asumir susactuales responsabilidades como conductor de la política exterior de Surinam.
A menos de dos meses de la elección, cuenta ya con el pleno apoyo delos países integrantes de la Comunidad del Caribe (Caricom), máslos votos comprometidos de Chile, Perú y Honduras, esto es, un total de 17 votos, casi la mitad del total. El otro candidato al cargo es el canciller de Paraguay, Rubén Ramírez.
Masallá de que habría algo extraño en tener aun secretario general de la OEA proveniente de Paraguay sucediendo a uno de Uruguay (debe haber un mínimo de rotación geográfica), la elección de Ramdin despejaría una extraña anomalía. En sus más de 75 años de existencia, la OEA nunca ha sido dirigida por un secretario general proveniente del Caribe, aunque países caribeños conforman casi la mitad de los miembros de la organización. Ya es hora. En 2005, en una elección muy reñida, el Caribe se cuadró con la candidatura de Chile para liderar la organización. Veinte años después, Chile debe no solo apoyar la candidatura del canciller Ramdin, sino que debería contribuir a movilizar el apoyo diplomático en el resto de Sudamérica y Centroamérica para asegurar su elección. Obras son amores, y no buenas razones. La Cancillería tiene la palabra.. ESPACIO ABIERTO