COLUMNAS DE OPINIÓN: ¿Quién es Julia Chuñil? La voz que no se silencia
COLUMNAS DE OPINIÓN: ¿ Quién es Julia Chuñil? La voz que no se silencia LAS OPINIONES VERTIDAS EN ESTE ESPACIO SON DE EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE QUIENES LAS EMITEN, Y NO REPRESENTAN NECESARIAMENTE EL PENSAMIENTO DE DIARIO "EL TRABAJO" PhD(c) Miguel Ángel Rojas Pizarro.
Psicólogo Profesor de Historia www.miguelrojas.cl ¿Quién es Julia Chuñil? La voz que no se silencia En un rincón del sur de Chile, la desaparición de la dirigente Julia Chuñil Catricura junto a su perrito, ha sacudido a quienes conocen su historia y a todo un país. Líder mapuche, defensora incansable del bosque nativo y de los derechos de su comunidad, Julia encarna la lucha por la justicia ambiental y social. Sin embargo, su caso, como tantos otros, ha sido relegado al margen, casi invisible para una sociedad que parece priorizar lo urgente sobre lo importante. A pesar de la indiferencia mediática y la lentitud institucional de las policías, hay quienes no han dejado que su nombre se pierda en el silencio. Pequeños grupos de personas marchan en todas las plazas centrales de chile, alzan la voz y exigen justicia. Son activistas, vecinos, familiares, líderes comunitarios y estudiantes que, con carteles en mano y convicción en el corazón, resisten el olvido. Su esfuerzo es el latido de una conciencia colectiva que se niega a aceptar la injusticia como algo inevitable. Lo admirable de estos grupos no es solo su persistencia, sino la humanidad que aportan a la lucha. En un mundo donde los datos y las estadísticas a menudo deshumanizan las tragedias, ellos nos recuerdan que detrás de cada caso hay una vida, una historia y una comunidad afectada. Su ejemplo inspira a quienes creen que el cambio es posible desde las pequeñas acciones, esas que parecen insignificantes, pero que terminan moviendo montañas.
Es urgente reflexionar sobre cómo, como sociedad, dejamos que estos casos caigan en la indiferencia. ¿Cómo es posible que en un país con recursos tecnológicos avanzados y protocolos internacionales, aún tenga personas desaparecidas sin respuestas claras? ¿ Qué nos dice esto sobre nuestras prioridades y nuestra capacidad de empatía colectiva? ¿ Cuánto tiempo más seguirán desapareciendo dirigentes sociales o apareciendo `suicidados'? ¿ Quién los defiende? El llamado es claro: no podemos permitir que las voces de quienes luchan por justicia y dignidad sean ahogadas. Es en la acción de estos pequeños grupos donde encontramos el verdadero motor del cambio social. Su ejemplo nos enseña que, aunque la justicia puede tardar, nunca debemos dejar de buscarla. La lucha por la justicia no es una carrera de velocidad, sino una maratón de resistencia, y en ella, cada paso cuenta.
Como dijo el escritor uruguayo Eduardo Galeano: «Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo». Que las marchas de estos grupos sean la chispa que encienda la llama de un cambio profundo y necesario. Necesitamos `JUSTICIA AHORA PARA JULIA CHUÑIL'.. -