Autor: Gonzalo Serrano del Pozo Doctor en Historia Facultad de Artes Liberales Universidad Adolfo Ibáñez
COLUMNAS DE OPINIÓN: La alcaldesa y El Principe
COLUMNAS DE OPINIÓN: La alcaldesa y El Principe Gonzalo Serrano del Pozo Doctor en Historia Facultad de Artes Liberales Universidad Adolfo Ibáñez La alcaldesa y El Principe provocó la elección en Valparaíso en la columna del lunes, queda ocuparme de lo que sucedió en Viña del Mar con la reelección de Macarena Ripamonti y la derrota de Iván Poduje. Lo primero que habría que decir es que la oposición todavía no se recupera del descalabro que fue el último mandato de Virginia Reginato.
La forma en queterminó su alcaldía, llena de acusaciones y, sobretodo, una gestión que se fue desinflando conforme se acercaba el final, son cuentas pendientes de las que tuvo que hacerse cargo, por más que trató de evitarlo, Iván Poduje. A. eso se sumó que muchos lo consideraron un foráneo. Pese a queel arquitecto se esforzó por demostrar sus vínculos con la ciudad, su rostro y nombre resultó poco conocido para el viñamarino promedio, tal como él mismo reconoció luego de su derrota. El gran problema de Poduje, sin embargo, no radicaba solo ahí, R ealizados mis descargos respecto a la decepción que me sino además en su estilo confrontacional. Y, para entenderlo, hay 6 6 o o que recordar que el arquitecto llegó ala poMacarena Ripamonti puede tener muchos lítica después de su experie defectos como alcaldesa. Basta darse por Viña para comprobar que la ciudad, si es que no está igual, está peor que antes.
Pero tiene la virtud de que, en poco tiempo, comprendió cómo funciona la política". funciona la política". llido social". Poduje se dedicó a recorrer las estaciones del metro quemadas y comprobara ola de destrucción que dejó este "despertar" en las zonas más pobres de Santiago (y que quedó testimoniada en su libro 7Kabezas). El problemas que esa llama que se encendió en él para salir del mundo privado hacia el mundo público lo terminó quemando. Poduje quedó actiuna vuelta vado en el modo debate, ese en el que estuvimos envueltos durante la fiebre por una nueva Constitución durante dos traumáticos procesos. El problema es que el resto, a estas alturas, ya quería hablar de otra cosa. Como en esas largas sobremesas de los domingos, Poduje, aunque tenía razón en muchas cosas, quería seguir discutiendo cuando la gran mayoría quería retirarse, agotada de tanto debate. Ripamonti, por el contrario, era una de las que quería levantarse dela mesa, pero para bailar y cantar Karaoke. Gracias a la brecha generacional, supo ocupar las redes sociales como lo saben hacer los nativos digitales, videos cortos, entretenidos, llenos de música, bailes y selfies.
Mientras Podujetrataba de hacer lives al final del día con la misma camisa con que había recorrido los cerros, ojeroso y despeinado, Ripamonti aparecía con el cutis impecable, los labios bien pintados de rojo y con una energía envidiable. Macarena Ripamonti puede tener muchos defectos comoalcaldesa. El más importante, basta darse una vuelta por Viña para comprobar que la ciudad, si es que no está igual, está peor que antes. Perotiene la virtud de que, en poco tiempo, comprendió cómo funciona la política.
Aprendió a decirle a la gente lo que quiere escuchar, mostrar lo que quieren ver y callar cuando le conviene (podría darle clases al presidente). Nossé si Ripamonti leyó El Príncipe de Nicolás Maquiavelo o comprendió por su cuenta, que es más importante aparentar que poseer las virtudes, una de las claves que enseña el florentino para mantenerse en el poder, tal como lo hizo la alcaldesa. + +.