Las peores vacaciones de invierno
Las peores vacaciones de invierno Será posible que mientras estudiantes en la región de Coquimbo piensen en las vacaciones de mitad de año, haya chicos que no tienen cupo para ir al colegio. Impresentable. Y aunque pedimos hablar cara a cara con la seremi de la cartera en la zona, no hubo respuestas. El gobierno respondía desde el nivel central, esbozando que principalmente se debía al nuevo sistema de admisión escolar y la burocratización en el proceso para abrir nuevas matrículas. Lamentablemente esa realidad no ha cambiado para muchos de ellos y, aún hoy, a tan solo una semana de iniciar las vacaciones de invierno, siguen sin tener un cupo para asistir al colegio.
La mala concepción de un sistema único de admisión escolar, su mal diseño y también su mala implementación, vinieron a echar por tierra los argumentos que esgrimieron sus impulsores y, por tanto, reafirmaron los argumentos de quienes se opusieron a esta idea impulsada en el gobierno de la Presidenta Bachelet. El sistema de admisión escolar terminó siendo más burocrático y engorroso en su aplicación general y, también, terminó afectando el derecho a la educación que tienen los jóvenes de nuestro país. A la dramática situación anterior se suman otras que dan señales que en nuestro país cada vez se valora menos que los estudiantes estén aprendiendo en una sala de clases.
El paso por el colegio y la respectiva certificación se está transformando en una mera constatación del paso del tiempo y no en la principal herramienta que tienen los jóvenes para desarrollarse en un mundo cada vez más complejo y demandante de capacidades y habilidades personales. Pareciera que una de las enseñanzas que nos dejó la pandemia del coronavirus era que los colegios debían ser los primeros en abrir y los últimos en cerrar. Esa frase fue utilizada, aunque tardíamente, en algunos casos por todos los espectros políticos. Sin embargo, hoy estamos viendo señales contradictorias con esa idea, en las que autoridades deciden intempestivamente la suspensión de clases en sus territorios sin hacer un catastro adecuado o esperar el desarrollo de otros acontecimientos. Los chicos no pueden seguir esperando, solo decir que no serán unas lindas vacaciones de invierno..