"La gente jura que vive en el planeta, pero se equivoca, vive en su cuerpo y no lo conoce"
"La gente jura que vive en el planeta, pero se equivoca, vive en su cuerpo y no lo conoce" Frases polémicas como "ni los médicos ni los científicos practican la salud", acuña este temuquense que siempre ha generado rechazo por parte del gremio de la salud.
Lo suyo es el higienismo, una forma de tratamiento que corre en paralelo a la medicina, la cual dice apunta a lo esencial, es decir, más que al alivio a la sanación de las personas a través de la alimentación, "porque alimentarse acota no es lo mismo que comer". Con dos libros nuevos bajo el brazo y un congreso en cartelera habla sobre su particular quehacer.
Mauricio Esteban Gatica, temuquense, higienista chileno: Eduardo Henríquez Ormeño eduardo.henriquez@australtemuco.cl E l temuquense Mauricio Esteban Gatica es higienista, una disciplina que no acaba de encajar en nuestra sociedad, pero que hasta dónde entiende existe hace 200 años y por sus resultados tiene posibilidades ciertas de encontrarse algún día con la medicina tradicional para "hacer salud", que no es lo mismo que "procurar alivio", y que "es lo que ocurre hoy", sostiene.
Con un congreso en cartelera (programado para ayer) titulado "¿ Qué es ciencia? ¿ Es la verdad lo cierto?" y dos libros nuevos bajo el brazo, este controversial estudioso de la salud, que eligió para sí mismo llevar una vida sana a los 9, que hoy tiene 67, que pesa lo mismo que a sus 19 y que asegura no haberse enfermado ni una sola vez en 52 años, afirma que la clave para tener salud es la alimentación, que no es lo mismo que comer. Bajo esta lógica opina ni médicos ni científicos practican hoy la salud.
Mauricio, a la luz de la experiencia y bajo tu punto de vista, ¿qué es el higienismo? ¿ Es una forma de vida? En inglés se llama health science, la ciencia de la salud, una ciencia que acaba de cumplir 200 años en 2020. Para estudiar el higienismo tienes que entender la medicina o tener ideas básicas de anatomía, histología, fisiología y genética. Las principales escuelas están Estados Unidos y Alemania; y en América Latina se conoce FOTO: EDUARDO HENRÍQUEZ O. por mí.
Y bueno, más que un modo de vida, existen varios tipos de higienistas: están los veganos, básicos, compatibilistas e integrales (... ). Diría que esta es una forma de tratar la salud en las personas, de sanación, y también es un modo de alimentación, el cual en vez de entregar una respuesta estadística a una sintomatología, lo que entrega es un biorritmo de desintoxicación personalizado en función del objetivo de cada paciente en salud. Gracias a esto yo llevo 52 años sin un resfrío, sin nada de nada. Y puedo mencionar que con este método una mujer adulta que volvió del Alzhaeimer y un decano al que le habían dado 2 meses de vida vivió más de 15 con mi sistema. Lo que tú haces no ha estado exento de polémica. De hecho, la última vez que estuviste en un matinal hubo mucha resistencia de médicos. Preguntaban por qué de dan tribuna. ¿Cómo respondes o por qué crees que surge esta negación? La respuesta es fácil, ni los médicos ni los científicos practican la salud. O sea, vas a ver un médico y está tan enfermo como el paciente o peor. Esto es radical, cuesta decirlo, pero es cierto. Los científicos investigan, tienen laboratorios, pero no practican la salud. Ellos simplemente hacen estadística. Los higienistas estudiamos la medicina y además practicamos la salud. Yo tengo 67 años y llevo 52 sin un resfrío y, nunca, nada de nada. Eso prueba que esto funciona. Además, mi sistema fue implementado de manera coherente y ordenada. Con Karen Doggenweiler, en televisión, discutimos sobre vacunas y me ofrecí para volver al día siguiente para hacer un debate con médicos. Estuve hasta las 11.30 de la mañana y no se presentó nadie. A propósito de las vacunas.
Esa vez mencionaste que no eras antivacunas, pero considerabas que una persona con buena salud no las requeriría. ¿Cómo explicas esto? Yo parto todas mis charlas de la premisa que alimentarse no es lo mismo que comer. Es algo que se está demostrando ahora por la medicina. También creo que la ignorancia es la peor enfermedad.
A ver, la gente jura que vive en el planeta tierra, en América del Sur, en su casa, en su pieza, pero se equivoca, vive en su cuerpo y no lo conoce, sólo lo conoce cuando está enfermo, no lo sabe sentir ni lo sabe llevar. Yo a los 9 años tomé la decisión de no engordar, de no fumar, de no beber alcohol. Ahora, si tú te alimentas no necesitas vacunarte. En cambio, si comes necesitas vacunas.
Los alimentos bien combinados bioquímicamente se integran a tu cuerpo sin ninguna contradicción, mientras que los comestibles solo le sirven al gusto por la gastronomía, que para el cuerpo es una especie de pornografía alimentaria. ¿Pero de esto no se ocupan los profesionales de la nutrición? Lo que pasa es que la información está, pero está dispersa. No tiene una cabeza que la organice. Esa información la tienen los nutriólogos más que los nutricionistas. Pero contar calorías no es la respuesta, sino la calidad de las calorías. Por ejemplo, esto es drástico, llevo 50 años sin consumir proteínas, pero lo que tiene proteínas son los aminoácidos. Cuando ingieres alimentos suficientes la proteína la fabrican los aminoácidos y son de primera calidad. Eso ni siquiera lo saben los médicos. El médico trata el cuerpo, lo alivia, pero no lo sana.
Acabas de editar dos libros: "Lo que todos debieron saber antes de sentir" y "Por qué todos morimos antes de aprender a amar", ¿qué abordas en estos títulos? Yo no escribo ni para que lean ni para que me den la razón, escribo para que la gente se dé cuenta de lo cierto y lo practique. Esto no es una forma de pensar, sino de practicar y que el cuerpo te diga el resultado. Es que eso es. En mis primeros dos libros hablo sobre el origen de la inteligencia y el lenguaje; los de ahora son acerca del origen del amor y de la patología de la sexualidad. Esta última que es una imposición de la cultura patriarcal, porque antiguamente la sociedad era matriarcal.
Ahora, estoy por lanzar también dos tomos que se llaman "alimenta salud". Mauricio, ¿crees que en algún momento la salud integre todos los conocimientos dispersos de los cuales hablas en tus libros y congresos, y que también sostienen el higienismo? Tengo dos respuestas categóricas para esa pregunta.
El Harrison, que es típico libro de anatomía que se estudia, desde la edición número 17 en adelante integra al principio las terapias naturales que están más en boga, esto para que se tomen en cuenta por si ayudan. La segunda es que por primera vez las medicinas del mundo hicieron un congreso de terapias alternativas para irlas integrando.
Hoy las están tomando en cuenta, así que yo creo que esto se va hacer cada vez más integrativo, pero habrá muchas luchas aún. "Yo no escribo ni para que lean ni para que me den la razón, escribo para que la gente se dé cuenta de lo cierto y lo practique. Esto no es una forma de pensar, sino de practicar y que el cuerpo te diga el resultado. Es que eso es"..