Niños que no saben leer ni escribir
no dice: "La buena lectura di:, que evidencia que el acto de leer es habilidades má ción entrega a los n n viejo afo: y cura". Esta fi e, enseña una de importantes que la educa s, hoy parece desvanecerse.
Otra stadoras en término en todo el mundo es que cada Ñ iclo bási de los cursos de primero a cuarto básico, presentan dificultades en aprendizaje de la lectoescritura (la capacidad de leer y cursa te: bá en la Escuela en la comuna de Panquehue, en la de este año, ó la: so que Camientaba er compañeros de cu: pero ella tenía problem: con palabr: eran Cap: para juntar algunas letra s de leer más fluido, y encontrarse stas situaciones frustraban a la niña, quien le repetía que quería poder escribir bonito como sus pares. ya le] E le] E le] E INR no saben leer ni escribir LAS CIFRAS SON CLARAS. EN CHILE, UN 37% DE LOS ALUMNOS DE TERCERO BÁSICO NO SABE LEER. HOY, INVESTIGADORES Y ORGANIZACIONES TRATAN DE REVERTIR ESTA SITUACIÓN. MIENTRAS ALGUNOS ESPECIALISTAS ACUSAN A LA PANDEMIA, OTROS CONSIDERAN QUE ESTO ES UNA SITUACIÓN QUE SE ARRASTRA DESDE HACE AÑOS. aviera Jaña C.
Su madre considera que la duraci la falta de materiales con los que su hija pudiera apoyar lo que le ense: s dificultades de aprendizaj al009all y uentos y libros aban determinantes para que ri ando. Pero Camila no era la única de su cu an lo que nse: en esta situación. en esta situación. Niños que no saben leer ni escribir.
Su madre lo comenta: 1d --Se convirtió en un tema para los papás del curso, y fuimos citados a reuniones con la escuela para aprender cómo ayudar a nuestros hijos desde el hogar. desde el hogar. Las estadísticas sobre el futuro del aprendizaje de la lectura a nivel mundial son pesimistas.
Según los resultados de la Evaluación Nacional del Progreso Educativo llevada a cabo en 2022 en Estados Unidos, el puntaje promedio de los alumnos de cuarto grado del país en lectura disminuyó tres puntos, en comparación con 2019. Y Carolina Andueza.
En febrero, The New York Times publicó que hoy los estudiantes de octavo grado son peores en lectura que sus contrapartes en 1998, En el caso de América Latina y el Caribe, el informe "Dos a lvando a una generación", publicado por el Banco Mundial y Unicef en junio de 2022, advierte que cuatro de cada cinco alumnos de sexto básico de la región no alcanzan el nivel mínimo de comprensión lectora. Una de las causas identificadas por las organizaciones es el cierre de establecimientos educacionales durante la pandemia de covid-19. Según indica el reporte, estas cifras significan un retroceso de más de 10 años de los avances logrados en aprendizaje hasta ahora. Este problema se ha manifestado fuertemente también en Chile.
En octubre de 2022, un estudio publicado por la Facultad de Educación de la Universidad de los Andes indicó que un 96% de los estudiantes de primero básico no conocen las letras del alfabeto, por lo que no son capaces de leer algunos de los textos indicados como lectura complementaria por el Ministerio de Educación.
La investigación encontró, además, que los alumnos de segundo básico empeoraron su desempeño de decodificación de palabras según el Sistema Lexile (manera científica de medir la dificultad de los textos y las capacidades de lectura), bajando a la clasificación de lector inicial que es comúnmente asignada al nivel de kínder. Ninguno de los niveles del primer ciclo básico alcanzó la comprensión lectora requerida para el curso al que están asistiendo. curso al que están asistiendo. Anne Traub.
En diciembre de 2022 se lanzó la iniciativa público-privada "Por un Chile que Lee", que es una red articulada de organizaciones de la sociedad civil y entidades públicas que surge motivada por el diagnóstico de déficit de lectura en niños, niñas y jóvenes de las escuelas de Chile, sumado al convencimiento de lo fundamental de la comprensión lectora y el disfrute por la lectura desde la temprana edad.
Karla Eliessetch, coordinadora ejecutiva de la red y gestora cultural de políticas públicas de lectura, educación e innovación social, considera que aunque la crisis sanitaria fue un agravante, este déficit lleva décadas siendo un problema. --Tenemos una deuda histórica con la lectura de niñas y niños --Tenemos una deuda histórica con la lectura de niñas y niños --Tenemos una deuda histórica con la lectura de niñas y niños Karla Eliessetch. Karla Eliessetch. en Chile.
Desde que existen mediciones sabemos que hay muchos estudiantes de los primeros niveles educativos que no comprenden lo que leen, y la brecha se ha ido agrandando por el rezago lector desde la pandemi: Pero antes de la crisis sanitaria, el problema ya había sido detectado por el Ministerio de Educación, que en 2018 informó sobre 158 mil niños que pasaban a segundo básico sin contar con el nivel adecuado de lectura. Esta cifra se replicó en 2019, lo que llevó al organismo público a lanzar el programa "Leo primero", con el propósito de que todos los niños de nuestro país aprendieran a leer en primero básico. Hoy, la situación se ha agravado y los resultados del Simce 2022 lo comprueban.
Los alumnos de cuarto básico presentaron una baja en lectura de cuatro puntos en relación con 2018, mientras que respecto a los estándares de aprendizaje (conocimientos y habilidades), se encontró que solo un 40% de ellos presenta un nivel adecuado.
El pasado 14 de junio, el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, presentó estos resultados y aseguró que la brecha de aprendizaje evidenciada en ellos responde a "una tendencia de la última década a una baja de resultados y estancamiento", y se comprometió a que "al final del año escolar, no exista ningún niño que termine la primaria (cuarto básico) sin tener adquirido el proceso de lectoescritura", según informó "El Mercurio". Carolina Andueza, presidenta del Comité Ejecutivo de "Por un Chile que Lee" y directora ejecutiva de la Fundación CMPC, que desde el 2000 se ha dedicado a apoyar la educación temprana de niñas y niños de territorios en los que opera CMPC, dice: --No puede haber generaciones perdidas, y en este minuto hay algunas que no tuvieron clases presenciales en primero y segundo básico, y muchos de ellos tampoco tuvieron otras alternativas educacionales por falta de recursos.
Para Karla Eliessetch, el apoyo de la mediación lectora hacia los estudiantes es necesario para el avance de los menores en la lectoescritura y en la formación de lectores. --Es fundamental integrar a los mediadores de lectura, que son los padres, cuidadores y docentes cercanos a los niños y niñas, y capacitarlos permanentemente en términos de estrategia educativa, fomento lector, selección bibliográfica y encantamiento con la lectura para que guíen las trayectorias lectoras de cada niño de acuerdo a sus intereses y gustos.
Lo ideal es motivarlos a leer y socializar la lectura. varlos a leer y socializar la lectura. varlos a leer y socializar la lectura. varlos a leer y socializar la lectura. varlos a leer y socializar la lectura. varlos a leer y socializar la lectura.
Stiven Rivero llegó de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia, a Iquique junto a su esposa Lilia, su hija Macarena y sus dos hijos Sebastián (7) y Bruno (8) hace un año y medio. Migraron de su país en busca de oportunidades laborales y un ambiente de vida más tranquilo. La pareja los matriculó en la Escuela Gabriela 1 Niños que no saben leer ni escribir. En julio las fundación Familias Power realizó talleres de lectoescritura con estudiantes de diferentes lugares de Chile. 12 ya 12 ya Mistral. Los hermanos entraron a segundo y tercero básico, respectivamente, pero al padre la decisión le resultó extraña: tenía claro que no sabían leer y tenían un grave vacío en su educación, producto de la pandemia. Sebastián y Bruno iniciaron su educación en Bolivia, donde el sistema escolar también sufrió los embates de la falta de presencialidad y de un sistema poco preparado para educar a distancia. Stiven Rivero trató de apoyarlos, pero no fue suficiente: --Les hacía dictados para que escribieran, y lo único que hacían era mirarme y después mirarse entre ellos. Había muchas letras y palabras que ellos no conocían --cuenta el padre.
Cuando se instalaron en Chile, a Rivero le preocupaba la brecha que podría generarse entre sus hijos y el resto de los compañeros, pero ambos fueron asignados a un nivel diferente debido a los requisitos etarios.
Esta situación, comenta, afectó el proceso de aprendizaje de Sebastián y Bruno, así como también la confianza por sus habilidades. --En más de una ocasión, me dijeron que les daba vergúenz: al colegio porque no sabían leer bien, y que cuando la profesora hacía dictados otros niños se burlaban de sus habilidades.
Esta situación cambió el ánimo de los niños y frustró a su padre, porque no sabía cómo ayudarlos. --Yo veía que ellos se estaban esforzando mucho por aprender... pero lo que necesitaban era un apoyo adicional. ir ir ir La Fundación Familias Power apoya el desarrollo de la lectoescritura en niños y niñas que viven en contextos vulnerables, a través del desarrollo de talleres pedagógicos y el potenciamiento del rol educativo de las familias con las que trabajan en más de 25 comunas a lo largo del país.
Durante tres semanas de enero de este año lanzaron el programa Leer es Poderoso, que consistió en la realización de talleres presenciales enfocados en mejorar las habilidades de lectura y escritura de 200 a lo largo del país. Tras el éxito de su primera edición, Familias Power llevó a cabo un segundo ciclo de Leer es Poderoso, el pasado julio. Entonces realizaron un informe preliminar sobre los niños y niñas que asistieron al programa, que dio cuenta de la gravedad de su situación. De un universo de 700 alumnos de colegios públicos a lo largo del país, el análisis informó sobre un 56% de niños de primero básico que no escribe ni lee, y solo identifica letras. En el caso de quienes cursan segundo básico, el 63% no lee o solo lo hace silábicamente, sin ser capaces de identificar conceptos.
La cifra en tercero básico se reduce al 37%. Anne Traub, directora ejecutiva de la Fundación Familias Power, identifica los principales obstáculos a los que se enfrentan hoy los alumnos del primer ciclo básico en el aprendizaje de la lectoescritura, que llevan a resultados como los expuestos en su informe preliminar. --Entre las principales dificultades que vemos se encuentran el ausentismo de los estudiantes (en muchas ocasiones grave), los problemas de convivencia entre compañeros y la inasistencia de los profesores. A esto se suma el bajo nivel de hábito lector en los hogares de sectores vulnerables, así como también la falta de desarrollo y motivación por el disfrute lector.
Es decir, "si mis padres no leen o lo encuentran aburrido, por qué para mí sería distinto". Respecto de posibles políticas públicas que podrían ser implementadas para combatir el déficit en lectoescritura y motivar a los niños a disfrutar la lectura fuera del contexto escolar, Anne Traub expresa: --Urge un plan eficiente y eficaz de tutorías de recuperación de aprendizajes. Esto quiere decir que sean tutorías remuneradas, aprendizajes. Esto quiere decir que sean tutorías remuneradas, aprendizajes. Esto quiere decir que sean tutorías remuneradas, aprendizajes. Esto quiere decir que sean tutorías remuneradas, aprendizajes. Esto quiere decir que sean tutorías remuneradas, Niños que no saben leer ni escribir. "Urge un plan eficiente y eficaz de tutorías de recuperación de aprendizajes. Esto quiere decir que sean tutorías remuneradas y voluntarias: virtuales, personalizadas y también presenciales y en grupos". además de voluntarias, y también en variados formatos: virtuales, personalizadas, pero también presenciales y en grupos.
Por otro lado, considera necesario hacer kínder obligatorio, ya que afirma que la inasistencia de un grupo de alumnos a este ciclo educacional aumenta la brecha respecto a sus habilidades de aprendizaje más adelante en niveles mayores.
Anne Traub recalca el rol determinante que cumplen los padres y familiares, así como también otros adultos cercanos, en el aprendizaje de la lectoescritura durante la primera infancia. --Es fundamental estimular las habilidades cognitivas, sociales y emocionales de los niños en los primeros años de vida, ya que la evidencia científica señala que durante aquellos el cerebro humano está en su máxima capacidad de desarrollo.
Para eso, la familia, los padres y adultos significativos son fundamentales en la entrega de padres y adultos significativos son fundamentales en la entrega de las herramientas que serán claves para su desarrollo integral a futuro. El hogar tiene que ser la primera escuela. A mediados de junio, Cinthia González, la madre de Camila, vio un aviso. Era un anuncio sobre talleres de invierno que la Fundación Familias Power impartiría durante las tres semanas de vacaciones de invierno para reforzar los conocimientos de lectoescritura. No lo pensó dos veces e inscribió a su hija con la esperanza de que finalmente aprendiera a leer y escribir correctamente. Los resultados superaron sus expectativas. --No se perdió ni un día. Le gustaba mucho, porque las actividades le parecían entretenidas.
Para la segunda semana ya tenía la capacidad de leer más rápido y fluido, entonces podía participar de actividades con sus compañeros y sentirse incluida --cuenta Cinthia González, y agregan que su hija aprender a leer y escribir correctamente le ayudó mucho con su autoestima. --Ahora pasa a leer al frente de la clase y se siente contenta con ella misma cuando puede hacerlo sola. Cuando tiene una lectura del colegio me pide ayuda para que le tome el tiempo, e incluso es capaz de resumirlos y explicar de qué tratan. En Iquique, Stiven Rivero se enteró de que se impartirían talleres de lectura y escritura a niños.
Lo supo por una vecina cuyo hijo también necesitaba apoyo en el aprendizaje de lectoescritura. --El cambio fue impresionante --dice Rivero--. Sus notas han mejorado, y cuando salimos a la calle leen los letreros de los negocios. Es como un juego para ellos, y entienden que saber leer es algo importante para el día a día. algo importante para el día a día. algo importante para el día a día. Niños que no saben leer ni escribir.