Insólita pugna Trump-Musk
Insólita pugna Trump-Musk A pesar de haber dejado su cargo la semana pasada, recibiendo el reconocimiento de Donald Trump en la oficina oval, el creciente desencuentro entre Elon Musk y el Presidente de EE.UU. salió a la luz pocos días después.
Al parecer, el estilo de trabajo de Musk en la Oficina de Eficiencia Gubernamental (DOGE) provocó muchos problemas al interior del gabinete, pero, adicionalmente, los conflictos de interés que generaba el que intentara utilizar su influencia en el gobierno para beneficiar sus negocios se comenzaron a dar con más frecuencia. Y como tampoco logró los recortes de gasto prometidos, el mandatario decidió alejarlo poco antes de que se cumpliera el período de 130 días de su particular contrato. A partir de eso, la crítica de Musk a la ley de presupuesto fue contestada por Trump diciendo que el primero resentía que ella suspendiera los subsidios a los vehículos eléctricos.
Las acusaciones mutuas continuaron el jueves pasado, en un diálogo de ida y vuelta en las redes sociales y la televisión, en tiempo real, que llegó a su cúlmine con Musk acusando a Trump de aparecer en los archivos sobre Jeffrey Epstein, protagonista de escándalos sexuales con menores de edad (no hay pruebas de que Trump haya participado en esos escándalos; solo fotos que los muestran juntos en eventos sociales). La distancia entre el mundo tecnocrático que admira a Musk y que no concuerda con la política tarifaria de Trump, ni con su oposición al otorgamiento de visas a estudiantes o profesionales aventajados, y el movimiento MAGA (Make America Great Again), que añora un país manufacturero sin inmigrantes de países subdesarrollados, como el de hace 50 o 60 años, es cada vez más evidente. De hecho, Steve Bannon, referente de MAGA, dijo que Musk debía ser expulsado de vuelta a Sudáfrica. Las acciones de Tesla cayeron 14% tras el incidente, indicando que para el mercado la incursión política y el carácter de Musk siguen afectando sus negocios.
El empresario sugirió que podría usar su dinero para formar un nuevo partido, complicando al Partido Republicano y dividiendo la base política de Trump, y este podría castigarlo suspendiendo los contratos y subsidios que el gobierno tiene con sus empresas. ¿Cometió Trump un error de juicio al asociarse con Musk o fue un intento de usarlo a él y a su dinero en su favor? ¿ Fue Musk el que usó a Trump para aumentar su influencia política? ¿ O ambos se usaron mutuamente? Mientras, los zigzagueos del Presidente en materia tarifaria siguen siendo cuestionados y sus alardes de capacidad para parar los conflictos bélicos son desmentidos por la realidad. Su disputa con Musk viene a sumarse, además, a las crecientes dudas respecto de los efectos de su programa económico o los costos que significará para su país su disputa con las universidades. Por esta ruta, Estados Unidos no parece estar haciéndose más grande. La distancia entre el mundo tecnocrático y la base política de Trump se acrecienta..