Autor: Hernán Peredo López Profesor Titular (R) UACh
Institucional
Para quienes nos formamos profesionalmente hace más de 60 años en la Universidad Austral de Chile y luego trabajamos académicamente para ella por más de 40 años y aprendimos con nuestros Padres Fundadores a coy respetar los símbolos y liturgias institucionales, especialmente nuestro lema “Libertas Capitur”, es una lacerante y ominosa que la Superintendencia de Educación Superior (SES) haya increpado institucionalmente a nuestra alma mater por nombrar al rector actual en sesión extraordinaria del Consejo Superior Universitario del 22 de abril pasado, en mi opinión, en el intertanto una comunidad abúlica y anómica, sus autoridades superiores, los decanos y los representantes académicos al Consejo Académico, los sindicatos de académicos, de estudiantes y de profesionales, nunca se dieron porenterados de tener al frente de la institucióna alguien que noes “Primus inter pares”, pues no fue elegido por sus pares como corresponde a una universidad seria y que se respete, sino designado por un ente no académicamente puro, como los rectores delela dictadura, salvo que en este caso no tiene el respaldo de la fuerza y las armas, sino la abulia y anomia de la comunidad académica.
No menciono entre las instancias académicas abúlicas y anómicas de la ala Asociación Gremial de Académicos, pues su inacción actual me más aún habiendo integrado por dos períodos consecutivos su directiva en época de rectores delegados designados por la dictadura.
No pierdo la esperanza de que la Universidad Austral de Chile retome paulatinamente su dignidad a tan mal traer enel último quinquenio, con muchas reticencias pues la SESno es de mi entera confianza, así como tampoco lo es la CNA (Comisión Nacional de Acreditación), con quienes dejé de trabajar hace tiempo por la pérdida de confianza enambas instituciones.