Editorial: La educación normalista: una educación de calidad
Editorial: La educación normalista: una educación de calidad Han sido numerosas las críticas hacia la educación en nuestro país y muchos señalan que desde que la época de los profesores normalistas no tenemos excelencia en nuestras aulas.
Aquellos docentes normalistas orientaban la educación en el desarrollo de la persona humana en la totalidad de sus dimensiones, es decir un desenvolvimiento, una posibilidad de llegar a ser todo lo que una persona humana puede o debe llegar a ser. Sin esos progresos, el ser humano se frustra como tal, no llega a ser persona, queda malformado y lo expresa de múltiples maneras. Por eso se entregan muchas recetas para la educación del siglo XXI, que debe encargarse no del mayor progreso tecnológico o intelectual, sino de una transformación interior de la conciencia del ser humano. Para los profesores normalistas, la supervivencia requiere no sólo dela inteligencia y del progreso, sino de la habilidad de cooperarnos y amarnos unos a otros para vivir en armonía con la naturaleza. Un profesor normalista decía que la hormiga ha sobrevivido más tiempo que el hombre gracias a su trabajo colaborativo. Biológicamente, las hormigas son simples insectos con una memoria limitada y únicamente capaces de realizar un número limitado de acciones sencillas.
Sin embargo, una colonia de hormigas tiene un comportamiento colectivo, cooperativo y complejo, proporcionando soluciones inteligentes a problemas como el transporte de grandes objetos, la creación de puentes y la búsqueda de las rutas más cortas desde el nido a la fuente de alimentación.
Hoy en Chile extrañamos la educación de los profesores normalista y urge que volvamos a recuperar la enseñanza de calidad.. “El siglo XXi demanda un cambio total en nuestra actitud frente a la vida y en nuestra visión de la educación”.