Público y nacional
Público y nacional Señor Director: Los ciudadanos identifican lo público con lo nacional. Así debería ser, pero hace rato que lo público se ha "independizado" de lo nacional para ejercerse como propiedad de quienes trabajan para el Estado y se han convertido en virtuales dueños del Estado. Dije en una carta reciente que los empleados públicos de las Fuerzas Armadas y del Ordenjuran en realidad ante la bandera, es decir, ante la Nación, y los empleados civiles ante el sindicato. En la práctica, el sindicato jura ante sus asociados. Asíel sindicato se convierte en la verdadera autoridad del sector público. La contraloría acaba de revelar que nuestra distinción se quedó corta: 25.000 empleados públicos pasaron del abuso a la desvergijenza.
Usaron licencias médicas fraudulentas para viajar al extranjero. ¿Cuántas licencias médicas más se habrán usado para quedarse encasa amparados en falsas enfermedades? Las ausencias laborales pasaron hace rato "de castañoa oscuro". Se sabe que hay frescolines que solo van a la oficina a marcar tarjeta. Unmillón detrabajadores públicos. La cifra seincrementaen cada gobierno, superando lejos la relación con la población frente a cifras de otros países. En general ganan más por trabajos semejantes queel sector privado. Son evaluados con calificación máxima con un descaro ante el cual los líderes sindicales se ufanan convencidos que el resto de los chilenos nos chupamos el dedo. Es claro quese necesita Estado para regular y prestarserviciosa lasociedad, peroesta función hadevenido en una fuente que no va con el interés nacional. Hay que recuperaral Estado para la sociedad. Alejandro Witker Historiador.