Autor: Daniel Solís Igor Rector CFT Estatal Calama
Fake news: ¿estrategia o equivocación?
“El llamado es a verificar las fuentes y aeducar a las futuras generaciones, a confirmar la información y no caer en la trampa de fake news”. Acantidad de información que circula en internetesinmensa, y muchas de ellas son noticias falsas, o más conocidas como fake news, que consisten en contenido seudo-periodístico difundido a través de portales de noticias y redes sociales, que tienen un claro objetivo: la desinformación.
Estas noticias falsas aumentan la polarización en la sociedad, convenciéndolo sobre esa mirada y en muchos casos negando ver otras perspectivas de la realidad más completa, lo que produce un sesgo cognitivo y esto trae como consecuencia la viralización de las noticias o de mensajes, haciendo creer a las personas que son un aporte, cuando en realidad, lo que hacen es colaborar con la desinformación.
Esta situación se ha acentuado con la crisis mundial que atravesamos a causa de la pandemia, noticias falsas han sido un factor común todas las semanas y con la que han tenido que lidiar las personas y los medios de comunicación, quienes cada vez han tenido que “competir” con la información del llamado periodismo social, donde las personas comparten estas malas fuentes y la bola de nieve se vaacrecentando, haciendo creer real lo falso.
Claramente el riesgo está en que aún no tenemos la cultura de verificar lo que nos llega, sobre todo en espacios de mayor confianza como Whatsapp, que nos llevan a creer esta desinformación, porque en muchos casos lo envió alguien cercano.
Pero la pregunta es ¿ a quién le creo? Sin duda es muy importante reconocer la fuente de las noticias que vemos y compartimos, mucho se ha señalado a los medios de comunicación formal que son más lentos al entregar la información, olvidando en muchos casos que son estos mismos quienes verifican la fuente y los datos para entregar una noticia clara y certera. Esta arma de la desinformación ha demostrado ser eficaz en aquellos asuntos que resultan ser sensibles, por lo mismo es importante llevar a cabo esta batalla sobre cómo combatir esta comunicación. Según el académico Ivor Gaber de la Universidad de Sussex de Reino Unido: “La desinformación ha existido siempre, a partir del momento en quese cobró conciencia de lainfluencia de los medios en la opinión pública.
En cambio, sí quees nuevo y realmente preocupante el hecho de que la desinformación se propague con una celeridad y amplitud inauditas por plataformas digitales como Google o Facebook”. Esta desinformación ha llegado en todo tipo de frente, y la educación no queda ajeno a ello, por esto el llamado es a verificar las fuentes y a educar a las futuras generaciones, a que cada información que reciban por medios de comunicación no convencionales sea fidedigna y no caer en la trampa de fake news.