Científicos defienden el rol de los perros como guardianes de la salud de los humanos
Científicos defienden el rol de los perros como guardianes de la salud de los humanos humanos y al ambiente; es decir, que todo está más relacionado de lo que pareciera". Zapata agrega: "Si uno hace un diagnóstico a un perro de alguna enfermedad y analizamos su contexto, quizás eso nos permite entender también dolencias en el humano". Coincide Sonia Anticevic, académica de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias (Favet) de la U. de Chile. "Los perros no tienen la complejidad mental que tenemos nosotros, pero su sistema inmune, por ejemplo, es prácticamente igual al de los humanos. Y aunque tenemos diferencias propias de las especies, sus sistemas respiratorio y digestivo también son muy parecidos a los nuestros", precisa. En ese sentido, el escrito de Science también destaca el concepto de "Una Salud" e indica que en las últimas tres décadas ha habido un reconocimiento de su importancia.
Apoyo social Pero además del rol de centinela, las entrevistadas son enfáticas en afirmar que los perros pueden ser guardianes de la salud humaEstablecer programas Las autoras del artículo de Science plantean la necesidad de establecer un programa centinela en la medicina veterinaria de los países, considerando la oportunidad para prevenir y combatir epidemias, aprovechando la convivencia estrecha entre humanos y perros. Es un planteamiento con el que están de acuerdo las especialistas locales entrevistadas. "Es una forma de proteger nuestra salud pública y también la de las mascotas. Además, debemos abrir más líneas de investigación en esa línea", dice Sonia Anticevic.
Beatriz Zapata agrega: "Nosotros hemos dicho que incluso nos hace falta un organismo en Chile, una institucionalidad más centralizada, que tenga que ver con la salud animal". En este momento, agrega, "todo lo que tiene que ver con esto pasa por distintas autoridades. Por ejemplo, parte de la salud animal la ve el Servicio Agrícola y Ganadero. Pero si es que son enfermedades de transmisión al humano, las ve el Ministerio de Salud. Otras que tienen que ver con animales silvestres las atiende el Ministerio de Medio Ambiente y así, sucesivamente.
Creemos que hay una necesidad en el país de una institucionalidad en la línea del concepto de `Una Salud', que pueda velar por el estudio de las enfermedades animales desde esta mirada". S e estima que los perros han cohabitado con los humanos durante unos 30 mil años, una relación estrecha que ha llevado a considerar a este animal como "el mejor amigo del hombre". Pero más allá de esta consideración que se les ha dado popularmente, esa convivencia ha constituido un tema de estudio para los científicos: entender hasta qué punto los perros pueden influir en la vida humana.
Uno de los trabajos científicos más recientes se dio a conocer hace pocos días en un editorial publicado en la revista Science, el cual sugiere la necesidad de reivindicar el rol de los perros como guardianes de la salud humana. Las autoras plantean que estos animales pueden ser centinelas de la salud pública, además de un apoyo al bienestar social y a la calidad de vida de los individuos.
Sobre el primer punto y en el contexto de la epidemiología, un animal centinela actúa como indicador de la presencia o propagación de enfermedades infecciosas en una determinada área o población. "Al compartir ambientes con los humanos, los factores que pueden influir en su salud son muy similares a los nuestros", explicó al diario El País Courtney Sexton, académica de la Universidad de Virginia y coautora del artículo de Science. La forma en la que viven estos animales, que implica que huelen y chupan muchos elementos a su alrededor, los hace tener mayor incidencia de enfermedades infecciosas, explicó la experta. Según comenta, esto permite establecer conexiones entre el impacto ambiental en su salud y la de las personas.
De acuerdo con el editorial, los canes pueden ayudar a estudiar patógenos transmitidos por vectores, por ejemplo, o los efectos en la salud de la exposición a metales pesados o a microplásticos. "Nuestras relaciones estrechas con los compañeros caninos ofrecen una oportunidad para aprender cómo el exposoma (la exposición a un ambiente y su impacto en la salud) compartido contribuye a la calidad de vida, tanto de las personas como de los perros", se lee en el texto.
Beatriz Zapata, presidenta nacional del Colegio Médico Veterinario de Chile (Colmevet), cree que el planteamiento es muy importante. "Yo rescato el valor que le da (el editorial) a un concepto sobre el cual nosotros venimos hablando hace tiempo, que es el de `Una Salud' (One Health), que quiere decir que lo que les afecta a los animales también nos afecta a los na de muchas otras maneras valiosas. Una importante, señalan, es siendo una ayuda emocional en el contexto del envejecimiento de la población en muchos países, además de la llamada epidemia de soledad que afecta a múltiples sociedades.
Marcela Cárcamo, médico veterinaria y epidemióloga de la Facultad de Medicina de la U. de los Andes, dice: "Hay mucha literatura donde se ve una reducción en la sensación de soledad de sus dueños y un aumento en los sentimientos de apoyo social, así como una mejora del estado de ánimo". En esa línea, múltiples investigaciones también han revelado que tener un perro se asocia con una disminución en la sensación de estrés y en los síntomas de ansiedad y depresión. Al respecto, Cárcamo comenta: "Hay trabajos que han visto cómo la presencia de un perro baja el nivel de una hormona llamada cortisol, la cual se relaciona con el estrés.
En ese sentido, también puede haber un beneficio en cuanto a disminuir la presión arterial". De hecho, la compañía de un perro puede reducir el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca en humanos, según científicos de la Asociación Estadounidense del Corazón, quienes realizaron un estudio en el cual demostraron que las personas que sacan a pasear a su perro cumplen con los niveles de movimiento que se aconsejan en un 54% más que aquellos sin esta mascota.
Debido a su capacidad para ser entrenados, los perros incluso pueden ser de ayuda en la vida de pacientes con enfermedades específicas, como epilepsia, señalan las entrevistadas. "Es una realidad que muchos perros son los que avisan cuando un niño esta convulsionando o que son capaces de reconocer una glicemia elevada y la necesidad de insulina, por medio del sudor de los humanos. Por otro lado, se han hecho estudios en donde se ha comprobado que tienen la capacidad de detectar cáncer a través de su olfato", comenta Anticevic.
Así, las especialistas coinciden en que la enorme evidencia científica sugiere la necesidad de avanzar en estos estudios y establecer programas formales que permitan encontrar más tendencias, y entender aún más la relación entre la salud de los perros y la de los humanos (ver recuadro). Editorial publicado en la revista Science destaca que pueden ser animales centinela: Científicos defienden el rol de los perros como guardianes de la salud de los humanos JANINA MARCANO Al compartir ambientes con las personas, los canes pueden ayudar al estudio de patógenos o del impacto de la contaminación, por ejemplo. Además, la evidencia muestra que son capaces de reducir enfermedades en sus dueños y mejorar su salud mental. Múltiples estudios han revelado que tener un perro se asocia con menor sensación de estrés y menos síntomas de ansiedad y depresión. Por ello, su rol puede ser crucial ante el envejecimiento poblacional en muchas partes del mundo y de la llamada "epidemia" de soledad, señalan especialistas. PXHERE/CREATIVECOMMONS.