Reafirmamos nuestro compromiso y seguimos avanzando
Dr.
Claudio Rojas Miño, rector de la Universidad Católica del Maule. ] pasado 28 de agosto celebramos el trigésimo tercer aniversario de la Universidad Católica del Maule, un momento significativo en nuestra historia, marcado por un proceso de autoevaluación institucional que nos impulsa a examinar profundamente nuestra calidad y compromiso educativo. Este ejercicio colectivo no sólo busca la acreditación, sino también una reflexión profunda sobre nuestra misión y visión como universidad católica. Nos encontramos en un entorno de constantes cambios, desde la irrupción de nuevas tecnologías y formas de aprendizaje hasta las tensiones globales que sacuden nuestras sociedades.
Como dijo José Ortega y Gasset, “No sabemos lo que nos pasa, y eso es precisamente lo que nos pasa”. Enfrentamos desafíos que nos exigen no sólo adaptarnos, sino también ser faros de serenidad y confianza en un mundo cada vez más incierto. La cultura, entendida como “la forma en que vivimos juntos”, según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), debe impregnarse de un espíritu que trascienda la simple institucionalización. Necesitamos un ethos que otorgue sentido y profundidad a nuestras transformaciones, evitando que se queden en meros cambios superficiales. Como universidad católica, nuestro desafío es ser una “universidad en salida, que dialogue con el mundo y contribuya a mitigar sus ansiedades. Este diálogo debe estar inspirado en la fe, recogiendo las enseñanzas del evangelio, para que la razón y la espiritualidad guíen nuestras acciones. En este espíritu, hemos implementado nuestro Plan de Desarrollo Estratégico, que nos guiará hasta 2028 enfocado en consolidar, innovar y servir, alineados con nuestro proyecto educativo institucional.
En este afán es que nuestra infraestructura también se incrementa con importantes acciones, como es el inicio de las obras del nuevo Campus Santa Mónica en la provincia de Curicó, cuyo primer edificio se proyecta para el inicio del segundo semestre de 2026.
En Talca, contamos con un nuevo edificio en pleno centro de la ciudad donde actualmente se encuentra prestando su servicio a la comunidad la Clínica Jurídica de la Escuela de Derecho, y en el Campus San Miguel se concretan prontamente el nuevo edificio de la Facultad de Ciencias Básicas y un nuevo edificio destinado exclusivamente para la formación de Postgrado. A la par, nos preparamos para la autoevaluación institucional, un proceso que nos permitirá identificar fortalezas y áreas de mejora. Sin embargo, en medio de estos esfuerzos por modernizar y mejorar, no debemos perder nuestra alma. Nuestro objetivo final es ser una universidad que sirva a su comunidad y al mundo, un lugar donde sea grato trabajar y convivir.
Como nos recuerda el Evangelio según San Juan: “El viento sopla donde quiere... así ha sucedido al que nace del Espíritu”. Estemos atentos a ese viento, permitiendo que el Espíritu guíe nuestro diálogo y servicio, para ser una universidad católica a la altura de sus desafíos. Y)