Autor: CARLOS PEÑA

CARTAS: La pasión del miedo
CARTAS: La pasión del miedo Señor Director: Uno de los peligros de la democracia en estos tiempos mustios de ideas, es que a falta de otras pasiones se estimule la peor de todas: la del miedo. Es lo que, temo, está ocurriendo a propósito de la elección de Jeannette Jara. Se está intentando, consciente o inconscientemente, emplear el miedo como principio movilizador en su contra.
Así se olvida o se omite que Jara es la candidata de una coalición (pero, se dice, de llegar al poder ella impondría su voluntad); se infiere a partir de la ideología de su partido un programa de gobierno (y entonces de lo que se trataría en noviembre es de evitar la dictadura del proletariado); se atribuye a los comunistas lo ocurrido en octubre (simplificando un fenómeno harto más complejo); se dice que para ellos la democracia es instrumental (una idea que, dicho sea de paso, también está en la doctrina de la Iglesia o en autores prestigiosos como Hayek); se invita a intervenir a comunistas arrepentidos a que ayuden a advertir los peligros (como quien conversa con un pecador que estuvo a las puertas del infierno para que enseñe a persignarse e indique el recto camino), y así. No se trata de estar a favor del comunismo; se trata de esforzarse por ser leal al juego de la democracia.
La democracia requiere un lenguaje más o menos racional, formas comunicativas susceptibles de ser evaluadas por aquellos a quienes el discurso se dirige; pero si la esfera pública se comienza a llenar de fantasmas, de viejos fantasmas, el comunismo de la Guerra Fría, el Golpe del 73, con el fin de despertar el miedo que habita en cada ser humano, o si los medios a falta de algo mejor, o por ignorancia o falta de ilustración o facilismo, o lo que fuera, se empeñan en alimentar el miedo que siente cada uno cuando se asoma a los límites de la realidad o de la memoria, entonces se entorpece el diálogo democrático, la mayoría de los ciudadanos principian a enmudecer y un pequeño grupo, a apretar los puños. CARLOS PEÑA.