Autor: Efe
El impacto indeleble que causaron pruebas nucleares en Islas Marshall
El impacto indeleble que causaron pruebas nucleares en Islas Marshall as pruebas de armas nuLo: que Estados Unidos llevóa cabo en las Islas Marshall tras la II GuerraMundial (1939-1945), entreellaslapielseles zónen los ojos, fuertes dolores biaron de color y desarrollaron madres veían como asus hijosse llenaba de ampollas”, relató. únacontaminada, sesucedieron o delacomunidad fueron desdesnudos enel barco, enel viasin su consentimiento fueron co secreto para examinar loscaía, sentían quemade estómago... sus dedos camfuertes migrañas, mientras las les caíael pelo y el cuerpo se les Trasserevacuados delazolosabusos: “mi familia y el resnudados y obligados a estar jese les roció agua a presión, y llevados a un laboratorio médiefectos dela radiación”. Durante 40 años fueron au-lasdel cólebre atolón Bikini, tuvieron graves impactos en los derechos humanos de su población y sus responsables debenrendircuentas, afirmó esta semana la Oficina dela ONU paralos Derechos Humanos.
La cuestión fue llevada a debate en la actual sesión del Comité de Derechos Humanos dela ONU, donde la alta comisionada adjunta de la oficina, Nada Al Nashif, recordóelviernes el impacto que estas pruebas tuvieron en forma de problemas de salud, desplazamiento de pueblos nativos y erosión de modos de vida tradicionales.
“Nuestra oficina ha recibi-ténticas cobayas, relató TibonKilma, quien señaló que incluso sus abuelos fueron llevados a Nueva York con el pretexto de que iban a ser llevados alos mejores hospitales de EEUU “para alfinal convertirse enobjetos de feria en barbacoas y picnics de científicos”. “Tibon-Kilma también re-doterribles testimonios delimpacto pasado y presente de estas pruebas nucleares, historias de exposición a la radiación, de proliferación de casos de cáncer, abortos y partos prematuros”, denunció la número dos dela oficina, institu ción que ha conducido unainvestigación del caso en cooperación con el Gobierno de las Islas Marshall.
Al Nashif también recordó los casos de lo que la población natal denominó “bebés medusa”, niños nacidos con pieltraslúcida y sin huesos, posiblemente por la exposicióna la ra-cordó el nacimiento de “bebes medusa” de madres afectadas por el accidente nuclear, y como los científicos intentaron convencera lasmujeres de que eran producto de prácticas inúcestuosas, no de la radiación. las de archipiélago El Marshall, a medio camino entre Papúa Nueva Guinea y Hawai, fue descubierto en el siglo XVI porel explorador español Álvaro de Saavedra y perteneció a Alemania entre 1885 y 19l4yaJahasta 1944.03 pón desde1920secuencias de estas pruebas”, concluyó.
En el debate participó la presidenta de la Comisión Nacional Nuclear de las Marshall, Ariana Tibon-Kilma, estos tests, quien contó los hores y otros supervivientes de Islas descendiente de víctimas de rrores sufridos por sus familiaunaccidente nuclear ocurridoen 1954, cuando EE.UU. deto-nó enel archipiélago su mayor bomba de hidrógeno en ese momento, del tipo Bravo.
“Horas después comenzaronasentir picores yal rascarse7.000 BOMBAS DE HIROSHIMA Estados Unidos, que adminis-traba esas islas hasta su independencia en 1991, realizó 67 pruebas nuclearesenese terri-torio entre 1946 y 1958, pro-bando más de una veintena de bombas de hidrógeno y atómicas enel contexto dela carreraarmamentística contra la en-tonces Unión Soviética. las Islas Las pruebas en Marshall, recordó Al Nashif, sumaron un poder explosivo equivalenteamás de 7.000 bombasINFORME RECORDÓ INCLUSO EL CASO DE LOS BEBÉS MEDUSA: NIÑOS NACIDOS CON PIEL TRASLÚCIDA Y SIN HUESOS. diación de sus madres durante elembarazo. como! la que destruyó la ciudad Japonesa de Hiroshima en 1945. “Han pasado 78 años desde el primero de aquellos tests nucleares, pero sus consecuencias siguen estando dolorosa'mente presentes, con comunidades aún desplazadas y radiactividad que todavía contaminalatierrayel mar”, denunció Al-Nashif.
“Las lecciones de los tests nucleares en las Marshall debenservir para todo el planeta, ya que existen otras zonas, comunidades y países que suftieronosiguen sufriendo las conDurante un año de pesquisas, la oficina también recogió testimonios de pueblos indígenas que debieron dejarsus hogaresen Bikini y otros atolones, “siendo desconectados de sus modos tradicionales de vida”. Muchas de estas comunidadesdesplazadas comenzarona conservarlos cadáveres de sus seres queridos en tumbas no subterráneas, con el fin de poderllevarlos un díaa sus tierras originales, contó la alta comisionada adjunta ante el Consejodela ONU.. La ONU denunció esta semana los efectos en los derechos humanos de los 67 ensayos hace 78 años y pidió castigos. HUTTERSTOCE