Autor: RODRIGO CASTILLO

El Palacio Aldunate renace de las cenizas: “Fue como construir un edificio de arriba hacia abajo”
El Palacio Aldunate renace de las cenizas: “Fue como construir un edificio de arriba hacia abajo” Levantada en 1893, la propiedad alberga ahora un conjunto de locales comerciales El Palacio Aldunate renace de las cenizas: "Fue como construir un edificio de arriba hacia abajo" El inmueble neoclásico -que en 2013 fue arrasado por un incendiofue sometido a un cuidadoso trabajo de recuperación y remodelación.
RoDRIGO CASTILLO C C Fi: como construir un ediC C Fi: como construir un edificio de arriba hacia abajo", resume el arquitecto Andrés Orezzoli, de la oficina M+G Estudio, para explicar el desafío técnico que implicó la remodelación del icónico Palacio Aldunate, inmueble construido en 1893, declarado edificio de Conservación Histórica en 2011, y que en 2013 fue arrasado por un incendio que destruyó todo su interior, dejando en pie sólo su fachada neoclásica. "Tuvimos que demoler el primer piso, conservando el segundo, y luego volver a construir otro primer piso en el mismo lugar donde estaba el anterior", relata Orezzoli, quien finalmente logró cumplir, junto a su socio Germán Venegas, la misión encomendada por la firma Nialem Grupo Inmobiliario, propietaria del palacio: recuperar la arquitectura característica del inmueble, sobre todo en la planta alta, y habilitar el primer piso para albergar en él un conjunto de cuatro locales comerciales. El miércoles al atardecer se realizó la ceremonia oficial de lanzamiento del edificio ya remodelado. Se invitó a autoridades municipales y regionales, así como a representantes del mundo de la cultura y a socios del Grupo Inmobiliario Nialem. Alberto Ureta, gerente general de Nialem, informa que cuatro locales comerciales del primer piso ya están arrendados, aunque aún hay que esperar la resolución municipal que permitirá que esos negocios entren en funcionamiento. Con ello, agrega, esperan "poner en valor el centro de Santiago", demostrando que existen inversionistas dispuestos a situarse en una zona de la capital que desde hace años luce más bien alicaída. Al MARIOLA GUERRERO GUERRERO GUERRERO La centenaria edificación está ubicada en Alameda con Ejército. Ejército. Ejército. Ejército.
Ejército. ] N mismo tiempo, confiesa que, cuando ocurrió el incendio de 2013, se consideró la posibilidad de demoler el palacio, pero fue desechada. "El edificio se encuentra en un sector de conservación histórica, y está prohibido intervenir o demoler un edificio que tiene esa calidad, aunque sólo haya quedado la fachada, como ocurrió en este caso.
Y a nosotros, además, nos interesaba recuperar este edificio icónico que fue muy bonito y que representa toda una época de la arquitectura santiaguina", cuenta el ejecutivo. "Desarrollamos este proyecto en conjunto con la Dirección de Obras de la Municipalidad de Santiago.
En un comienzo, la idea de ellos era replicar el edificio tal como era en sus orígenes, pero eso, en términos inmobiliarios, pensándolo como negocio, no era viable, porque nos obligaba a tener una sola entrada para el público, lo que no nos permitía hacer un proyecto comercial.
Así surgió el plan de reconstruir la fachada original, pero desde el segundo piso hacia arriba, y en el primer piso crear una fachada nueva, que incorporara elementos nuevos, e a 7 PA AS k j j e e pero que respetara el carácter del edificio", resume Ureta.
El profesor Sergio Estrada, académico del Departamento de Historia y Geografía de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, destaca el valor patrimonial del palacio diciendo que el edificio representa la opulencia de un periodo -fines del siglo XIX que para Chile fue de gran desarrollo económico, y que dio origen a edificaciones que reflejaban "el poder y la posición de le élite de la época". "El palacio era tan grande que en realidad comenzaba en el segundo piso, cuya entrada estaba ubicada por avenida Ejército. Fue construido por encargo del abogado, político y diplomático Luis Aldunate, y a la muerte de éste, la viuda se quedó en el palacio hasta finales de la década del 20.
En el contexto de la decadencia del barrio por la crisis económica y el éxodo de la élite, el palacio se transformó en un espacio comercial que se instaló en el primer piso, sirviendo los pisos superiores como bodegas", cuenta el docente.
El arquitecto Andrés Orezzoli exEl arquitecto Andrés Orezzoli exEl arquitecto Andrés Orezzoli exEl arquitecto Andrés Orezzoli exMP ad ES MP ad ES plica algunas de las tareas que se realizaron para revivir el esplendor del inmueble: "Después del incendio, en la planta alta no quedó nada de las cúpulas que caracterizaban a este edificio, así que ideamos un homenaje a esas cúpulas. También rehicimos toda la ornamentación de la fachada, usando moldes hechos a partir de los ornamentos que aún se conservaban.
Usamos técnicas muy parecidas a las que se emplearon originalmente para construir este palacio", detalla. "Debido a todo lo que ocurrió en los últimos años, desde el estallido social hasta la pandemia, las propuestas para la remodelación del palacio fueron cambiando constantemente. Este proyecto también resultó complicado de abordar porque el palacio es muy conocido, así que todo el tiempo estuvimos en el ojo público.
Tuvimos que reinterpretar tanto las cúpulas desaparecidas como el hall de acceso y la fachada del primer piso, buscando una estética que fuera tan histórica como contemporánea, lo que significaba, en buenas cuentas, ser eclécticos", resume..