Golfo Arábigo, nuevo aliado estratégico para Chile
Golfo Arábigo, nuevo aliado estratégico para Chile La próxima visita del Presidente Boric a Emiratos Árabes Unidos (EAU) marca un punto de inflexión en la relación de Chile con los países árabes del Golfo: es la primera visita oficial de un jefe de Estado chileno en ejercicio a una región que concentra seis de los doce fondos soberanos más grandes del mundo --Abu Dabi, Dubái, Arabia Saudita, Qatar y Kuwait--, y que tiene por objetivo principal la firma del Acuerdo de Asociación Económica Integral (CEPA, por sus siglas en inglés) que con certeza abrirá el pipeline de inversiones árabes hacia Chile en temas críticos para nuestro desarrollo.
La negociación del CEPA, que iniciamos durante 2021 en Expo Dubai, responde al creciente interés árabe por Latinoamérica y es condición necesaria para las familias regentes al momento de elegir el país en el cual invertir, ya que otorga garantías estatales en el largo plazo. Recordemos que en el Golfo Arábigo no existe un sector privado propiamente tal, ya que las empresas y los fondos son de propiedad de las familias que conducen el Estado. Se trata, entonces, de relaciones entre Estados.
En Latinoamérica, los que ya han firmado acuerdos con los países árabes del Golfo, como Brasil, Colombia, Costa Rica, y próximamente Uruguay y Paraguay, han incrementado su intercambio comercial y su flujo de inversiones, por lo que sin duda será muy beneficioso para Chile. El cambio climático ha perfilado las materias de interés para la inversión árabe. Por una parte, su necesidad de seguridad alimentaria los lleva a invertir globalmente en agroindustria, desalinización de agua e infraestructura logística.
Por otra parte, con el objetivo de mantener el liderazgo energético, están diversificando su modelo de ingresos basado en la exportación de hidrocarburos hacia la inversión global en proyectos de energías renovables no convencionales, hidrógeno verde, transmisión eléctrica y electromovilidad, entendiendo que la energía a bajo costo es un factor fundamental para el crecimiento y desarrollo de las naciones.
Hasta ahora, las incipientes inversiones de fondos soberanos árabes en Chile han sido adquisiciones de empresas ya existentes (puertos, exportadoras de frutas, autopistas, distribución de combustibles), y dan cuenta de las características que buscan para sus inversiones: inversión directa, sin licitaciones; operadores locales con trayectoria comprobada; y proyectos estratégicos para el país receptor con respaldo estatal. Con la firma del CEPA, los árabes buscarán invertir además en proyectos de relevancia estratégica para el desarrollo de Chile en las materias mencionadas, inyectando capitales frescos al país.
Con seguridad, la acertada visita del Presidente y la posterior visita del canciller a Qatar y Arabia Saudita para la próxima reapertura de la Embajada en Riad marcan una nueva etapa que fortalecerá el nexo con una región que se está perfilando como un importante núcleo geopolítico y económico, equivalente a lo que fue para Chile el Asia Pacífico en los 80, y será propicio que se consolide como una política de Estado. JORGE DACCARETT BAHNA Exembajador de Chile en Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y Qatar.