Rachel Reeves tiene una obsesión: el crecimiento *
Rachel Reeves tiene una obsesión: el crecimiento * MARCELAvÉLEZ-PUcKERT Sentada Sentada en la mesa desu cocina, Rachel Reeves solia ver a su madre sacar cuentas meticulosamente. meticulosamente. “Cada centavo cuenta”, decía.
Es el mismo lema con el que Reeves asumió el 5 de julio el carga de Canciller o Ministra de Hacienda de Reino Unido. ) ustamente, el que esté a cargo de las finanzas públicas en un momento en que el pais enfrenta, a decir de la propia Reeves, su escenario fiscal más delicado desde la Segunda Guerra Mundial, la convierte en uno de los ejes del Gobierno del primer ministro, Keir Starrner. Ex economista del Banco de Inglaterra, Inglaterra, graduada de Oxford y LSE, Reeves ha prometido reactivar el crecimiento como vía para estabilizar las cuentas fiscales, reducir la deuda y mejorar los demandados servicios públicos. Los obstáculos no son pocos. La economía británica estuvo entre las más afectadas por la pandemia (con una caída del 10% del PIBJ, está prácticamente estancada desde el fin de la recuperación en 2023. El FMI proyecta que el crecimiento será de menos 0,5% este año y se mantendrá en tomo a un 1% anual hacia el final de la década. Mientras, la deuda pública pasaría del 100% del PIB actual a 109% hacia 2029. El nuevo Gobiemo laborista ha prometido prometido reducir el déficit fiscal del 6% del PIB (2023) a 4,5% este año y 3,2% en 2025. Pero la agencia calificadora S&P advierte que Reeves y su equipo enfrentan duras restricciones.
“La presión tributa ría se encuentra ya en su nivel más alto de la posguerra, es probable que persista la presión para aumentar el gasto público, dado lo sobrecargados que están algunos servicios públicos clave [como salud y las cárcelesj, asi como la necesidad definanciar la defensa y hacer frente a los costos crecientes relacionados con el envejecimiento de la población”, advirtió S&Pa modo de bienvenida la misma semana que Reeves asumió el cargo.
En linea con otros líderes de izquierda, izquierda, Reeves reniega de la idea de austeridad fiscal Pero, más moderada que muchos en su campo politico, la economista sabe que no hay avance sin el sector privado y que no se puede hablar de reducirla desigualdad con una economía estancada.
De ahí lasdudas entre los analistas y el mercado sobre cómo logrará mejorar las cuentasfiscales, ampliar ymejorarlos serviciospúblícos(como ha prometido Starmer)yfinanciarel anunciado plan de política industrial verde sin aumentar la deuda y sin reducir el gasto. Reeves está determinada en demostrar demostrar quelas laboristas si pueden generarbuen desempeño económico, y que el éxito en esa área de la dupla Tony Blair-Gordon Brown [1997-2007) no fue una excepción. Primera mujer ya con su nombramiento ha roto otros estereotipos. Reeves es la primera primera mujer en ocupar la cartera de Hacienda en el Gobierno británico; y, con 45 años, la más joven desdel783.
Hija de profesores, Reeves no es la primera ministra en estudiar en una escuela pública, pero su experiencia sí es de especial relevancia al ser parte central de un Gobierno que ha planteado planteado cobrar IVAa las mensualidades de los colegios privados. En su primera semana en el cargo, Reeves ha evitado referirse a la introducción introducción de este impuesto, uno de los pocos que planea sumar. “Hay que centrarse en hacercrecer la economía. Eso es lo que quiero conseguir. conseguir. No creo que juguetear con los impuestos sea la mejor manera de hacer crecer la economia”, aseguró en una visita a Financial Irimes Irimes a mediados de junio.
Fue sólo una de lastantas visitas visitas que Reeves realizó a actores del mercado para convencera los poderosos de la City londiy londiy nense de que no planea elevar 9 impuestos deforma generalizada, y que -bajo su administración el Partido Laborista será su aliado. Llamada “la dama de hierro del laborismo”, Reeves muestra una determinación que ha estado ausente ausente de los últimos gobernantes británicos y que asemeja a la icó nica Margaret rhatcher. Es más, al explicar la gravedad de la situación económica y fiscal de Reino Unido, la voz de Reeves adquiere ese tono bajo y ronco similar al que Thatcher usaba para defender sus decisiones. No deja de ser curioso que sea comparada a la líder conservadora. Reeves nació en febrero de 1979, durante el “invierno del descontento”, descontento”, una época de protestas que culminó con la llegada deThatcheral poder. Sus padres fueron acérrimos opositores a rhatchery sus reformas de austeridad. Reeves siguió pronto sus pasos, y abs 16 años se afilió al Partido Laborista. Sin embargo, nunca fue extremista. A diferencia de Starrner, que en su juventud dirigia una revista trotskista, trotskista, Reeves siempre mostró una inclinación más socialdemócrata o de centro. Su plan económico incluye una mayor intervención del Estado en diversos sectores, como la energía, la construcción y la industria. En su diseño hay elementos de política industrial, similares a las anunciadas recientemente por EEUU y la UE, para promoverel “crecimiento verde” pero con montos muy inferiores debido a las restricciones fiscales. En su primer discurso, Reeves de talló que la estrategia de crecimiento se basará en estabilidad, inversiones y reformas.
El primerebemento contempla contempla elfortalecimiento institucional y el cumplimiento de la promesa de campaña de no elevarlos impuestos que más afectan a los hogares, como los tributos a la renta, el aporte a la seguridad social y el IVA. Reeves cree que un Gobierno que muestre determinación para hacer cambios será capaz de atraer inversiones, inversiones, en un escenario geopolitico más inseguro. Ello, promete, irá de la mano de reformas. La principal será al Sistema de Planificación y Permisos. Reducir la burocracia, anunció Reeves, significará devolver varias decisiones de inversión al poder central, especialmente para aprobar grandes proyectos. La prioridad la tendrán los proyectos en energía e infraestructura, especialmente vivienda. Bajo la nueva modalidad, autoridades autoridades locales, deberán informar al poder central de todo proyecto que llegue a sus oficinas. Reeves sabe que sus planes “molestarán “molestarán a muchos”, pero advirtióque no dejará de “tomar las decisiones dificiles. “Cualquierdesarrollo puede tenerconsecuenciasmedioambientales, tenerconsecuenciasmedioambientales, ejercer presión sobre los servicios y generar voces de oposición local.
Pero no sucumbiremos a un statu quo diciendo siempre no, y relegando el interés nacional por debajo de otras prioridades”, advirtió. ¿Será suficiente se preguntan los analistas? Con un 17% del PIB, Reino Unidotíenelatasa de inversión más baja entre los paises del G7 desde hace casi tres décadas y el FMI no proyecta una mejoria hacia 2029.
Si Reevesno logra reactivar la inversión y con ella el crecimiento, se enfrentará a la dura decisión de elegir entre la austeridad fiscal, traicionando sus principios yla promesa de campaña de Starmer, o aumentarlos impuestos, traicionando su propia promesa a los electores y al sector privado. 0 Rachel í14 :iene una Reeves 1k ón: el crecimiento La nueva jefa de las finanzas públicas británicas ha acercado la izquierda al mundo empresarial y financiero, pero advierte que sus planes “molestarán a muchos”. 4:4.