Autor: Empresario Carlos Cardoen
CARLOS CARDOEN: “Los privados hacen un trabajo harto mejor que el Estado para preservar, conservar y mostrar los patrimonios”
CARLOS CARDOEN: “Los privados hacen un trabajo harto mejor que el Estado para preservar, conservar y mostrar los patrimonios” na semana al mes, Carlos Cardoen vive en Quemchi, donde está construyendo un museo que albergará aspectos de la cultura de Chiloé en un amplio espectro. Una vez inaugurado será el sexto de la red que fundó hace más de 30 años, y el primero fuera de la Región del Maule.
Un interés que surgió hace 50 años, pero cuya materialización se aceleró a principios de los 90, tras la orden de captura internacional de Interpol, luego de que Estados Unidos lo acusara de sacar del país ilegalmente circonio para la fabricación de armas.
“Son las circunstancias que acompañan al hombre, las que le hacen tomar los cursos de su vida”, explica el empresario, aunque no con un sentido de fatalidad, sino de oportunidad: “Hay que tener una actitud de no estar esperando que te pasen las cosas, sino que debes hacer que las cosas pasen en la medida de tus habilidades, capacidades, recursos o lo que sea”. Esas vivencias y máximas de vida están plasmadas en la autobiografía que escribió con la ayuda de su amigo Patricio Tupper, hombre clave junto a Marcelo Santander en el desarrollo de sus museos. El texto está listo y espera publicarlo el 1 de mayo de 2025, justo cuando cumpla 83 años. “Memorias de 80 años” es el título que baraja. Por ahora, junto al editor Andrés Urrutia está abocado a seleccionar las fotos. “No ha sido tan fácil, porque son muchas y pucha que son fundamentales ¡ si a veces la gente solo mira las fotos! ”, señala con humor.
Ad portas del 18 de septiembre, una fecha que atesora, en la que religiosamente se viste de huaso y su familia sus ocho hijos, 27 nietos y 3 bisnietas se reúne en la casa en Santa Cruz, Carlos Cardoen repasa los orígenes de su pasión por la museología, sus proyectos y negocios, así como su visión del acontecer nacional. ¿Cómo parte este interés por la museología y el rescate del patrimonio?“Es muy sencillo.
Después de recibirme de ingeniero, hacer mi posgrado en Estados Unidos, doctorarme allá, comencé a trabajar en una empresa norteamericana, que era una gran productora de explosivos a nivel mundial, Ireco, que entre paréntesis fue fundada por Melvin Cook, un científico, empresario y que fue mi profesor en la Universidad de Utah. Me tocó tomar responsabilidades administrativas que me llevaron a viajar a diferentes países de Latinoamérica, a Perú, México, Ecuador. Esos viajes me pusieron en contacto con el conocimiento de las civilizaciones que nos precedieron en América.
Y como quedé marcado con lo que me enseñó mi padre tempranamente: Hijo, estudia para tener la íntima satisfacción de saber, empecé a conocer estas culturas maravillosas. ¡Yo estudié en el mejor colegio que había en Chile en ese tiempo que era el Internado Nacional Barros Arana y nunca me enseñaron nada de las culturas precolombinas! !Me ensoñé con esto y como había un comercio de objetos precolombinos y tenía afortunadamente los recursos, comencé a coleccionar objetos de las culturas precolombinas”. ¿Siempre con la idea de abrirlas al público?“No. Me encantaría decir que sí, que lo tenía todo planeado, pero no fue así. En ese tiempo los viajes no eran como ahora, que uno puede ir a Nueva York por dos días.
Iba por lo menos una semana y además de visitar las empresas, agendaba visitas a museos y empecé a conocer a los principales arqueólogos y curadores, Mujica Gallo en México, Betty Meggers en el Smithsonian, Federico Kauffman Doig en Perú. Me metí en este mundo cultural profundo y todo esto me permitió adentrarme en el mundo cultural de Chile.
Una fuente muy inspiradora para mí fue Sergio Larraín García Moreno, creador del Museo de Arte Precolombino, y quien tuvo la enorme delicadeza de ofrecerme su colección más privada que hoy está en el Museo de Colchagua.
También es muy admirable lo que hicieron Hugo Yaconi y Manuel Santa Cruz, que fundaron el MAVI. ¿Un museo en Santa Cruz?... , ¡ estás loco! De a poco, Carlos Cardoen comenzó a hacer colecciones, por ejemplo, de la culturacompetir internacionalmente y le va bien, es como una adicción. Uno se cree Alejandro Magno y llegan los asesores que está en venta una empresa en Grecia y uno ya, compra, pero uno se está creando una dependencia más, simplemente. Entonces al final, te das cuenta de que el único activo que tienes es la vida que tienes entre hoy y el crematorio. Y la manera en que tú administras ese espacio para ser feliz es lo que realmente vale, nada más.
Soy achoclonado con mis hijos, nos los veía como me hubiera gustado porque te ves obligado a gastar ese activo maravilloso que es ese tiempo en tus propios monstruos que estuviste creando”. Pero finalmente esas empresas, esos monstruos, le permitieron dedicarse a los museos. El dinero es un habilitante“Absolutamente. Tan claro como que tempranamente me di cuenta de que el dinero es un medio y no un fin. Y en ese desequilibrio es donde se producen las grandes diferencia políticas y sociales. Debiéramos estar todos vacunados contra lo que se llama greed, la avaricia. El empresario que descubre que puede hacer cosas empieza a meterse a una vorágine que no tiene límites.
Entonces la mayoría de las empresas ve el dinero como un fin, y hasta no hace mucho tiempo veías en sus memorias, sin excepción, veías que el objetivo era maximizar la riqueza de sus accionistas. ¡Mira el fin más fariseo!”. Sin embargo, y haciendo una caricatura, entre los accionistas está el Tío rico Mac Pato y personas para los que tiene todo el sentido maximizar la riqueza porque de eso viven. “Claro, es legítimo. Por eso es tan importante la regulación, las reglas orientadas al bien colectivo, la elección de nuestros representantes.
Dónde está el límite, de cuánto para arriba comienza la avaricia, es muy difícil de determinar, es muy subjetivo, y por eso es tan fácil que se te arranque la yegua ensillá y nadie la para () y empiezas a acumular dinero sin un fin”. ¿Fue su caso?“Yo pasé por ese camino, me tocó experimentarlo, pero es un fenómeno que veo universal”. ¿No todos deben llegar a la conclusión de que hay que “vacunarse contra la avaricia?“No, está en la justa medida que te dé la administración de ese tiempo.
O sea, me centro en mi activo que es el tiempo que me queda, quiero gastarlo de una manera en que no solo sea feliz, sino que le dé significado a lo que estoy haciendo y al dinero también.
Hacerlo herramienta que no solo satisfaga los proyectos en que estoy, sino que darle un sentido, lo que haga con el dinero es lo que genera valor”. ¿Y qué es lo que hoy tiene sentido?“No tengo tiempo para la gente tóxica, la gente que no aporta, que ve un problema donde hay una oportunidad, que anda diciendo ay, es que están tan malas las cosas, en vez de levantarse en la mañana a ver qué oportunidad hay, cómo vamos a mejorar lo que tenemos”. ¿Qué oportunidades ve en el país?“Están las oportunidades, pero que las circunstancias fueron tales que tenemos a cargo a gente joven que no tiene la capacidad mínima para poder garantizar un resultado medianamente exitoso. ¿Por qué? Porque se combinaron la ignorancia con la arrogancia, y eso hace un cóctel muy malo”. ¿No cree que el Gobierno ha evolucionado hacia socialdemócrata, incluso reivindicando figuras como el expresidente Ricardo Lagos, de quien usted era cercano?“Ricardo Lagos es lejos el estadista más grande que hemos tenido. Chile se lo farreó en gran medida porque fue políticamente eliminado por su propia gente. Me produjo una profunda tristeza ver al señor Elizalde dirigir un asesinato político para sacar al Presidente Ricardo Lagos de la escena política.
El Partido Socialista ahí jugó un papel muy triste”. “Tenemos a cargo a gente joven que no tiene la capacidad mínima para poder garantizar un resultado medianamente exitoso () Se combinaron la ignorancia con la arrogancia”. “Ricardo Lagos es lejos el estadista más grande que hemos tenido. Chile se lo farreó en gran medida porque fue políticamente eliminado por su propia gente.
El Partido Socialista jugó un papel muy triste”. especie de dueño del tema, esto iba a durar lo que dure mi vida, que es muy efímera”. Además del hotel y de la viña en Colchagua, empezó junto con su señora, Pilar Jorquera, a difundir las mejores prácticas culinarias, hoteleras para transformar Santa Cruz en un atractivo turístico para chilenos y extranjeros.
Asimismo, hace casi una década, gracias a una asociación con la Universidad de Talca, en ese entonces dirigida por Álvaro Rojas, se creó el campus Colchagua, donde forman técnicos expertos en maquinaría para la industria del vino, y que antes venían de Europa. “Estamos revirtiendo el curso del flujo del intelecto.
Antes todos los que nacíamos aquí salíamos a buscar oportunidades afuera, ahora vienen a Santa Cruz a buscar oportunidades”. ¿Cuánto influyó en este desarrollo local, la orden internacional de captura de Interpol?“Por supuesto que sí, porque son las circunstancias, le repito, que te van llevando a tomar los cursos que tu vida tomó”. ¿Cómo le gustaría que se preservaran estos museos en el futuro? ¿ Que continuaran en la familia?“Sí, pero en la medida que contribuyan a la felicidad de mis hijos y mis nietos.
Creo en lo que dice Khalil Gibran, que tus hijos no son tuyos, tú eres el arco y ellos son la flecha que tú lanzas al infinito”. ¿Y traspasarlos al Estado?“Si es en pos de preservarlos, el Estado chileno es el peor de todos los administradores.
Los privados hacen un trabajo harto mejor que el Estado para preservar, conservar y mostrar los patrimonios”. “Lo único que uno tiene es la vida entre hoy y el crematorio”En 1993, cuando Interpol interpuso una alerta de captura internacional, Carlos Cardoen vivía la mayor parte del año fuera de Chile. “Tenía una posición productiva con industrias en muchas partes del mundo, en Grecia, España, Italia, Estados Unidos. Tenía un jet transcontinental para los viajes y el 60% del tiempo estaba afuera. Y cuando uno es joven y se da cuenta de que es capaz de hacer empresas, de que no es tan difícilChavín, Paracas, Nazca, la cultura Inca, que se transformaron en exposiciones itinerantes por Chile. Casi sin pensarlo, se encontró con una gran cantidad de piezas y colecciones en bodegas especialmente acondicionadas, y surgió el bichito de hacer un museo.
Quien primero conoció la idea fue su padre, “mi mejor consejero, un hombre muy culto, tremendamente entretenido, de una gran capacidad ingenieril y como con 20 patentes de inversión”. ¿Y qué le dijo?“Me preguntó ¿ y dónde lo vas a hacer, negro? Mi ideal es en Santa Cruz, respondí. ¿En Santa Cruz?, ¡estás loco, hazlo en Santiago, si allá está la gente!”. En 1992 nació la Fundación Cardoen que hoy alberga cinco museos: de Colchagua, del Vino, del automóvil, de artesanías y el de Vichuquén. La apuesta por Santa Cruz tuvo viento a favor con el despertar de Colchagua al turismo, como una zona privilegiada para generar de las mejores uvas y vinos del país. “Empezó a llegar más y más gente y preguntaba oiga, y no habrá un hotel aquí. Entonces decidí hacer un hotel”, cuenta el empresario quien nuevamente recurrió a su oráculo. “¿Negro, y cuántas habitaciones? Cuarenta menos, quiebro y para eso no estoy, lo tengo prohibido. Hoy tenemos 160 habitaciones y estamos chicos”. ¿Está en sus planes crecer?“No, porque esto no es solo traer turistas y cultura. Aquí hubo un mecanismo sociocultural inédito. Y si yo me transformaba en unaEl Grupo Empresas Cardoen está compuesto por compañías en el rubro agroindustrial, metalúrgico, eléctrico, turismo y servicios, diversificación que comenzó a fines de los 80. “Lo fundamental que une a todas estas empresas, es la innovación”, dice el empresario. De sus ocho hijos, seis trabajan en las empresas y dos emprenden por su cuenta, aunque todos están en los directorios. New Tech Copper: a cargo de su hijo Andrés, está en la metalurgia, y desarrolla nuevos procesos para la minería. Enor Chile: dedicada a las energías renovables, participan Andrés y Álvaro, el menor que se recibió de ingeniero civil en energías renovables. New TechAgro: abastece a la agricultura de productos para el control de plagas; participa Rodrigo, como gerente comer-cial. Viña Santa Cruz: la dirige Emilio, a cargo también de campos que arriendan a terceros o en los que están asociados.
“La comercialización de productos agrícolas exportables, incluido el vino, deja mucho que desear () arriendo los campos a quien es capaz de pelear con toda esa cadena de intermediarios”. Hoteles: su hija Francesca es gerentadel hotel Santa Cruz, mientras que Diego está en el directorio de Almacruz. Casino Colchagua se administra con los hoteles y con la viña forman el área turismo. Carlos, el mayor, tiene empresas en el rubro inmobiliario, mientras que Sebastián el penúltimo es socio de Aeronit, que representa marcas de aviones como Piper Aircraft. Diversificación y traspaso a la segunda generación. “Memorias de 80 años” se llama la autobiografía que el empresario colchagüino tiene lista y espera lanzar en 2025.
Contiene episodios personales, máximas de vida y la visión empresarial que ha plasmado en un grupo diversificado de negocios en el rubro agroindustrial, metalúrgico, eléctrico, turismo y servicios. • CAMILA MIRANDA KRAUSS Construye su sexto museo en Chiloé y el primero fuera de Santa Cruz Empresario Carlos Cardoen