Autor: GERARDO VARELA
COLUMNAS DE OPINIÓN: Empresarios pesimistas
COLUMNAS DE OPINIÓN: Empresarios pesimistas dios del Estado que disuaden al empresario más entusiasta. Estados Unidos demoró 9 años en poner a un hombre en la Luna. El último proyecto minero grande en Chile demoró 12 años desde que solicitó los permisos hasta que extrajo la primera onza de cobre. Los que la tienen clara son Milei y Trump. El primero nombró un ministro con nombre intimidante (Sturzenegger) que está dedicado a racionalizar el Estado megalómano argentino.
Trump, a su vez, designó a Elon Musk y Vivek Ramaswany para que simplifiquen la organización, estructura y regulaciones de USA, buscando ser leales con el espíritu original de los padres fundadores que querían un Estado chico, que no ahogara a los ciudadanos. Los empresarios no necesitan El Presidente Boric ha arremetido una vez más contra el empresariado chileno sosteniendo que estos dejarían de invertir en Chile por una suerte de inveterado pesimismo ideológico. En respaldo señala que los extranjeros sí confían en Chile y están invirtiendo. No he conocido empresarios que dejen de hacer buenos negocios por razones ideológicas. Lenin la tenía clara cuando dijo que los capitalistas le venderían la soga con la cual los ahorcaría. Los extranjeros (y no son muchos como para que el Presidente se entusiasme demasiado) invierten en Chile más que los chilenos por varias razones. La primera es que pagan casi un 9,45% menos de impuestos que nosotros. Casi un 10% de mayor rentabilidad en cualquier proyecto es una enormidad.
La segunda es que un tipo de cambio alto hace que los activos chilenos sean más baratos para ellos y la tercera es que en sectores como la minería deben ir a invertir donde están las minas. Un extranjero me dijo que lamentablemente el cobre no estaba en Europa, sino que en Zambia, Kazajistán o en Chile, de manera que tendrían que ir a esos países no obstante el riesgo político.
Los empresarios extranjeros que sí están viniendo en masa son Los Gallegos, Los Pulpos, los Espartanos y el Tren de Aragua, que se están haciendo la América, gracias al FA y el PC, que les facilitan la vida indultando delincuentes, atacando a carabineros y poniendo a un acosador a cargo de la seguridad. Los chilenos invierten fuera de Chile porque allá les dan la bienvenida, las rentabilidades son mayores y los riesgos menores.
El costo de hacer negocios en Chile es cada vez más alto, entre otras razones, por la "permisología" y el pesimismo ideológico de los mandos medo alguien se quema con leche ve la vaca y llora. No son pesimistas los que invirtieron en pequeñas centrales (PMDG) bajo reglas que el ministro Pardow quiere cambiar para financiar un subsidio político.
Tampoco fueron pesimistas los miles de profesores y pequeños emprendedores que se endeudaron y desarrollaron cientos de proyectos educativos hasta que el pesimismo ideológico d e l a i z q u i e r d a prohibió la actividad empresarial en la educación; ni las compañías de seguros afectadas por las rentas vitalicias; ni los salmoneros a los cuales les roban las mafias; ni Agrosuper y su proyecto en el norte; ni Maersk y su fábrica de contenedores; ni los vecinos de La Higuera que siguen esperando el proyecto Dominga; ni los agricultores a los que les queman sus casas, y para qué sigo hablando de los pesimistas. Industrias de servicios en que Chile era competitivo con los países desarrollados, como salud y educación, han sido permanentemente atacadas por la ideología gobernante. Las pensiones donde están radicados nuestros ahorros están siendo acosadas con una reforma políticamente impopular y técnicamente inadecuada. Gracias a la montaña regulatoria, hace mucho rato que nadie se abre en bolsa. Empresas nuevas como Cornershop, NotCo y otros pesimistas pusieron sus holdings fuera de Chile.
En definitiva, el Presidente debe recordar el dicho de que "un pesimista no es más que un optimista bien informado". n que les digan palabras bonitas, pero sí que dejen de insultar su inteligencia y su humanidad.
Si los verdaderos pesimistas son los que creen que al cambio climático se lo combate con decrecimiento y no con innovación y tecnología; son los que prefieren a las mascotas que a los niños; los que consideran que la selección es una discriminación y no un reconocimiento y una distinción; los que creen que la pobreza se supera persiguiendo a los ricos, y mejor no sigo para no ponerme pesimista. Un viejo dicho de campo dice que cuanOPINIÓN Empresarios pesimistas EMPRESAS NUEVAS COMO CORNERSHOP, NOTCO Y OTROS PESIMISTAS PUSIERON SUS HOLDINGS FUERA DE CHILE. EN DEFINITIVA, EL PRESIDENTE DEBE RECORDAR EL DICHO DE QUE "UN PESIMISTA NO ES MÁS QUE UN OPTIMISTA BIEN INFORMADO". GERARDO VARELA.