Smart campus o campus inteligentes
Smart campus o campus inteligentes e]ColumnaJavier Muñoz Acuña docente Facultad de Administración y Negocios Universidad Autónoma de Chile, sede Temucoos llamados Smart Campus o Campus Inteligentes son una tendencia en augeen las universidades, promovidos »mo una solución tecnológica que promete mejorar laLos Smart Campus representan una oportunidad innegable para transformar las e, universidades. Sincalidad de vida de la comunidad universitaria y optimizar las operaciones internas de la institución.
El concepto, que gira entorno al uso del Internet delas Cosas yla transformación digital, estácargado de promesas: automatización, sensoresque optimizanel uso delos recursos, sistemas avanzados de análisisde datos, entre otras herramientas que, en teoría, mejoran la experiencia deestudiantes, académicos y pecsonaladninisral: Como profesional enelámbito académico, hetenido la oportunidad dereflexionar sobre este fenómeno. cia vi, elembargo, suconcepto suena fasciun campus dondetodo estéinter-implementación no debeenfocarsóloenla "ante: +.. tecnología, sino también conectado, dondelas enel factor humano. tus sc pnensolS cuando no hay nadie enlas aulas, donde elsistema de riego seactivesolo cuando es necesario, o donde los estudiantes puedan acceder fácilmenteatoda la información que necesitan desde una única plataforma digital.
Estas tecnologías buscan hacer más eficiente la gestión de recursos y facilitar la vida de quienes interactúan me pregunin embargo, también conelespacio universitario. to, ¿esrealmente todo tan positivo como parece? Unadelas principales preocupaciones que mesurgetiene que verconla privacidad y laseguridad.
En un mundo dondelos datos son el nuevo petróleo, ¿qué implica que todo lo que hacemos en el campus quede registrado? Desde nuestra ubicación exacta hasta nuestros hábitos de estudio, todo podría ser monitoreado. ¿Hasta qué punto estamos dispuestos a sacrificarnuestra privacidad en nombre dela eficiencia? Y, más importante aún, ¿qué medidas se están tomando para proteger esos datos? Porque si bien la tecnología puede traer grandesbeneficios, no podemos olvidar que también abrela puertaa nuevos riesgos. Además, otro aspecto que me inquieta esla inclusión. No todos los miembros de la comunidad universitaria tienen el mismoaceesoalatecnologíanila misma capacidad para interactuar con ella. Sibienlos Smart Campus prometen un entornomás accesible, debemos preguntarnos si estas innovaciones están diseñadas para todos.
Implementar una tecnología sin considerar las barreras socioeconómicas puede terminar marginando aquienes yase encuentran en unasituación vulnerable. ¿De qué sirve un campus “inteligente” sino es inclu-sivo?Por último, me parece relevante reflexionar sobre la dei-“inteligente”. En algunos casos, se confundenición misma dela implementación masiva de tecnología con inteligencia, cuando en realidad un campus verdaderamente inteligente debería ser aquel que entiende lasnecesidades de su comunidad y las satisface de manera sostenible y equitativa. Un campus quenosolosea eficiente entérminos operativos, sino que también promuevaelbienestar, la privacidad y la inclusión. En conclusión, los Smart Campus representan una oportunidad innegable para transformar las universidades. Sinembargo, su implementación no debe enfocarse únicamenteen latecnología, sino en un enfoque humano, social y ético. Solo así podremos construir entornos realmente inteligentes, dondelatecnología esté al servicio detodos y no solo de unos pocos.I.