Estudiantes voluntarios fomentan la lectura y escritura en escolares de sectores vulnerables
Estudiantes voluntarios fomentan la lectura y escritura en escolares de sectores vulnerables En los trabajos y misiones de invierno que realizan diferentes instituciones educativas del país no solo se construyen casas: los estudiantes que participan ahora también fomentan la lectura entre los niños y las niñas más vulnerables.
Se trata del programa "Leer es Poderoso", de la Fundación Familias Primero, entidad que vio en estos jóvenes voluntarios una oportunidad para masificar el proyecto que busca enseñarles a escolares el amor por los libros y la importancia de leer, nivelándolos en la lectoescritura según el nivel en que se encuentren. Los voluntarios pertenecen en su mayoría a Trabajo País de la U. Católica, la U. San Sebastián y los colegios Los Andes, San Anselmo, San Miguel Arcángel y Verbo Divino, entre otros. "Este programa ha sido muy bien recibido en las comunidades donde lo hemos implementado. Hemos trabajado en más de 25 comunas y apoyado a más de dos mil niños. Queríamos llegar a más, y para eso necesitábamos gente que lo implementara sin costo económico. Encontramos la solución en los trabajos voluntarios de invierno y verano", explica Anne Traub, directora de la Fundación Familias Primero. En el verano de este año, "nos asociamos de manera piloto. Los jóvenes ya están presentes en muchas localidades y tienen momentos del día dedicados a entretener a los niños. Así, pensamos en que ellos refuercen la lectura y escritura de manera entretenida y con una metodología estructurada. La fundación les facilita todo el material y los capacita, así, ¡todos ganamos! ", explica.
Magdalena Ovalle, directora de "Leer es Poderoso", precisa que "bajo la consigna `Pala, martillo y libro' buscamos que los estudiantes que realizan trabajo de misiones innoven en ese espacio y lleven a terreno el fomento lector, para así apoyar a escolares en las localidades que visiten, que hoy son más de 30 en todo Chile". La experta agrega que la iniciativa "ha demostrado, vía estudios, ser una metodología que funciona: ha elevado las habilidades de lectura en un 11,5%. Esto en solo dos semanas de tutorías intensivas". Nivelar la cancha Catalina Vidal, estudiante de Obstetricia en la U. San Sebastián (sede Patagonia), es una de las voluntarias que han realizado tutorías a escolares. Al respecto, comenta que "me he sentido bien, contenta y empoderada en el rol. Además de generar un cambio estructural en algunas zonas de las comunidades que visitamos, también ayudamos a la educación, en este caso, con algo tan importante como la lectura. Sabemos que con estos minicambios se puede mejorar una comunidad entera". Salvador Correa, alumno de la carrera de Ingeniería Comercial en la U. Católica y voluntario en Trabajo País, precisa que la experiencia la ve como "una forma muy bonita de transmitir nuestro conocimiento hacia el resto.
Participar de este proyecto es una forma de nivelar más la cancha, porque, de verdad, el ayudar y enseñar a un niño que no ha tenido tanto acceso a la educación puede cambiarle la vida". Y asegura: "Es muy reconfortante en ese sentido". Ovalle añade: "Esperamos que nuestra consigna sea parte de los trabajos y misiones de la máxima cantidad de jóvenes voluntarios, porque ellos son la fuerza movilizadora más poderosa que tiene Chile hoy, fortaleciendo la lectura y el aprendizaje de más niños.
Los estudiantes pueden ser un gran aporte en esta meta". De distintas universidades y colegios: Estudiantes voluntarios fomentan la lectura y escritura en escolares de sectores vulnerables CONSTANZA MENARES n Pensando en llegar a más alumnos, la Fundación Familias Primero vio en los jóvenes que participan de los trabajos y misiones de invierno una oportunidad para masificar un programa que busca potenciar el gusto por los libros. El programa ha elevado las habilidades de lectura en un 11,5% en dos semanas de tutorías intensivas, asegura Magdalena Ovalle, directora de "Leer es Poderoso". FUNDACIÓN FAMILIAS PRIMERO.