Autor: RICARDO MEWES Presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile (CNC)
Un vecino olvidado
Señor Director: Para los dirigentes del comercio, siempre ha sido motivo de profundo orgullo que la sede gremial dela Cámara Nacional de Comercio sea un edificio patrimonial El Palacio Bruna, en calle Merced frente al Parque Forestal, fue adquirido en 1995 por la CNC y sometido a un dedicado proceso de restaura ción. Gracias a ese trabajo y a su valor arquitectónico, fue declarado Monumento Histórico el 7 de noviembre de 1996.
Cada año, compar timos ese orgullo abriendo las puertas ala comunidad para el Día delos Patrimonios, Frente a los desmanes, vandalizaciones de todo tipo, sumados al grave problema de seguridad que afecta al barrio, como CNC nos enfrentamos a un desafío que tiene tres dimensiones: representamos al sector de la economía que se vio más afectado por el estallido social, somos los dueños de casa de un histórico en un lugar que ya no.
Es respetado por su riqueza cultural y, Finalmente, somos vecinos de la zona cero, donde dientos de comerciantes se han transformado es una verdadera resistencia ciudadana al delito yla victimización Día a día lidiamos con la basura, muros rayados y protestas que terminan en destrucción, alo que se le suma en las últimas semanas el robo delas placas de bronce de nuestro frontis y aun euando ya se ha hecho parte del paisaje, no podemos permanecer impávidos ante el deterioro y abandono de los espacios públicos.
Esto se aprecia en muchas ciudados a lo largo del paí, donde, tal como en el barrio Lastarria, se ofrecían lugares de encuentro ciudadano en los que se podía disfrutar de manera segura en entornos limpios y cuidados. El comercio es un actor relevante de la ciudad, pues se trata de un vecino más. Pero no es uno cualquiera: los almacenes son mucho más que lugares de abastecimiento; son también espacios de cohesión social en lugares apartados, el sueño de emprendedores y la posiblidad de un mejor futuro para. Ies de familias. En el último tiempo el comercio ha sido vandalizado, victimizado y destruido, tal como lohan sufrido los cascos históricos y los patrimoniales, No queda más que esperar que las autoridades se acuerden de sus vecinos.