¿Qué viene después de un autócrata”?
¿ Qué viene después de un autócrata”? Ya están envejeciendo ¿ Qué viene después de un autócrata? Un tema de nuestros tiempos es el ascenso del "régimen personalista", dirigido por un individuo cuya voluntad importa más que cualquier ideología. Ahora, esos individuos están envejeciendo. Simon Kuper 1 principio de la película de 2017, La muerte de Stalin, el dictador es encontrado inconsciente en el suelo tras un derrame cerebral. Sus subordinados Jruschov y MalenKov, y el jefe de la policía secreta Beria, temen al psicópata aun cuando yace postrado. Discuten sobre llamar a un médico. Malenkov se demora: "Como secretario general en funciones, creo que, eh, bueno, el Comité debería decidir". Jruschov protesta: "Pero nuestro actual secretario general yace en un charco de indignidad.
Creo que está diciendo: Consíganme un médico, ahora". Malenkov no está muy entusiasmado: "Creo que, eh, creo que deberíamos esperar hasta que tengamos cuórum". "¿Cuórum?", pregunta Jruschov. "Sólo está consciente 75 por ciento de la habitación". No se llama a ningún médico competente a tiempo, y Stalin muere a los 74 años. En los próximos años, en varios de los países más poblados del mundo, podría repetirse una versión real aunque menos divertida de esta escena. Un tema de nuestros tiempos es el ascenso del "régimen personalista", dirigido por un individuo cuya voluntad importa más que cualquier ideología. Ahora, esos individuos están envejeciendo. Vladimir Putin, Xi Jinping, Narendra Modi y Recep Tayyip Erdogan nacieron entre 1950 y 1954, lo que significa que se están acercando a la edad de Stalin al morir.
El presidente entrante de Indonesia, PraboEl presidente entrante de Indonesia, PraboEl presidente entrante de Indonesia, PraboEl presidente entrante de Indonesia, PraboEl presidente entrante de Indonesia, PraboEl presidente entrante de Indonesia, Prabowo Subianto, nacido en 1951, es del mismo molde de autócrata. Donald Trump, el potencial próximo presidente de EE.UU. con un estilo de liderazgo personalista ("Solo yo puedo arreglarlo") es aún mayor. A medida que estos líderes se acercan a la muerte, aumenta la probabilidad de que haya caos e imprevisibilidad, pero también crece la esperanza de algo mejor. Desde la muerte de Stalin en 1953 hasta 1990, los regímenes personalistas eran raros. En los estados comunistas postestalinistas, rara vez importaba quién era el líder, Los comités de hombres grises gobernaban. Cuando moría el secretario general, le tocaba el turno al siguiente apparatchik. Pero después de la caída del comunismo, los regímenes basados en comités escasearon. El Partido Comunista de Cuba y los mulás de Irán son dos raros sobrevivientes. mulás de Irán son dos raros sobrevivientes. mulás de Irán son dos raros sobrevivientes. Todopoderosos Hoy en día, son más comunes los regímenes "sultanistas" dirigidos por presidentes vitalicios todopoderosos.
Eso describe al putinismo, pero también, en cierta medida, a China, antes basada en comités, donde Xi ocupa los tres principales roles de liderazgo. ¿Qué sucede entonces cuando el sultán se acerca a la muerte? En primer lugar, su horizonte temporal se estrecha. Un líder que envejece tiene que actuar con rapidez para asegurar sulegado. Tal vez no sea coincidencia que Putin invadiera Ucrania después de que, según se dice, empezó a viajar con oncólogos. El último biógrafo de Xi, Michael logos. El último biógrafo de Xi, Michael logos. El último biógrafo de Xi, Michael logos. El último biógrafo de Xi, Michael logos. El último biógrafo de Xi, Michael logos. El último biógrafo de Xi, Michael logos. El último biógrafo de Xi, Michael Sheridan, considera que el presidente de China se ha dado un plazo de cinco años para tomar posesión de Taiwán. Las cosas se vuelven aún más peligrosas cuando el discernimiento y la perspicacia del único que toma las decisiones se deterioran con la edad, como en el caso del aparente deterioro cognitivo de Trump. Algunos líderes ya no podrían ser ni siquiera contadores, pero tienen acceso al botón nuclear. Sus obsesiones políticas se formaron hace eones.
Putin está ocupado tratando de reparar el colapso de la URSS, mientras que la pes dilla formativa de Xi fue la ca cultural de los tán menos animados por, digamos, el cambio climático o la inteligencia artificial. Para aumentar la imprevisibilidad, ninguno de los dos tiene un heredero evidente. Un gobernante personalista sólo puede crear una monarquía familiar hereditaria de facto en los Estados jóvenes y débiles como Corea del Norte o Turkmenistán. En Rusia o Turquía, varios contendientes compiten por convertirse en líder. El primero en hacerlo podría ganar el premio.
En las dictaduras personalistas, escribe Sarah Hummel de Harvard, "los intentos de golpe y las destituciones irregulares son más probables a medida que los líderes envejecen y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". y su muerte se vuelve inminente". ¿Qué pasa después? Algunos de estos regímenes pueden simplemente desaparecer cuando muere el líder, como sucedió con el régimen español del general Franco tras su muerte pañol del general Franco tras su muerte pañol del general Franco tras su muerte en 1975.
Al analizar "una muestra global de dictaduras de 1946 a 2008", Anne Meng, de la Universidad de Virginia, concluyó que "la mayoría de los partidos gobernantes son incapaces de sobrevivir a la muerte o la partida del líder fundador". Incluso cuando los líderes supuestamente dirigían "regímenes de partido único", los partidos a menudo resultaban ser meros vehículos personales. Según Ora John Reuter, de la Universidad de Wisconsin, los regímenes con mayores posibilidades de sobrevivir son los que se basan en grandes organizaciones de masas. El BJP de Modi, el AKP de Erdogan o el Partido Comunista de Xi cumplen ese criterio. Pero Putin y Trump apenas tienen organizaciones locales de base, lo que significa que el régimen de Putin y el movimiento de Trump podrían morir con sus líderes.
Pero hay una salvedad: los hijos de Trump podrían beneficiarse políticamente durante décadas de la marca familiar, como ya ha sucedido con otros hijos de gobernantes personalistas que luego establecieron un gobierno personalista, como el presidente filipino Bongbong Marcos o la recientemente depuesta Sheikh Hasina de Bangladesh. Aveces, cuando un régimen personalista se derrumba, también se desmorona el Estado, como en Venezuela tras la muerte de Hugo Chávez. Pero hay motivos para tener esperanzas.
Como en el caso de Stalin, lo que viene después suele ser al menos un poco menos terrible. al menos un poco menos terrible. al menos un poco menos terrible. al menos un poco menos terrible. al menos un poco menos terrible. al menos un poco menos terrible. al menos un poco menos terrible..