El (hasta ahora) frustrado intento de Leonidas Vial por "sacar de la UTI" a Clínica Las Condes
El (hasta ahora) frustrado intento de Leonidas Vial por "sacar de la UTI" a Clínica Las Condes E l miércoles, Clínica Las Condes publicó la lista completa de los directores que asumirían --en teoría-el viernes en la junta de accionistas. Eran justo nueve, en realidad diez, pero solo por un intento fallido de uno de los accionistas por nominar al socio de LarrainVial Manuel Bulnes, quien luego se bajó de la carrera. Al final del día eran tantos nombres como cupos. El controlador --el grupo Auguri-nominaba al actual presidente Alejandro Gil, a la vicepresidenta Paola Bruzzone, y al gerente legal del family office de Cecilia Karlezi, Emilio de Ioanes. Repostuló también a los independientes Marco Arancibia y Juan Gamper, además de sumar al ingeniero de sistemas y ex secretario general de la Armada, Alexander Tavra.
Los otros tres puestos serían para Inversiones Castilla --vinculado a Segundo Gómez, que mantiene cerca de 8% de CLC--. Se trató del ya director de la entidad Christian Traeger, además de los abogados Sergio Yávar y Tomás Madrid. Tras el listado, la pregunta del mercado fue: ¿ qué pasó con LarrainVial? La empresa de inversiones había elevado fuertemente su participación: de 3,45% que tenía hace un año a 9,16% en marzo. Además, Jonás Gómez les había entregado el 3% de sus acciones en custodia, porcentaje que tradicionalmente iba a Auguri, lo que le permitía finalmente sacar siete directores. Es que ahora había un plan, que finalmente apuntaba a sacar a Gil de la presidencia y repensar la compañía.
Gil ha sido sindicado como responsable de la fuga de doctores y pacientes del centro médico, lo que ha acarreado débiles números: a diciembre, las pérdidas suman $3.401 millones, y los ingresos reportan una baja de 22%, luego que la ocupación bordeara solo el 35%. Uno de los artífices de esa estrategia había sido el socio de LarrainVial Leonidas (León) Vial; el empresario tiene experiencia en sacar a compañías de situaciones complejas, tal como lo hizo con La Polar. Hoy, el valor de la acción de CLC está prácticamente un 50% más bajo que hace un quinquenio. Y nadie descarta que, con un cambio, el potencial sea tremendo. "Su plan era reconstruir lo destruido. Dar confianza con un nuevo equipo y recuperar parte de los equipos que tenía la clínica", señala un cercano a Vial. Hoy, varias voces apuntan a que, sin un rescate, la clínica tiene un complejo futuro. Tal es así que la idea de Vial consiguió adeptos. De hecho, varios contactados aseguran que la estrategia inicial del accionista Herbert Spencer, quien justamente reveló en "El Mercurio" su idea de avanzar hacia un directorio de consenso, iba justamente de la mano de LarrainVial. Quienes conocen la interna, aseguran que Leonidas Vial se reunió con Gil y le planteó directamente lo que pensaba de su gestión y del devenir de CLC de mantenerse la actual gestión. El presidente de la entidad se defendió --aseguran testigos-y justificó su modelo y estrategia. Si embargo, estuvieron cerca de un mes en conversaciones, en los que, en algún minuto, Gil se habría abierto a la posibilidad de dar un paso al lado. De hecho, no solo Vial habló con él, accionistas y asesores también lo hicieron... pero al final del día nada funcionó. Y la junta de accionistas fue reflejo de ello. "Lo intentó, pero él (Gil) es incombustible. Mientras tenga el poder político, no hay nada que hacer", puntualiza un cercano a Vial.
Y añade: "No es posible formar equipos de categoría bajo la administración de Alejandro y así es como ha perdido un gran equipo de médicos que tenía la clínica, que eran lo más importante del patrimonio.
Recuperar eso es difícil y con él en la testera, imposible". Dado todo ese análisis, Vial optó por mantenerse alejado de la mesa... aún más, ni este último ni Spencer participaron de la junta, dejando al margen su poder accioniario, lo que hizo que, al final del día, al reducirse la base de títulos, Auguri sí tuviera el número para acceder a un séptimo integrante. Y a última hora, en la misma junta, propuso un nombre. De esta manera, Gil nominó a una persona en la misma junta. Se trató de la abogada Macarena Santibañez que justamente trabaja en el estudio de la actual vicepresidenta de CLC, Paola Bruzzone. Así, el directorio quedó intregrado por ellas dos, además de Gil, Arancibia, Gamper y Tavra por parte del controlador. Y Traeger y Yávar por Castilla. Previo a ello, el nombre que más había sonado para representar a Vial era el abogado Alfredo Alcaíno, pero eso no avanzó.
Un accionista lo resume así: "León Vial no estaba dispuesto a nombrar a alguien --ni a aportar sus acciones-para que, al final del día, estuviera en un lugar sin posibilidad de nada, donde el ambiente, además, es complejo". De hecho, la mesa --más allá de ciertos cambios-siguió bastante parecida a la anterior. Pero Leonidas Vial no era el único que tenía y tiene en el radar a la compañía; la Clínica Indisa también la ha sondeado, al igual que lo que ya trascendió de UC Christus. Pero contactados aseveran que con Gil a la cabeza, las intenciones no prosperarán. "Primero hay que sacar al paciente de la UTI. Pero todo este análisis es historia. Habrá que esperar", subraya un conocedor de las conversaciones. Un accionista es aún más lapidario: "Si sigue así, la clínica terminará cayendo en insolvencia.
Y en ese minuto, los interesados volverán a recoger los pedacitos". Quienes conocen a Vial aseguran que sus intentos terminaron, aunque otros apuntan a que eso no es tan claro... y que prevé seguir intentando convencer a Gil para rescatar la clínica. El (hasta ahora) frustrado intento de Leonidas Vial por "sacar de la UTI" a Clínica Las Condes "Su plan era reconstruir lo destruido. Dar confianza con un nuevo equipo y recuperar parte de los equipos que tenía la clínica", dice un cercano a Vial. RAÚL BRAVO Leonidas Vial. · MARÍA JOSÉ TAPIA. -