EL CARABINERO QUE HUYÓ CON LA NIÑA QUE CUIDABA
EL CARABINERO QUE HUYÓ CON LA NIÑA QUE CUIDABA [A NUEVA VIDA DE osE LUIS PAREDES EL CA RA $ INERO QUE HUYO CON LA NIÑA QUE CUIDABA En 2013 protagonizó una espectacular fuga, luego de que el Sename pretendiera entregar a otra familia a la pequeña a su cargo desde los 10 meses. A once años del mediático caso y hoy retirado de la institución policial, el ex uniformado habla de su nueva vida y observa la de sus antiguos compañeros de armas. “Cada vez es más difícil ser carabinero. Están desamparados”, afirma. Por Paula Palacios M.
T. EL CARABINERO QUE HUYÓ CON LA NIÑA QUE CUIDABA quien, en 2013, protagonizó una espectacular fuga con la niña que junto a su mujer Joselyn Bahamonde habían cuidado por más de dos años, luego de que el Sename pretendiera arrebatárselas para entregarla a otra familia.
Ocurrió que cuando la pequeña Monserrat tenía 10 meses en un hogar de menores en Chiloé, Joselyn se inscribió para ser guardadora y el Juzgado de Familia le entregó a la pareja su tuición por seis meses. Sin embargo, el cuidado de la menor se prolongó por dos años y medio, hasta la llegada de una orden judicial que les informaba que debían entregarla para su adopción. No tenía sentido ni lógica que nos negaran su tutela por no tener dos años casados, era nuestra hija! Fue entonces que decidimos luchar”, reflexiona José Luis desde su hogar en Ancud.
Una historia de amor, valentía y también de rebeldía por parte de un policía que decidió ir contra todo, incluso en contra del sistema, saltándose las normas y las leyes, arriesgando ser arrestado, acusado de secuestro y hasta de perder su trabajo con tal de quedarse con la pequeña Monserrat, a quien en 2016 lograron al fin darle sus apellidos. Ya han transcurrido once años desde el mediático caso y corrido bastante agua bajo el puente.
Monserrat ya es toda una adolescente: cumplió 14 años y cursa primero medio; la pareja, entretanto, se casó y tuvo otros dos hijos, Emiliano (10) y Alonso (5). José Luis, por su parte, tras una década en Carabineros, en septiembre de 2020 decidió renunciar a la institución, acusando cierto hostigamiento por algunos miembros de su jefatura.
En un comienzo, confiesa, su reinserción laboral en el mundo civil no fue fácil; trabajó como artesano, después en el área de mantención de un colegio en Ancud, y con el tiempo logró formar su propia pyme de construcción de obras menores y poda de árboles. Hoy, asegura, vive tranquilo, con sus propios tiempos y viendo crecer a sus hijos. Desde su hogar en Ancud, José Luis, su mujer Joselyn, y sus tres hijos: Monserrat, Emiliano y Alonso. SU CASO CONMOVIÓ AL PAÍS ENTERO. DE UNA U OTRA MANERA, A TODOS MARCÓ LA HISTORIA DE JOSÉ LUIS PAREDES, el joven carabinero de la 2 Comisaría de Puerto Montt. EL CARABINERO QUE HUYÓ CON LA NIÑA QUE CUIDABA “Cuando lo tribunales decretaron la entrega inmediata de mi hija y luego mi detención. Le pregunte a mi muier que haciamos, y me respondió: Haz lo que tengas que hacer.
No lo dudé, y partí a esconderme a Santiago con Monserrat”. Han pasado once años desde su mediática fuga, ¿cómo mira ese episodio a la distancia? Me emociona ver los sacrificios que hicimos... Todo ocurrió en momentos en que mi señora estaba internada en el hospital de Puerto Montt por un embarazo de alto riesgo; o sea, de un minuto a otro, nos quitarían a nuestra niña y podíamos perder a mi hijo. Por esos días había egresado de mi curso de carabinero, en Ancud, cuando lo tribunales decretaron la entrega inmediata de mi hija y luego mi detención. Le pregunté a mi mujer qué hacíamos, y me respondió: Haz lo que tengas que hacer. No lo dudé, y partí a esconderme a Santiago con Monserrat. Fueron 11 días a la espera de que el juez nos diera la custodia provisoria por un año más, mientras cumplíamos con los requisitos para adoptarla. Protagonizó ese episodio siendo carabinero, bastante temerario de su parte. Fue fuerte; me salté los protocolos y desafié todas las leyes que yo mismo como policía debía hacer respetar. Pero como bien me dijo un amigo por esos días, las cosas se rompen o se rajan”, y si me expulsaban de la institución, él me ofrecía trabajo en su empresa. Eso me dio tranquilidad, lo más importante era mi hija.
Es de suponer que a estas alturas su hija Monserrat ya conoce esta historia, ¿qué le ha dicho ella? Sí, llegado el momento le contamos, y para Monse es un orgullo lo que hicimos, le brillan sus ojitos. Con el tiempo conoció a su hermana mayor, por parte de su familia anterior. Nunca le negamos que había otra familia detrás... Fue una hazaña, aunque no generó ningún cambio en la Ley de Adopción ni en materia de guardadores, al contrario. Adoptar un niño hoy sigue siendo complicado, engorroso y burocrático. Muchos parlamentarios prometieron en su momento miles de cosas y no pasó nada, sigue todo exactamente igual que hace once años.
“NO VI UN FUTURO EN CARABINEROS Y ME RETIRÉ” Luego de cuatro años como funcionario de la 2a Comisaría de Puerto Montt, en 2016 José Luis fue trasladado a la tenencia de Chacao, donde permaneció tres años y medio. En 2018, en momentos en que su mujer tenía seis meses de embarazo de su tercer hijo, comenzó con síntomas de pérdida. Tuvo que ser trasladada de urgencia al hospital de Valdivia, hasta donde ella y el hijo que esperaban llegaron con un cuadro de septicemia extremo. extremo. Debieron intervenirla de urgencia, y el pequeño Alonso nació finalmente de 24 semanas, pesando apenas 790 gramos. Frente a ese escenario, José Luis cuenta que solicitó en el trabajo sus vacaciones pendientes para poder acompañar a su señora e hijo, sin embargo, le fueron negadas.
“Esa fue mi primera gran decepción con la institución; me negaron los días libres que me correspondían en un momento familiar muy complicado, por lo que tuve que pedir licencia médica por tres meses, que se tradujo después en una baja en mis calificaciones. Mi hijo estaba en incubadora incubadora con riesgo vital, debieron operario dos veces para reconstruirle reconstruirle su intestino”, recuerda sobre aquellos duros momentos. El punto de inflexión vino al año siguiente cuando, con el niño prematuro aún en estado delicado, decidieron trasladarlo, de un día para otro, a Santiago. “No correspondía, porque yo estaba casado casado y con hijos; debían haberme avisado del traslado, al menos, con seis meses de anticipación. Lo peor es que si apelas, más te sancionan. Sentí que era un castigo, no vi un futuro dentro de Carabineros y me retiré”, señala con cierta frustración. tCómo ve la institución hoy desde afuera? Complicada, cada vez está más difícil ser carabinero. En lo profesional, es un lindo trabajo, pero los sueldos no están al nivel de los riesgos y de dejar a una familia sin un padre o una madre. Ya no hay respeto por las autoridades, y en eso Carabineros también también tiene responsabilidad, luego de que el alto mando se viera envuelto en casos de corrupción.
Perdió credibilidad y perjudicó, de paso, la imagen del policía que está en la calle, que es el que realmente conoce a la gente e identifica de inmediato quién va a cometer un delito. ,Cuánto le impactó el asesinato de los tres carabineros en Cañete? Muy duro. Y también un arma de doble filo, porque tuvo que ocurrir una tragedia de ese nivel para que la gente volviera a confiar confiar y apoyar a la institución. Veo que están sobrepasados, tienen poco personal, no dan abasto. Aquí en el sur hay tenencias con 25 o 50 carros botados. Cada vez hay menos dotación. El policía se retira decepcionado porque o fue sancionado o se aburrió. Fue.
EL CARABINERO QUE HUYÓ CON LA NIÑA QUE CUIDABA Monserrat ya es toda una adolescente: cumirjmArn cumirjmArn mtr la pareja, entretanto, se casó y tuvo otros dos “Hoy vivo tranquilo, manejo mis tiempos, veo crecer a mis hijos y los voy a dejar al colegio”, cuenta José Luis Paredes sobre su vida fuera Carabineros. /1 plió 14 años y cursa 1 hilos, Emiliano (10) y Alonso (5). 61. EL CARABINERO QUE HUYÓ CON LA NIÑA QUE CUIDABA Distintas postales del sur, donde reside José Luis junto a su familia.
El expolicía formó su propia pyme de construcción de obras menores y poda de árboles. lo que ocurrió conmigo, hubo un hostigamiento por mis licencias licencias médicas que me vi obligado a pedir, ya que me negaron mis vacaciones. Lamentablemente, muchos se van por un tema monetario, o por situaciones estresantes que viven dentro de sus propias filas. ,A qué situaciones internas se refiere? Viven pensando que van a ser sancionados. Cada vez que van a un procedimiento creen que les puede traer consecuencias, consecuencias, y actúan con resguardo, muy limitados. Frente a situaciones situaciones complicadas, el policía se aleja del peligro para no perjudicar perjudicar su carrera. Carabineros debería dedicarse ciento por ciento a la seguridad, y el tema sancionatorio dejarlo en manos de una institución independiente, para que los funcionarios tengan derecho a apelar y no les signifique una sanción adicional. Están desamparados. Por lo visto, su decepción es grande. Ya di vuelta la página. Insisto, los sueldos no son equiparables equiparables a los riesgos que viven día a día. Hoy yo vivo tranquilo, manejo mis tiempos, veo crecer a mis hijos y los voy a dejar al colegio. Qué más puedo pedir.. “Fue una hazaña, aunque no generó ningún cambio en la ley de Adopción ni en materia de guardadores, al contrario. Adoptar un nino hoy sigue siendo complicado, engorroso y burocratico e e. 1;1] 41);JL. 1 L_I L ;0].