Queremos que nuestros estudiantes ¿aprendan o aprueben?
Queremos que nuestros estudiantes ¿ aprendan o aprueben? Si hay algo que destaca a los niños es su curiosidad por descubrir el mundo que los rodea y la escuela pasa a ser una parte fundamental donde sigan desarrollando esta curiosidad a lo largo de su formación.
La pregunta pregunta que debemos hacernos es ¿ por qué a medida que transcurren los años esa curiosidad se va perdiendo?, ¿queremos que nuestros estudiantes: aprendan o aprueben? aprueben? Quizás debemos considerar replantear la idea de cómo debe interiorizar la escuela esta semilla e ir más allá de memorizar, sino más bien, aprender a aprender.
Debemos dejar en claro que en la actualidad hay un mundo incierto, lleno de cambios, asociados a las nuevas tecnologías y el aprender se debe hacer con gran rapidez, incluso, las empresas han incorporado incorporado un nuevo concepto entre los requerimientos para sus candidatos llamado learnability, dcfinido como la capacidad de algunas personas para formarse continuamente continuamente sin que lo exija su empresa, es decir, que continúen aprendiendo por curiosidad o para estar más preparado en un mercado cada vez más competitivo, pero principalmente, por la propia convicción de que aprender es necesario, siempre. Si bien, tener un título profesional puede asegurar el conocimiento de este momento, lo más probable es que no nos pueda asegurar el necesario para cinco años más.
Por lo tanto, hay que valorar la capacidad de una persona de aprender rápidamente, el gusto por hacerlo y trasladarlo a nuestros estudiantes, entendiéndolo como una habilidad que se puede entrenar desde el aula, sin perder un gran motor de la educación que es el querer seguir aprendiendo.
De esta forma, transformar este acto en un hábito donde el interés no radique sólo en aprobar, sino más bien en aprender, viendo la imporJorge Natalia Pérez Cabrera Profesora de Matemática y Educación Tecnológica Magister en Didáctica de la Matemática Docente UST Los Ángeles tancia que esto tendrá en el futuro. Esto es (o debe ser parte de) la vida adulta.
Muchas veces los docentes enseñamos soluciones que se obtienen de manera rígida frente a una situación situación particular, pero basta que varíe la situación y esa respuesta ya no vale, se hace necesario buscar otras soluciones. No solo se trata de saber, también se trata de saber aplicar.
Si queremos que nuestros estudiantes aprendan en vez de solamente aprobar, debemos ir generando cambios dentro del aula, formar jóvenes competentes capaces de desarrollar la habilidad de aprender a aprender y que corno consecuencia natural esté el aprobar. Obviamente, todo lo mencionado requiere cambios y los protagonistas SOfl los estudiantes, pero también son los docentes.
Esto les exige prácticas diferentes, plantear la enseñanza desde otra mirada, enfocada en resolver problemas o realizar proyectos, siendo un proceso que requiere mucho esfuerzo y dedicación de su parte, a pesas de no tener el tiempo necesario para hacerlo, siendo una gran responsabilidad a la que no se le asigna la importancia que merece, si es que realmente queremos cambios.
No olvidemos que la educación es el proceso que consigue que la inteligencia con la que nuestros estudiantes llegan a la escuela se transforme en talento, permitiendo la evolución de nuestra sociedad sociedad y para sobrevivir, si bien es necesario aprobar se hace fundamental aprender al menos a la misma velocidad velocidad con la que cambia el entorno, sin dejar de lado todo lo que esto conlleva consigo, como la capacidad de movilizar las emociones necesarias, capacidad de perseverancia, esfuerzo ola flexibilidad para cambiar y mejorar si nos equivocamos..