LAS DEFINICIONES de Boric, Vallejo y Jackson sobre el estallido y los 30 años
LAS DEFINICIONES de Boric, Vallejo y Jackson sobre el estallido y los 30 años EN NUEVO LIBRO:que era exigente del porvenir y que no tenía necesariamente una caracterización ideológica, pero sí un contraste bien nítido entre elite y ciudadanía o entre elite y pueblo”. ¿Generación de reemplazo o colaboración intergeneracional?(Risas) No voy a volver a cometer los mismos errores... Creo que he aprendido mucho este año con eso, a pesar de que siempre he sido partidario siempre, desde que formamos un partido político del diálogo intergeneracional para conseguir los resultados grandes y las grandes mayorías.
Esa fue nuestra tesis política desde que nos formamos. (... ) “Siempre he sido de la tesis de que hay que dialogar intergeneracionalmente; por lo tanto, mi reflexión sería: fue necesario que emergieran movimientos que interpelaran a la institucionalidad para que se forzara un diálogo intergeneracional y por lo tanto hoy no creo enla tesis de reemplazo, sino que creo en los partidos que tienen una trayectoria y que estaremos en un diálogo político al menos en los próximos 30 o 40 años”. nALLICNAMNAHTANOJArriba, GabrielBoric, Camila Vallejo y Giorgio Jackson, en su época en el Congreso. A la izquierda, la portada del libro. 2011,2016, 2019. Fueron tres momentos de manifestaciones masivas que, de una u otra manera, y con distintas formas, marcaron la historia política de Chile.
Fueron procesos que, según la tesis de Juan Pablo Luna (cientista político y profesor de la UC) y Gloria de la Fuente (Politóloga, expresidenta de Chile 21 y actual subsecretaria de Relaciones Exteriores), están estrechamente relacionados entre sí. Sobre todo en los líderes que protagonizaron estos hitos, varios de los cuales están en posiciones de poder hoy.
“Por esa capacidad de convocatoria y por su constante crítica estructural al sistema económico chileno, el estallido social de 2019 parecía ser, en principio, el momento estelar de esta generación”, dicen en el libro “¿ Octubrismo? Cómo pensó y piensa la nueva generación que gobierna Chile” (Ed. Catalonia) que estará en el comercio desde el 10 de octubre.
Para responder esta pregunta, los autores entrevistaron, entre 2022 y 2023 a algunas de las figuras más destacadas de este grupo, para saber sus opiniones sobre la política, el estallido y los 30 años, entre otros temas. Acá, “El Mercurio”, que tuvo acceso al texto, selecciona parte de las respuestas destacadas de tres de estos personajes: el Presidente Gabriel Boric, el exministro Giorgio Jackson y la ministra vocera Camila Vallejo. GABRIEL BORIC: “SIEMPRE ME PARECIÓ UN ERROR LA CRÍTICA CERRADA A LOS 30 AÑOS”Desde el 2019 se ha hablado mucho de los 30 años y esto asociado a la transición.
Con ese trasfondo, ¿qué valora hoy de la transición y cuál sería su principal crítica a los 30 años?A mí siempre me pareció un error la crítica cerrada a los 30 años porque implicaba algo sobre lo que creo que no había plena conciencia, y es esto: ¿ qué había antes de esos 30 años? Esa pregunta también es importante. Cuando nosotros presentamos nuestro primer gabinete, se tomó una foto bien linda, muy colorida, no con paridad sino que con más mujeres que hombres (14 mujeres, 10 hombres), con juventud y también algo de experiencia. Esa foto la comparaban con la del primer gabinete de Aylwin, en la que estaban todos con trajes negros, puros hombres, y Soledad Alvear en un servicio que ni siquiera era ministerio.
Entonces decían: “Ahora sí que sí los 30 años”. Y yo decía: “La comparación no es esa, la comparación es que en la foto anterior a la de Aylwin eran puros militares y civiles condescendientes con los militares”. (... ) Nunca pude, nunca me salió el “No son 30 pesos, son 30 años”, tal como no me salía y siempre me violentaba mucho el: “Ya van a ver, ya van a ver, las balas que nos tiraron se van a devolver”. Yo decía: “Yo no quiero devolver balas”, y la Irina, mi compañera, me decía: “Ya, pero no le pidas una tesis historiográfica a la calle, también hay una pulsión ahí”. Si tuviera que identificar el principal problema de la democracia en Chile hoy, ¿cuál le parece más relevante?Hay varios. Uno es, en los últimos años, lo pendular de la política y los pocos incentivos que existen para que los bienes comunes puedan ser abordados conjuntamente. Eso se ve, en particular, desde el 2019, y tengo miedo de que se mantenga así. Me parece que esto se relaciona con el sistema político, donde la pérdida de poder de los partidos ha sido importante. La solución no está solo en exigir 5% como umbral para la representación en el Congreso, como se ha propuesto. Con eso va a haber menos partidos, pero estos pueden ser igual de malos. O sea, puede que esa propuesta mejore la estabilidad, pero no resuelve el problema de la democracia.
Consultado sobre si se arrepiente de algo, durante su carrera política, que comenzó en su colegio, en Punta Arenas, el Presidente responde: “Creo que un error que cometí mucho como diputado fue hacer un juicio demasiado rápido y moralizar lo político con liviandad. Creo que uno puede tratar de comprender las dificultades y hacer un esfuerzo por entender la mejor versión de lo que está diciendo la otra persona. Eso, como diputado, muchas veces creo que no lo hice.
Esa lógica es muy nociva”. CAMILA VALLEJO: “LES DECÍA A LOS MINISTROS DE PIÑERA QUE ESTO IBA A REVENTAR”“Es un poco pretencioso decir no me sorprendió, porque la magnitud que adquirió el estallido fue una sorpresa para todos. Pero no fue sorpresa el malestar que se reflejó”, dice la ministra vocera Camila Vallejo a los autores.
Ella agrega que “yo les decía a todos los parlamentarios y también a los ministros del gobierno de Piñera que esto iba a reventar, porque la gente no estaba dando para más; que no se podía sostener la vida con estos niveles de presión.
Salud mental, deudas, exigencias a las madres de familia por responder ante los hijos, delincuencia, agotamiento laboral y la falta de tiempo para la vida, todo eso estaba relacionado con esta cultura del correr, del inmediatismo, del éxito, etcétera.
Les decía que estaban generando un problema de plana mayor y eso estaba afectando a los trabajadores, a los niños, las relaciones humanas”. “Creo que un error que cometí mucho como diputado fue hacer un juicio demasiado rápido y moralizar lo político con liviandad”, dice el Presidente Boric. Y siendo eso así, pensando nuevamente en la lógica de los 30 años, ¿cuál es la principal crítica que harías a aquellos que empujaron la transición?Hay varias cosas. Primero hay un problema con los resultados.
Más allá de las voluntades de empujar cambios, porque no me atrevo a juzgar la voluntad de quienes tuvieron que tomar decisiones en su momento difíciles, lo cierto es que se profundizó el modelo neoliberal en varios aspectos; se perdió la noción de la importancia del diálogo y la participación social en la vida política; se terminó profundizando la distancia entre las instituciones representativas de lo político y la sociedad civil. Se abandonó la tarea de activación del mundo sindical, social, del mundo de la cultura.
GIORGIO JACKSON: “HOY NO CREO EN LA CRISIS DE REEMPLAZO”Para Giorgio Jackson, quien en la época de la entrevista para el libro era ministro de Desarrollo Social, “no hay 2019 sin 2011, porque en el 2011 se forja una narrativa política de exigencia, que algunos tuvimos la oportunidad de seguir construyendo más institucionalmente desde el Congreso. A esa narrativa se fueron sumando otras actorías que podrían ser más tradicionales, pero también absorbieron la crítica de 2011. (... ) Sin embargo, no creo que hubiese habido estallido sin una.
A 5 años del estallido, Juan Pablo Luna y Gloria de la Fuente escribieron “¿ Octubrismo?: ¿ Cómo pensó y piensa la nueva generación que llegó a gobernar Chile”, en el que entrevistaron a los líderes de la nueva generación política de izquierda, que protagonizaron y vivieron las movilizaciones de 2011,2016 y 2019.
Acá, un resumen de lo que dijeron el Presidente, su vocera y su exministro más influyente. | MATÍAS BAKIT EN NUEVO LIBRO: mayoría de personas que no tenían nada que ver con los partidos ni con los movimientos, pero que sí compartían este relato del que hablo: la narrativa crítica frente a la actualidad,