Autor: NICOLÁS GARCÍA DE VAL

Boicots, protestas y orgullo nacional: los efectos del “estilo Trump” en el resto del mundo
Boicots, protestas y orgullo nacional: los efectos del “estilo Trump” en el resto del mundo Cambios diplomáticos impulsados por el nuevo Presidente de Estados UnidosHan sido siete semanas de vértigo en la diplomacia estadounidense desde que Donald Trump volvió a la Casa Blanca. El republicano desató la guerra comercial con sus principales aliados, manifestó su intención de anexionar nuevos territorios y dio un giro de 180º en la estrategia de su país en Ucrania. Sin embargo, los países involucrados en sus decisiones no se han quedado de brazos cruzados y han tomado medidas de represalia por el “Estados Unidos primero” reforzado del mandatario. “Estados Unidos está de vuelta”, dijo Trump el martes en el primer discurso ante el Congreso de su nuevo mandato, en el que destacó las que considera las grandes iniciativas que ha implementado. Entre ellas, los aranceles tuvieron un papel estelar, con menciones específicas a México, Canadá y la Unión Europea (UE); tres de sus socios que han reaccionado con más fuerza a su estrategia de diplomacia dura. El anuncio de aranceles a Canadá así como las reiteradas sugerencias de Trump de que podría convertirse en el “estado número 51” de su país llevó a una reacción airada de su vecino del norte.
El Primer Ministro Justin Trudeau impuso rápidamente impuestos a los productos estadounidenses en represalia, y los canadienses impulsaron un boicot a EE.UU., con las cadenas de supermercado promoviendo los productos locales y sacando los estadounidenses de sus estantes. Hasta han surgido aplicaciones que permiten a los clientes escanear códigos de barras para identificar productos estadounidenses y evitarlos.
Algo similar ocurre en México, donde el gobierno y empresas revitalizaron la campaña “Hecho en México” para promover productos nacionales y grandes compañías como Walmart México y Grupo Modelo adoptaron un sello distintivo en sus productos para destacar los que fueron manufacturados de forma local. “Trump verá más reacciones de todos los países a los que impone aranceles”, sostuvo Mat-EE.UU. ” a los groenlandeses. “No estamos en venta y no pueden comprarnos”, fue la respuesta de Múte B. Egede, jefe del gobierno groenlandés. El territorio autónomo danés celebra el martes sus elecciones legislativas y el interés de EE.UU. por comprarlo ha situado la cuestión independentista en el centro de la campaña.
En su discurso, Trump también se ganó el rechazo de otro socio de su país, al manifestar, de nuevo, que su gobierno “reclamará el Canal de Panamá”, porque, supuestamente, China está controlando varios puertos en la zona. “No le dimos el canal a China; se lo dimos a Panamá, y lo vamos a recuperar”, manifestó. “¡El canal es panameño y seguirá siendo así! ”, escribió el Presidente panameño, José Raúl Mulino, en redes sociales en respuesta. El mandatario ha criticado varias veces los comentarios de su par estadounidense y negado sus acusaciones de un presunto control de China. Los aranceles cruzados, boicots y el creciente endurecimiento de la retórica de lado y lado provocará que “EE.UU. quede más aislado”, según Burrows. “Trump está sacando a EE.UU. del juego”, agregó. No es la primera vez que Trump tensa las relaciones con sus aliados, pues lo hizo también en su primer mandato.
Así lo planteó un sondeo de Pew realizado en 12 países en 2021, que mostró que solo el 34% de los encuestados tenía una opinión favorable de EE.UU. al final del primer mandato del republicano; contra el 62% que la tenía al inicio del gobierno del demócrata Joe Biden.
Pero la tensión entre EE.UU. y sus socios en este primer mes de gobierno de Trump escaló más que en su administración anterior y los analistas plantean que podría debilitar la unidad occidental y beneficiar a China y Rusia. “Hacer a EE.UU. Grande de Nuevo está rápidamente haciendo a EE.UU. solitario de nuevo”, resumió Hamilton. Un peligroso aislamientoAÍVSEGAMI Y TTEGESSERPECNARFhew Burrows, experto en política exterior del Stimson Center. Los socios europeos se distancianEl boicot a los productos estadounidenses también atravesó el Atlántico.
Uno de los países que replicaron la iniciativa es Francia, donde miles de sus ciudadanos llamaron a “apoyar la economía europea y francesa”. En una línea similar, en los últimos días han aparecido varios grupos en las redes sociales de Dinamarca y Suecia para ayudar a los consumidores a buscar alternativas, con decenas de miles de usuarios cada uno.
Aunque también fueron impactados por los aranceles con los que Trump dice que busca proteger la industria estadounidense, la molestia en el Viejo Continente está centrada más en las acciones que ha tomado el re-publicano con respecto a la guerra en el este europeo. Desde que volvió a la Casa Blanca, Trump ha cuestionado a su par ucraniano, Volodimir Zelenski, congeló la ayuda a Kiev y se ha acercado a Rusia. “EE.UU. no es un enemigo, pero está destruyendo el orden mundial”, lanzó ayer el premier francés François Bayrou. Alemania también ha manifestado su molestia ante los comentarios de Trump sobre Ucrania. El Canciller Olaf Scholz manifestó que es “peligroso cuestionar la legitimidad democrática” de Zelenski, luego que el Presidente estadounidense llamara “dictador” a su par ucraniano.
Más duro fue Friedrich Merz, líder de la Unión Cristianodemócrata y el más probable candidato a suceder a Scholz: “Es claro que a ese gobierno (el de Trump) no le importa mucho el futuro de Europa”. La molestia de los europeos seAYUDA A AFECTADOS El gobierno canadiense anunció ayer un programa de ayudas a las empresas afectadas por los aranceles de Estados Unidos. debe a que “Trump no distingue mucho entre aliados y otros países”, según Dan Hamilton, experto en relaciones trasatlánticas de la Universidad Johns Hopkins. “Su percepción de otros países está influenciada por su sensación de si podría intimidarlos o persuadirlos para que hagan algo para ayudar a EE.UU. ; no se siente atado por alianzas u obligaciones internacionales”, agregó. Otros funcionarios del gobierno de Trump también han generado molestia en Alemania, como el vicepresidente J.
D. Vance, que lanzó un discurso sumamente crítico con Europa durante laConferencia de Seguridad de Múnich, en febrero, y, especialmente, el dueño de X y asesor de Trump, Elon Musk, quien participó por videoconferencia de un mitin del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania. Controlar el Canal y comprar GroenlandiaEl otro tema que hizo saltar chispas en Europa fue la sugerencia de Trump de que podría comprar Groenlandia. Durante su discurso del martes, el republicano volvió a la carga con el tema y ofreció “darles la bienvenida a. México, Canadá y la Unión Europea han tomado medidas contra los aranceles y la política del republicano en Ucrania. Cambios diplomáticos impulsados por el nuevo Presidente de Estados Unidos canadienses han promovido los productos locales.